Es evidente para todos que el ajuste de 65.000 millones de euros de aquí a finales de 2014, sumado a los ajustes y recortes ya hechos, condena a la economía española a un espiral destructiva, como han reconocido con alarma incluso dirigentes de importantes organizaciones patronales como las del turismo, la automocíón, el textil o el pequeño comercio.
En plena recesión de la economía española, con 5,6 millones de parados, la inversión bajo mínimos y el consumo hundido, este ajuste es poner una losa insoportable que sólo va a traer más paro, más depresión de la economía, menos inversión y consumo. Y, sobre todo, nuevos y mayores ataques y padecimientos para el 90% de la población: para parados, pensionistas, trabajadores, funcionarios, familias, autónomos, campesinos, estudiantes, profesionales, pequeños y medianos empresarios,….
Hemos entrado en una tercera fase, la de la intervención total de la economía y la política española por Bruselas y el FMI. Sus consecuencias para la mayoría de la población van a ser demoledoras.
«¿Quién ha dicho que el único camino es empobrecer a la mayoría?» Al rebajar la prestación por desempleo, una medida que es sólo una gota de agua en medio de los 65.000 millones, pero supone rebajar un 16% los ingresos de los parados, se está lanzando un claro mensaje: en esta nueva fase no se va a respetar a nada ni a nadie. Y pronto vamos a ver como la rebaja de las pensiones entra en el orden del día de los ajustes.
Como dijo Zapatero en su día, ahora Rajoy se justifica también diciendo que lo hace porque “no hay más remedio”, que aunque no le guste no hay otra alternativa que rebajar salarios y pensiones, recortar el desempleo o subir el IVA.
¿Cómo que no hay otra alternativa? ¿Quién ha dicho que el único camino es empobrecer a la mayoría de la sociedad?
No es verdad que sea necesario subir el IVA para cuadrar las cuentas, sino perseguir los más de 42.000 millones en impuestos que cada año se le escapan a Hacienda por el fraude fiscal de las grandes empresas.
No es verdad que haya que rebajar las ya míseras pensiones y subsidios de desempleo ni recortar en sanidad y educación para ahorrar gastos, basta con retirar todas la exenciones y desgravaciones fiscales que permiten a bancos, monopolios, multinacionales y grandes fortunas pagar menos que pymes y autónomos y ahorrarse cada año 40.000 millones en impuestos que no pagan.
No es cierto que haya que quitar la paga extra a los funcionarios y despedir a miles de interinos para tener unas cuentas públicas sostenibles, sino eliminar todos los gastos innecesarios y superfluos en la administración del Estado y acabar con el derroche, los privilegios y la corrupción de la clase política.
«La brutalidad de las medidas anunciadas por Rajoy exige una respuesta unitaria» Es mentira que en España no haya dinero. Lo que pasa es que, como ha reconocido el mismo Rajoy en el Congreso, se lo están llevando crudo los bancos nacionales y extranjeros con el autentico saqueo de miles de millones cada año que suponen los usureros intereses que nos cobran por la deuda. ¿Por qué se niegan a hacer una auditoría ciudadana e independiente sobre la deuda para que los españoles sepamos exactamente en concepto de qué han contraído la administración central, autonómica y local esa deuda? ¿Por qué no se transforman los bancos y cajas rescatados en una banca pública que reactive el crédito para potenciar el consumo y favorecer la inversión productiva que permiten crecer a la economía y crear empleo?
Claro que hay otro camino. El de defender la soberanía nacional para aplicar unas políticas que sirvan a las necesidades de nuestro país y a los intereses de la mayoría. Y no plegarse de forma genuflexa ante el FMI y Merkel. Rajoy ha instalado a los hombres de negro en los sótanos de La Moncloa. Sólo es cuestión de tiempo que ocupen el primer piso.
Hacia ahí nos conduce su lógica infernal. La hemos visto en Grecia: cuanto más te intervengo más te saqueo, cuanto mas te saqueo, más te hundo. Y cuanto más te hundes, más te puedo intervenir para saquearte mejor. Tenemos que detener esta espiral diabólica, porque ya sabemos como acaba.
La brutalidad de las medidas anunciadas por Rajoy exige una respuesta inmediata y unitaria. Todos, desde las fuerzas políticas (PSOE, IU, UPyD, nacionalistas,… incluidas también las agrupaciones locales del PP y sus afiliados y votantes) hasta los sindicatos, desde el 15-M hasta los movimientos sociales estamos obligados a salir de forma masiva y unitaria a la calle para demostrarles que no estamos dispuestos a consentir ni un ataque, ni un recorte, ni un ajuste más.
CCOO y UGT han convocado para este próximo jueves, 19 de julio, manifestaciones en toda España. Hay que convertirlas en un multitudinario éxito popular. Nuestro partido, Unificación Comunista de España, creemos que todos los esfuerzos que hagamos para conseguirlo son pocos. Las encuestas de urgencia ponen de manifiesto que el 62% de los españoles, prácticamente 2 de cada 3, están en contra de las medidas anunciadas por Rajoy. Tenemos que hacer visible en las calles este amplio rechazo. Y cuanto más unitariamente trabajemos, mayor será la respuesta.
Porque como ha gritado la marcha negra de los mineros al entrar en la Puerta del Sol estos días, si todos nos unimos para dar una respuesta unitaria, claro que ¡SÍ SE PUEDE! hacerles frente, responder a sus ataques y obligarles a retroceder.