En un nuevo salto en su crueldad genocida, Israel ha perpetrado una nueva masacre en el campamento de Tal Al-Sultan, en Rafah, la ciudad al sur de la franja de Gaza donde más de un millón de ciudadanos se refugian de los ataques israelíes en el resto de la Franja.
El ejército israelí ha lanzado bombas contra las tiendas de campaña, prendiéndoles fuego y provocando que medio centenar de indefensos civiles -la mayoría mujeres y niños- murieran abrasados vivos, y otros cientos sufran gravísimas quemaduras, que ante la falta de recursos sanitarios, pueden resultar en nuevas muertes.
“Ha sido una noche sangrienta en Rafah. Se han producido múltiples bombardeos dentro de la ciudad. También ha habido ataques contra un campo de civiles en el área de Tal Al Sultán, donde MSF cuenta con un centro de estabilización de heridos. Ayer por la tarde comenzamos a recibir un enorme número de heridos. En total, 180 personas, 28 de las cuales llegaron ya muertas», relata desde la Franja la coordinadora médica en Gaza de Médicos sin Fronteras (MSF), Martina Marchio. “Estamos horrorizados por estos últimos acontecimientos que demuestran, una vez más, que no hay lugar seguro en Gaza. Seguimos pidiendo insistentemente un alto al fuego inmediato y permanente”. El campamento de Tal al Sultán estaba en una zona definida como “segura” por el ejército israelí, asevera MSF.
El ejército israelí lleva castigando duramente el sur de la Franja las últimas semanas, pero ha redoblado su saña genocida después del lanzamiento de cohetes sobre Tel Aviv por parte de Hamás.
Cabe recordar que cada masacre que perpetra el Estado de Israel contra la indefensa población gazatí lleva el sello «made in USA». El pasado 8 de mayo, en respuesta al inicio de las operaciones sobre Rafah, la administración Biden aseguró que «paralizaba» el envío de armas a Tel Aviv. Pero la «pausa» duró… unos pocos días.
El 15 de mayo, EEUU anunciaba un nuevo envío de armas a Israel de más de 1.000 millones de dólares, incluyendo munición para tanques, morteros y vehículos como la que ahora impacta contra las tiendas de campaña.
No es complicidad. El genocidio sobre Gaza tiene una doble autoría: Israel y EEUU. La superpotencia y su brazo armado en Oriente Medio: no se pueden entender el uno sin el otro.