La vivienda seguirá entre las principales preocupaciones de los ciudadanos

La crisis de la vivienda… aún más grave en 2025

La brutal escalada de los precios de la vivienda ha pasado a ser el principal factor de empobrecimiento para las clases populares. Un atraco inmobiliario que tiene atracadores: bancos y fondos de inversión norteamericanos, y que va a ir a más este 2025.

Los datos sobre la vivienda con los que ha cerrado 2024 anuncian un año 2025 aún más complicado. Los precios de la vivienda, tanto en alquiler como en compra, no dan tregua y son cada vez más inasequibles. El precio de los alquileres creció un 11,5% en 2024, cuatro veces más que la inflación y casi el doble que el Salario Mínimo. Mientras que el precio de la vivienda nueva y de segunda mano subió de media un 4,4%.

En la última encuesta del CIS la vivienda ocupa el segundo lugar entre los problemas que más preocupan a los ciudadanos. Y se ha consolidado como el principal factor de empobrecimiento.

En la Comunidad de Madrid el alquiler subió un 16,4%, hasta el 12,4% en Cataluña y el 12,1% en la Comunidad Valenciana. En 26 provincias y 38 grandes capitales el problema se agrava más. El esfuerzo para pagar las cuotas de lapor ejemplo llegó al 67% o el 57% en Málaga…

Los informes oficiales y de las organizaciones relacionadas con la pobreza confirman la incidencia de los precios de la vivienda en el empobrecimiento.

El último informe de la Red de Lucha Europea Contra la Pobreza (EAPN) denuncia que “ahora el principal factor de empobrecimiento en España es la vivienda”. Según este informe en el último año otras 240.000 personas han pasado a estar en riesgo de pobreza y exclusión social y los costes de la vivienda han sido el factor principal.

El ‘VI Informe sobre Integración y Necesidades Sociales’ de la fundación FOESA de Cáritas señala que “la vivienda en uno de los aspectos de la exclusión social que más ha empeorado…, el esfuerzo para pagar el alquiler en las familias con menos recursos no para de crecer, se ha incrementado en casi un 50%”. “El 20% de los hogares con menos renta dedican más del 70% de sus ingresos al pago del alquiler (era del 48% en 2007)”.

Pero si 2024 ha sido malo, se espera que el atraco de la vivienda se agrave en 2025. Portales inmobiliarios como Idealista y Fotocasa anuncian una subida del precio de las viviendas de entre el 8% y el 10%, y entre el 7% y el 10% para los alquileres.

.

«Ahora el principal factor de empobrecimiento en España es la vivienda”. (Red de Lucha Europea Contra la Pobreza)

Claves del atraco inmobiliario

Hay una clave fundamental que está en la base de todo. Estamos ante un mercado de la vivienda controlado por bancos, constructoras, grandes fondos de inversión, especialmente norteamericanos o inmobiliarias que cotizan en el Ibex-35, y que lo mantienen sometido a una brutal especulación. Son los grandes constructores y tenedores de vivienda, y los bancos y fondos de inversión que los financian, los principales responsables de mantener una oferta controlada frente a una creciente demanda de vivienda para que suban los precios de alquiler y compra.

Los responsables del atraco de la vivienda no son “todos los caseros”. Son los grandes tenedores, es la oligarquía española y el capital extranjero, sobre todo norteamericano, dueños de los monopolios de la construcción, de los fondos de inversión y los fondos buitre, de 40 grandes inmobiliarias y de la banca han hecho del negocio de la vivienda una de sus principales fuentes de ganancias, monopolizado e imponiendo las condiciones del mercado de la vivienda y el alquiler.

Recientemente Javier Ruiz, jefe de Economía en la cadena SER, hacía una radiografía de los 2,3 millones de viviendas en alquiler particular: “La mitad de ellos son los pequeños caseros con una o dos casas la mayoría que apenas ganan 30.000 euros brutos con sus viviendas. La otra mitad son los multi-propietarios y grandes tenedores que tienen sus casas como negocio”. Entre ellos 400.000 casas en manos de fondos como los norteamericanos Blackstone, Cerberus y Lone Star…

La segunda clave es el raquítico parque público de vivienda social. Un 2,5% de vivienda social en España frente al 10% de media europea, con países como Austria, Dinamarca, Suecia y Reino Unido en torno al 20% o más y Países Bajos que llegan al 30%.

.

Una alternativa para la vivienda

Cualquier alternativa al problema de la vivienda tiene que dar respuesta a los dos grandes problemas que están en la base de todo. Al problema de la monopolización y control del mercado de la vivienda por bancos, fondos de inversión y grandes monopolios de la construcción y gestión inmobiliaria. Y por otro lado a la inexistencia de un gran parque público de vivienda social.

Las recetas que se ponen encima de la mesa por las principales fuerzas del país, el PP desde la derecha y el Gobierno-PSOE desde la izquierda, no dan una respuesta cabal a esos problemas.

La derecha lo fía sobre todo a recalificar suelo para las constructoras privadas. “Que lo solucione el mercado”, dicen desde la derecha. Pero el mercado, intervenido por los intereses de grandes constructoras y fondos de inversión, no construye las que se necesitan para no bajar el precio.

Desde el gobierno se ha hecho una ley para limitar los precios del alquiler en las “zonas tensionadas” pero de difícil aplicación al estar la vivienda transferida a las autonomías. Además el anuncio hecho por Sánchez de que el gobierno va a crear una gran empresa pública de vivienda está lleno de dudas.

El gobierno de Sánchez no ha aumentado la inversión en vivienda pública y tampoco ha utilizado los activos de la Sareb para impulsar el parque público de vivienda, a pesar de que el 43% de las casas del banco malo siguen vacías. Al contrario, ha entregado la gestión de 55.000 viviendas y suelo edificable de la Sareb a los fondos norteamericanos, Hipoges y Blackstone, para su gestión y venta.

Una alternativa estructural

Más allá de las medidas urgentes necesitamos una alternativa estructural al problema de la vivienda que garantice el ejercicio efectivo y universal del derecho a la vivienda como un bien esencial.

I. Necesitamos, como propone Recortes Cero, crear un gran parque público de vivienda social a precios asequibles, que arrebate a bancos y fondos de inversión su control exclusivo del mercado inmobiliario, contribuyendo a la construcción de vivienda social suficiente y a regular los precios de forma estable en beneficio de la mayoría. Y para ello es preciso la creación de una empresa pública de vivienda que construya y gestione vivienda social, rehabilite vivienda vacía, oferte las viviendas de la Sareb y recupere viviendas de protección oficial entregadas a los fondos buitre. Y con un objetivo: alcanzar en una legislatura la media europea del 10% de vivienda social, construyendo 1,8 millones de viviendas.

II. Si hay una reivindicación universal en todas las manifestaciones y en todos los territorios del país es que la vivienda es un derecho, y como tal debe ser tratado. Es el problema que más preocupa a los españoles y afecta al conjunto de la población, no hay familia que de una u otra forma, directa o indirectamente no le afecte. Por eso es inaceptable que la vivienda se utilice como arma de enfrentamiento político.

Existe un amplio consenso social en torno a este derecho. En 2024 emergió una potente fuerza democrática en todo el país exigiendo el derecho a la vivienda digna y asequible. Con participación de todo tipo de organizaciones ciudadanas, sociales, sindicales y políticas; y desde diferentes culturas políticas de la derecha a la izquierda.

Este difícil 2025 va a ser fundamental afrontar esta lucha desde ese consenso social unitario para hacer frente al atraco inmobiliario y avanzar en la alternativa para construir un gran parque de vivienda pública que ponga al alcance de las clases populares y los jovenes 1,8 milllones de viviendas sociales asequibles.

Deja una respuesta