El plan de ajuste anunciado por Rajoy en el Congreso significa que la troika ha pasado a gobernar España. Y eso significa llevarnos por el mismo camino de Grecia: el hundimiento total de la economía productiva, la intervención completa del país por potencias extranjeras y el empobrecimiento generalizado del 90% de la población. CCOO y UGT, con el apoyo de muchas otras fuerzas sindicales, sociales y políticas, han convocado para el 19 de julio una gran movilización nacional con manifestaciones en toda España. ¡El 19-J, todos a la calle!
Porque el ajuste de 65.000 millones de euros condena a la economía española a un espiral destructiva. Lo han dicho hasta dirigentes de importantes organizaciones patronales como las del turismo, la automocíón, el textil, el pequeño comercio o las asociaciones de autónomos.
Porque en plena recesión de la economía española, con 5,6 millones de parados, este ajuste es poner una losa insoportable que sólo va a traer más paro, más depresión, menos inversión y consumo. Y, sobre todo, nuevos y mayores padecimientos para el 90% de la población: para parados, pensionistas, trabajadores, funcionarios, familias, autónomos, campesinos, estudiantes, profesionales, pequeños y medianos empresarios,….» El ajuste de 65.000 millones de euros impuesto por el FMI y Merkel condena a la economía española a un espiral destructiva»
Porque hemos entrado en una tercera fase, la de la intervención total de la economía y la política española por Berlín y el FMI. Y sus consecuencias para la mayoría de la población van a ser demoledoras, si no se lo impedimos.
Como hizo Zapatero en su día, ahora Rajoy también se justifica diciendo que lo hace porque “no hay más remedio”. Que aunque no le guste no hay más alternativa que rebajar salarios y pensiones, recortar el desempleo o subir el IVA.
Recortes, intervención y saqueo
¿Cómo que no hay otra alternativa? ¿Quién ha dicho que el único camino es saquear y empobrecer a la mayoría de la población?
No es verdad que sea necesario subir el IVA para cuadrar las cuentas, sino perseguir los más de 42.000 millones en impuestos que cada año defraudan las grandes empresas.
No es verdad que haya que rebajar las ya míseras pensiones y subsidios de desempleo ni recortar en sanidad y educación para ahorrar gastos, basta con retirar todas la exenciones y desgravaciones fiscales que permiten a bancos, monopolios, multinacionales y grandes fortunas pagar menos que pymes y autónomos y ahorrarse cada año 40.000 millones en impuestos que no pagan.
No es cierto que haya que quitar la paga extra a los funcionarios y despedir a miles de interinos para tener unas cuentas públicas sostenibles, sino eliminar todos los gastos innecesarios y superfluos en la administración del Estado y acabar con el derroche, los privilegios y la corrupción de la clase política para ahorrar bastante más de 30.000 millones cada año.
Es mentira que en España no haya dinero. Lo que pasa es que, como ha reconocido el mismo Rajoy en el Congreso, se lo están llevando crudo los bancos, sobre todo extranjeros, con el autentico saqueo –más de 90.000 millones este año– que suponen los usureros intereses que nos cobran por la deuda. Esta es la clave de todo.
Los recortes y ajustes anunciados por Rajoy tienen muy poco que ver con la recuperación de la economía española y mucho con que la gran banca extranjera pueda cobrarse lo que les debe la banca española.
Sólo que no son los Botín y compañía quienes van a cargar con la factura. Al haber inyectado más de 250.000 millones en dinero, avales y garantías públicas (a los que habrá que sumar los 100.00 millones de los fondos europeos), el gobierno, antes el de Zapatero y ahora el de Rajoy, ha transformado la deuda privada de la banca en deuda pública. Y pretenden cargar su coste sobre todos nosotros a base de rebajar nuestros salarios y pensiones, recortar en sanidad, educación, ayudas a los parados o a los dependientes y subir toda clase de impuestos y tributos al 90% de la población.
Cada medicina que paga un jubilado, cada 100 euros que deja de recibir un parado, cada paga extra que se quita a un funcionario, cada euro de más que paga un ama de casa en la cesta de la compra por la subida del IVA es dinero que va directamente a la cuenta de beneficios de los bancos alemanes, franceses, holandeses, británicos y norteamericanos, propietarios de más del 60% de la deuda española.
Por eso se niegan a hacer una auditoría ciudadana e independiente sobre la deuda; porque entonces los españoles tendríamos una idea exacta del auténtico saqueo al que estamos siendo sometidos al hacernos pagar, a costa de nuestro bienestar, nuestra salud y el futuro de nuestros hijos y nietos, una deuda que no es nuestra.