El iraní Asghar Farhadi gana su segundo oscar a la mejor película de habla no inglesa y se consolida como uno de los directores más relevantes del panorama internacional.
Farhadi que ya ganó el oscar a la mejor película de habla no inglesa en el 2012 por “Nader y Simin, una separación” nos regala “El viajante”. La película ha sido noticia por la ausencia del director iraní y e la actriz protagonista Taraneh Alidoosti en la gala de los Oscars en protesta por el veto migratorio de Trump. Pero el éxito de El viajante transciende la anécdota política.
El viajante es la historia de Emad (Shahab Hosseini ) y Rana (Taraneh Alidoosti) , una pareja moderna de clase media que tienen que mudarse de su apartamento porque el edificio corre peligro de derrumbarse aplastando a los inquilinos a causa de las obras de otro edificio próximo. En su nuevo “hogar”, un desconocido asalta sexualmente a Rana y lo vuelve a resquebraja todo. El viajante cuenta la historia de una familia, una mujer humillada y un hombre desgarrado; por eso la casa , “herida “ desde la primera escena, símbolo del derrumbe moral, juega un papel principal en la historia de la pareja. Como en otras películas el hogar y la ciudad, metáforas de la familia y la sociedad, tienen papeles centrales en las historias de Farhadi. El director iraní reflexiona en El Viajante sobre la humillación, la violencia y la culpa en la sociedad iraní. Una historia que a pesar de estar rodada en Teherán nos resulta totalmente cercana a la dura realidad que vivimos en España.
El título original de la película hace referencia a la obra de teatro de Artur Miller, “Muerte de un viajante” que interpretan en la ficción Emad y Rana. La obra de Miller refleja la complejidad de las relaciones sociales en el seno de la familia, sobre todo en la pareja formada por el viajante y Linda, su mujer. En el escenario Emad y Rana interpretan los papeles del viajante y su mujer. Y en la vida real se encontrarán con el viajante y su mujer y deberán decidir su destino. La obra de Miller funciona como un espejo dentro de la historia. Y en ese juego de espejos Emad interpreta cada noche en el teatro a Willy Lomad de Miller, aquel desconocido que asaltó a su mujer, con quién después se enfrentará en la vida real. «El acto final de El Viajante es uno de los finalas más desestabilizadores del cine de los últimos años. «
Farhadi hace un paralelismo entre Teheran y Nueva York al comenzar la película. Si Miller describe la rápida transformación de la América urbana que destruyó a la clase media aplastando a quien no se adaptase, Farhadi describe un Teheran frenético, anárquico e irracional a través de la vista que hay desde la terraza del nuevo piso de los dos protagonistas.
Farhadi toma el testigo de Abas Kiarostami, y se convierte con sólo siete películas rodadas en bandera del cine de su país. Anteriormente dirigió entre otras películas “El Pasado”, “Bailando en el polvo” (Dancing In The Dust), “Fireworks Wednesday” , “A propósito de Eli” y “ Nadir y Simin, una separación” su primer gran éxito internacional, galardonada con una lluvia de premios , entre ellos el oscar a la mejor película extranjera.
Resulta extraordinario que Irán, uno de los países del “eje del mal” produzca un cine tan estilizado y sublime. Una cinematografía que rompe la visión sesgada de un país fundamentalista y feudal. A pesar de las amenazas del prepotente Trump a Irán Fahardi vuelve a ganar el oscar convirtiéndose en el sexto director de la historia en ganar más de un Oscar a la mejor película de habla no inglesa junto con Federico Fellini, Vittorio De Sica ,Ingmar Bergman o Akira Kurosawa. Su próxima película producida por Pedro y Agustín Almodóvar que se rodará en España con Penélope Cruz y Javier Bardem es una de las más esperadas.«El Viajante reivindica a la mujer y el perdón en un viaje de la ira y la venganza a la compasión»
Acostumbrado a lidiar con la censura de su país Farhadi ha desarrollado un lenguaje sutil y un talento extraordinario para escribir personajes profundamente humanos. El acto final del Viajante es uno de los finales más desestabilizadores del cine de los últimos años porque te enfrenta a una situación y a un sentimiento que no esperabas. Farhadi teje entre silencios y miradas una nueva forma de suspense a base de emociones. El Viajante reivindica a la mujer y el perdón en un viaje de la ira y la venganza a la compasión que te deja vacío y desgarrado.
Julio Muñoz dice:
ES CERTERO. la verdad es que una verdadera prueba de amor se da después de una violacion para el cónyuge, esto nos hace pensar y nos da escalofríos sólo de plantearnos ponernos en el lugar de un hombre cuya mujer o una hija han sido violetas,EN LAS SOCIEDADES FEUDALES QUE PERVIVEN EN EL SIGLO XXI ESTO ES COMÚN Y COTIDIANO, no nos debemos llevar las manos a la cabeza por recibir estas imágenes del mundo islámico, no olvidemos que LA EDAD MEDIA TAMBIÉN SE VIVIÓ EN ESPAÑA Y EUROPA…