Que el precio de la luz es un atraco a la población no hace falta que lo certifique ningún juzgado.La estafa bajo investigación es el colmo que se suma a una lista de medidas (legales e ilegales) que amparan el saqueo a los consumidores para único beneficio de los monopolios eléctricos, los bancos y los fondos de inversión propietarios.
La UCO (Guardia Civil) ha elaborado dos informes que probarían que en el otoño de 2013 Iberdrola cerró sus embalses bloqueando el incremento de producción hidroeléctrica (la más económica de todas las que se generan), influyendo así de manera intencionada en la subida de la tarifa final de la luz.
El precio al que pagamos la electricidad se fija con unos baremos que mezclan el coste de energía de origen nuclear, eólica, solar e hidráulica. Si disminuye la producción de la más barata, el precio medio sube.
Ese año el otoño fue muy lluvioso y no tenía ninguna lógica cerrar la producción de electricidad desde los embalses, como se hizo justo en noviembre y diciembre.
El periódico digital El Confidencial hizo público que la UCO había descubierto en las oficinas de Iberdrola comunicaciones internas que avalarían la tesis según la cual, la compañía habría reducido artificialmente la capacidad de sus centrales hidroeléctricas para incrementar tanto el coste de su producción hidráulica que esta terminó siendo rechazada por el mercado. Como consecuencia, sus plantas de ciclo combinado, que producen a un coste mucho más alto, siguieron facturando.
Según la reglamentación de la energía, las plantas de Ciclo combinado se usan como compensador, y si hay bastante energía de otras fuentes más baratas, se detienen.
Como refrendo queda registrado que casi cien comercializadoras eléctricas estimaban para esos meses unos precios muy inferiores debido a las condiciones de viento y lluvia que apuntaban a un incremento de la energía de origen más barato. Solo una adulteración intencionada de la producción permite explicar que la luz alcanzara precios máximos.
Migajas y millones
La Comisión Nacional de Mercados y Competencia calcula que el beneficio que obtuvo Iberdrola con esa operación fue de 21 millones de euros, y fue multada por ello; pero además está abierto un proceso penal por delito contra el mercado y los consumidores.
Está bien que se hagan públicas y se sancionen estas prácticas; pero son sólo las migajas. La parte «ilegal» del atraco, porque la parte legal asciende a varios miles de millones.
Un reciente estudio del Observatorio de la Sostenibilidad señala literalmente que los gigantes eléctricos españoles doblan en beneficios al resto de empresas europeas, lideran las subidas del precio a los consumidores en los últimos diez años y encabezan la lista de las empresas que más contribuyen al cambio climático.
Un sector de la clase dominante española que se enriquece al amparo de la protección del Estado. Sólo Endesa, Gas Natural e Iberdrola acumularon 5.700 millones de euros en beneficios en 2017.
concepto | importe |
TOTAL FACTURA | 310,61 € |
Consumo real de electricidad | 228,00 € |
Incremento por cargos diversos | 82,61 € |
Alquiler de contador 17,04 € | |
Impuesto de electricidad 11,67 € | |
IVA 21% 53,90 € |
Datos de una factura real de enero de 2019
Y es que por cada 100 euros que pagamos en un recibo mensual, algo más de la cuarta parte son cargos e impuestos, estando además ya el precio de la electricidad fijado de manera que se garantiza siempre el beneficio para las compañías.
Por cierto, incrementos artificiales de precios que repercuten doblemente en nuestros bolsillos al comprar cualquier producto, pues los fabricantes y comerciantes trasladan al precio unitario de venta el coste de la energía que usan para la fabricación y venta de mercancías.
Medidas necesarias
Urge una eliminación del concepto «alquiler de contadores», pues estimándole 10 años de buen funcionamiento, y cobrado a 17 euros al mes, le supone al instalador un lucro de 2.040 por unidad. ¿Cuestan 20 contadores de luz de una finca más que un coche de gama media?
Urge también la reducción del IVA de un producto básico y obligado como la electricidad a un mínimo del 4% para hogares e industrias.
Y urge un planteamiento para recuperar la gestión pública (con cogestión de los trabajadores y usuarios) del monopolio eléctrico, vía recompra parcial, o expropiación con indemnización, para pequeños accionistas.
Una planificación unificada y un control público abaratarían notablemnte el precio de la luz. Cuanto mínimo en los 5.700 millones que se quedan hoy las grandes compañías.