«Antes mandaban los gringos, ahora mandamos los indios y ya, resuelto el problema económico en Bolivia», dijo Evo Morales, y el auditorio rompió en un aplauso tan prolongado como atronador. No lo dijo en La Paz, delante de sus partidarios, ni en otro foro de su Patria Grande, América Latina, sino… en la vieja Europa, en el marco de la VII Conferencia Italia-América Latina-Caribe.
Ante un público variopinto -desde empresarios y diplomáticos italianos a periodistas y militantes de izquierdas- Morales denunció el sometimiento al FMI, cuyo papel, según sus estatutos, es fomentar la cooperación monetaria internacional, pero que solo “garantiza perjuicios y daños a los pueblos”. Una cosa, dijo el mandatario boliviano es «la necesidad de que los países pobres reciban créditos», pero aclaró que los mismos no pueden estar sujetos a chantajes. «En Bolivia se terminó la cooperación condicionada», aseguró. «Ya no es como antes, el Banco Mundial ya no chantajea y nos hemos liberado del FMI”.
Pero no ha sido la única declaración contundente de Evo. Durante su gira europea, que le ha llevado a Bruselas, el líder boliviano ha llamado «a la Unión Europea a que se defienda de EEUU y el FMI». En una entrevista concedida a Rusia Today, Evo Morales ha asegurado que Washington tiene la intención de enfrentar a los gobiernos latinoamericanos, y que se vale de algunos políticos europeos para promover planes de extrema derecha en América Latina. Para que no ocurra lo mismo en Europa, ha pedido a la UE que se defienda de sus políticas y de las de su instrumento, el Fondo Monetario Internacional (FMI).«Evo Morales ha pedido a laUEque se defienda de EEUU y el FMI»
Preguntado por las diferencias entre republicanos y demócratas ante la política latinoamericana, Evo ha afirmado que en el país presidido por Barack Obama «hay una política de Estado sobre América Latina que es acatada por todos los gobiernos y presidentes». Independientemente de quien esté en la Casa Blanca, EEUU «busca frenar la gran revolución latinoamericana», especialmente en Sudamérica, mediante el establecimiento de sus bases militares», denuncia Morales. «No aceptamos que los que vivimos en el sur seamos los guardaparques del norte».
«EEUU intenta dividir UNASUR de los países de la Alianza del Pacífico. La Alianza del Pacífico (dirigida por Washington) quiere privatizar nuevamente los servicios básicos, hablan nuevamente de libre mercado. Cuando EEUU fracasa frente a esos procesos de integración, intenta dividirnos», dice Evo, que insiste en que los pueblos del sur se merecen el sueño de «una América unida a través de la CELAC». «Una nueva OEA sin EEUU (…) para que América Latina sea una región de paz pero con justicia social», remata Morales.