Según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas – CIS – el 75,3% de los españoles cree que las personas mayores reciben poca o ninguna protección por parte del Estado, y sólo un 17% considera que están bien atendidos. También un 77,1% considera que los jóvenes están poco protegidos por el Estado. Y más del 50 % cree que la protección por parte del Estado se debería dirigir de forma prioritaria a las personas mayores que viven solas, y en segundo lugar hacia los parados. Una encuesta, una noticia… y al cajón de los oídos sordos.
Ocuando un modesto espacio en los rincones de la noticia breve, los resultados de esta encuesta del CIS, no tienen más repercusión que la indiferencia o la consideración “solidaria” por parte de los responsables gubernamentales, como si esta opinión hiciera referencia a algún otro país, o a sus predecesores, porque al fin y al cabo “ellos han llegado para solucionar el desaguisado que otros hicieron”.El barómetro pone de relieve que casi la mitad de los españoles – 46,1% – están muy o bastante preocupados por el hecho de que una parte cada vez más importante de la población esté compuesta por personas mayores de 65 años. Al concretar las características que mejor definen a los mayores, un 36,2% destaca que no pueden valerse por sí mismos y necesitan cuidados, y un 23,4% que son diferentes, mientras que sólo un 3% cree que suponen una carga.Los españoles están preocupados por su propia vejez, por las dificultades para valerse por sí mismos y por el deterioro de la salud, y les gustaría vivir cuando sean mayores, en su propia casa, aunque sea solos. Sólo un 12,5% de los encuestados cita la residencia como primera opción y el 15,6% la casa de hijos o familiares… como poner números a las charlas de barra a la salida del curro. Además el 61,6% considera que las personas mayores no ocupan el puesto que realmente les corresponde en la sociedad.En una sociedad donde cada vez son más los mayores, y también mayor el peligro que corren los fondos de pensiones – públicos y privados -, no es de extrañar que aumente la percepción de peligro y desatención, dicho en términos de encuesta, y la indignación, dicho y ya está. En la Comunidad de Madrid existen 25 asilos en los que residen 5.400 ancianos. Recientemente se ha denunciado que por obras en ocho de ellos, en los que se alojan 2.600 personas, mil han tenido que trasladarse de nuevo a sus casas o a las de sus hijos.La ciudad de Cádiz dispone de un solo asilo que acoge a cien ancianos, otras 340 personas se encuentran en las listas de espera. No puede tratarse esto como un aspecto más de las condiciones de vida en las que vive la población, ni si quiera enmarcada en el actual proceso de crisis, pues algunos son datos de hace cinco o seis años que no han hecho más que empeorar.Tanto tienes, tanto vales… y si encima ya no produces, no vales nada.