Apoyándose en la existente ordenanza festiva en Bilbao, aprobada por unanimidad en 2004, el PP y el PSE han presentado sendas proposiciones para el pleno municipal del próximo día 24 con el fin de conseguir que se aplique, y que así, en las fiestas del próximo año, se niegue la correspondiente licencia a las comparsas cuyas txosnas (chiringuitos), este agosto, apoyaron a ETA con carteles y fotografías. La impunidad ha dejado de ser «normal». Se ha pasado de las palabras a los hechos. Eso está ¡bien! ¡muy bien! Pero hay que aplicar la tolerancia cero en todos los ámbitos, en todos los sitios.
Porque lo sucedido en las fiestas de Bilbao y de otros lugares de Euskadi debe servir ara continuar y fortalecer la lucha contra ETA, su entorno y los que disfrutan con su connivencia, los que justifican, amparan y dan cobertura a los terroristas. No hay que bajar la guardia. Cada expresión etarra debe tener su respuesta. No hay que ceder ni un milímetro a la impunidad. Se ha empezado a retirar los carteles de propaganda de ETA, de sus presos y de su entorno de las fiestas patronales. Pero quedan otros ámbitos, otros sitios. Hay alcaldías con representantes etarras que con el dinero público alimentan actividades de apoyo a ETA y a su entramado. Hay sociedades gastronómicas donde no sólo se come sino que se hace apología de ETA y de sus presos. Hay clubes deportivos en los que no sólo se desarrollan actividades físicas sino que se permiten actuaciones de propaganda etarra. Hay que llegar a todos los ámbitos, a todos los sitios.