El 6 de noviembre de 1975, la ‘Marcha Verde’, una turba de 350.000 civiles marroquíes escoltados por 25.000 soldados de las Fuerzas Armadas Reales de Hassan II cruzaron la frontera del Sáhara Occidental, adueñándose por la política de los hechos consumados de la todavía colonia española. Las hordas ocupantes desencadenarían durante 1976 una sangrienta represión contra la población saharaui, incluyendo bombardeos aéreos con napalm o fósforo blanco contra los campamentos de refugiados. Cuarenta años de ocupación, colonización y opresión contra los saharauis de El Aaiún y de exilio en El Tinduf, de violación cotidiana de los derechos humanos por el régimen marroquí, son ahora conmemorados con grandes desfiles militares por el Sáhara ocupado.
En 1975, con Franco agonizando y la transición española diseñada por Washington comenzando, España estaba iniciando el proceso de descolonización del Sáhara Occidental, que ocupaba desde 1958. España iba a entrar en un periodo convulso, y Washington y Francia -los dos valedores de la monarquía alauita- vieron con buenos ojos que Marruecos se anexionara un territorio rico en fosfatos, uranio, cobre y oro, arrebatándoselo al Frente Polisario y a Argelia, demasiado cercanos a la URSS. La coyuntura internacional era propicia para el sátrapa marroquí, y Hassan II se decidió a utilizarla, lanzando a cientos de miles de súbditos a atravesar la frontera custodiada por 5000 legionarios españoles, que bajo las órdenes de Juan Carlos I se replegaron del Sáhara, abandonando a sus habitantes a su suerte. De nada sirvieron las declaraciones de la ONU exigiendo la autodeterminación del Sáhara Occidental.«40 años de estado policial, de colonización marroquí y de atropello sistemático de los saharauis»
40 años de expolio de los recursos naturales del Sáhara, 40 años de exilio forzoso, de cuatro generaciones de saharauis condenados a vivis en tiendas de refugiados en El Tinduf (Argelia), al otro lado de un muro de más de 2700 km plagado de minas. 40 años de represión contra la población saharaui en los territorios ocupados, con más de 500 desaparecidos, con miles de casos de tortura documentada. 40 años de estado policial, de colonización marroquí y de atropello sistemático de los saharauis en el Aaiún. Eso es lo que festeja el nuevo tirano, Mohamed VI. 40 años bastan.