¿Preocupado por el crecimiento mundial? Los acontecimientos en el Lejano Oriente dan muchas razones para estar nerviosos.
La contracción económica de Japón es más severa de lo esperado; el aterrizaje suave de China, que ha sido ampliamente anticipado, todavía podría enfrentar obstáculos, e incluso las cifras de Taiwán y Corea del Sur tampoco lucen muy saludables (…)
Todo esto sugiere que la demanda mundial no es tan resistente como se pensaba originalmente y que la economía global aún podría enfrentar una recuperación mucho más turbulenta.