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Sus nombres son Javitxu, Antonio, Adrián e Imad, además de dos manifestantes menores de edad. Son los 6 de Zaragoza.
Cuatro de ellos han sido condenados a cuatro años y nueve meses de prisión, sólo por el hecho de haberse manifestado contra la extrema derecha. No hay pruebas contra ellos más allá de las declaraciones -contradictorias- de los policías que los detuvieron horas después de los hechos, de manera aleatoria. Cumplen ya dos meses de cárcel y cinco años de calvario judicial.
Es uno de los casos más perversos de la violación de derechos y libertades que supone una Ley Mordaza, que convierte el testimonio policial en prueba de cargo, y que el gobierno del PSOE se ha negado a derogar, pese a haberlo prometido reiteradamente en las campañas electorales.
Los hechos son como siguen. El 17 de enero de 2019, Vox convocó un mitin en el auditorio de Zaragoza, y una manifestación antifascista protestó contra su celebración. La protesta fue disuelta violentamente con disturbios y cargas policiales y ahí debería haber acabado todo. Pero horas después de los incidentes, agentes de policía entraron en un bar y detuvieron a los seis jóvenes -violentamente, incluso desnudando a uno de ellos en plena calle- simplemente guiándose por el perfil.
Tras una primera condena a 6 años de prisión, el Tribunal Supremo condenó a los mayores de edad a cuatro años y nueve meses de prisión por delitos de desórdenes públicos, atentado contra la autoridad y lesiones a los agentes. Los menores de edad fueron condenados a 11.000 euros de multa y un año de libertad vigilada.
El tribunal dejó claro que «no existe prueba alguna que acredite que fueron los acusados y no otros manifestantes quienes agredieron a los antidisturbios». Toda la sentencia se basó en la palabra de los agentes.
«El objetivo era detener a varios jóvenes de manera aleatoria y meterlos en la cárcel. La actuación de los policías y los jueces no es casual ni inocente, responde a motivos políticos», ha denunciado siempre Francho Aijón, padre de Javitxu.
«La palabra de la Policía se transforma en hecho probatorio, porque no tienen nada más. Los testigos que llevamos los han ignorado y tampoco tienen fotos ni vídeos. Los agentes se contradicen, uno de ellos llegó a decir en el juicio que mi hijo tenía una cresta amarilla. Javitxu no llevó una cresta amarilla en su vida», asegura.
Otros testimonios afirma que escucharon a un mando de la policía dar órdenes en comisaría. «Id a la universidad y que la furgoneta vuelva llena».
Los 6 de Zaragoza no están solos. Su ciudad los arropa. El pasado 15 de junio unas 1.500 personas se manifestaban por las calles del centro de la capital aragonesa, y el manifiesto de la Plataforma Libertad 6 de Zaragoza ya ha recogido el apoyo de más de un centenar de colectivos y organizaciones -sindicatos, asociaciones de vecinos, partidos como IU, Chunta o Teruel Existe, y ONGs como Amnistía Internacional- y más de 10.000 firmas exigiendo al gobierno un indulto, entre ellos intelectuales y artistas como los actores Alberto San Juan, Pepe Viyuela o Rosana Pastor, el cantautor Nacho Vegas o el rapero Kase.O.
Desde estas páginas nos unimos al clamor contra este atropello y a la exigencia del indulto. ¡Libertad para los 6 de Zaragoza!
Más información en https://www.libertad6dezaragoza.info/
Carlos dice:
Que han metido en la cárcel a unos pobrecillos sin pruebas y por el simple y contradictorio testimonio de policías? 🙄
La madre que los parió
Como una portada de «el jueves». Decía el titular «la justicia española es un pitorreo» y sale un juicio diciendo el acusado «señor juez,yo es que me resbalé con una cáscara de plátano, caí encima de la mujer y sin querer la penetré 16 veces». Dice el juez » lo sabía,lo sabía,es usted inocente»
Ande, señor juez,deje de hacer el imbécil,sueltelos y meta a Rodrigo Rato en la cárcel