Hasta el año 2035 Portugal no habrá devuelto el 75% de su rescate financiero, y al menos hasta entonces, 20 años más, seguirá directamente intervenido por la Troika -FMI, Comisión Europea y BCE-. Así lo reconoce el presidente portugués, Aníbal Cavaco Silva, en un libro con sus discursos de 2013.
Cavaco reconoce que Portugal, aunque no recibirá más fondos del “rescate” financiero a partir de junio, seguirá bajo “un escrutinio reforzado” y “con sus políticas económicas monitorizadas”. “Es una ilusión pensar que las exigencias de rigor presupuestario a Portugal dejarán de existir a mediados de 2014.”. Gobierne quien gobierne su política “estará condicionada de forma profunda en los próximos años por las directrices europeas”.
Resulta indignante la “naturalidad” con la que los gobernantes como Silva (o en España ZP y Rajoy) reconocen su sometimiento y sumisión a los dictados de Washington y Berlín. Acatar los dictados de la Troika y sus hombres de negro no es tan aséptico como “hacer lo que teníamos que hacer” que dice Rajoy, sino rescatar de la crisis a un puñado de banqueros y monopolistas, sobre todo de las grandes potencias, a costa del empobrecimiento y sufrimientos sin límite del pueblo… Y ¡Por 20 años más!