De acuerdo a Amnistía Internacional, más de cien personas murieron en los enfrentamientos contra la Policía y el Ejército. «Amnistía Internacional ha visto fotografías que sugieren que algunas de las víctimas recibieron disparos a quemarropa en la cabeza y por lo tanto podrían haber sido arrestados» afirma el informe.
El informe también denuncia que “Civiles que se ahogaron desués de que fueron obligados a saltar hacia en el río”. Las revueltas estaban provocadas por el aumento en los precios de los alimentos, que castiga al tercer mundo.La protesta se inició con una huelga de taxistas por la subida del precio de la gasolina y la gente se fue uniendo para protestar por el aumento del coste de alimentos básicos como la harina o el arroz, fundamentales en la supervivencia de los sectores populares. Las protestas se extendieron de Douala a Yaoundé, la capital.La represión fue implacable. El presidente Paul Biya, en una especie de seudo dictadura, ha permanecido en el poder desde 1982 y cambió la constitución nuevamente para poder postularse a un tercer mandato.En su informe AI acusó hoy al Gobierno de Camerún de utilizar “de forma habitual” el homicidio y la tortura para reprimir la disidencia política.