Cargando...En nuevo ejercicio de provocación, el régimen norcoreano ha vuelto a desafiar las imposiciones de la ONU y de Washington y ha lanzado hasta seis misiles de medio alcance al Mar del Japón. El incidente tiene lugar después de que el jueves Pyongyang lanzara cuatro proyectiles desde su costa oriental. En abril Corea del Norte hizo saltar todas las alarmas internacionales al lanzar un misil de largo alcance sobre el cielo de Japón, y en mayo realizó la segunda prueba atómica de su historia. Las severísimas sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU, impulsadas por EEUU, sólo parecen embravuconar más al régimen.
Los misiles de alcance medio –entre 400 y 500 km de recorrido- se lanzaron desde la base militar de Gitdaeryong, cercana a la ciudad costera de WonsanTienen durante toda la mañana (el rimero a la 1:00 hora española) y se estrellaron en el Mar de Japón. Los lanzados el martes también cayeron al agua sin causar más daño. Pero evidentemente los lanzamientos no tenían un objetivo militar, sino político. Corea del Norte ya amenazó a la comunidad internacional de que tomaría represalias y endurecería su postura en caso de que la ONU endureciera las sanciones, tal y como ocurrió. Las sanciones permiten a los a los países miembros de la ONU inspeccionar la carga de cualquier barco que entre o salga de los puertos norcoreanos y cualquier cargamento que se envíe a Corea del Norte por aire, tierra y mar, con la autorización de destruir cualquier producto que viole las sanciones. También incluye la prohibición de toda venta de armamento –a excepción de armas ligeras- y la congelación de gran parte de los fondos de Corea del Norte en el exterior. De acuerdo a su estilo, extremadamente aventurero y temerario, Pyongyang trata de forzar a que se abran las negociaciones, no sólo respecto a su programa atómico, sino al férreo embargo comercial que el país sufre desde hace años. El régimen de Corea del Norte ha perdido –al menos en parte- el apoyo que hasta ahora les había dado Rusia y sobretodo China, ya que ambas naciones apoyaron las sanciones en el Consejo de Seguridad.