Lo han vuelto a conseguir: otra vez la factura de la luz más cara de la historia. Los gigantes monopolistas de la electricidad del Ibex35 -Endesa, Iberdrola, Naturgy, EDP y Repsol- no contentos con llevar más de una década imponiéndonos una de las tarifas de la luz más caras de Europa, han logrado, con su nuevo sistema tarifario -el de las «horas cima, plana y valle»- intensificar un atraco sobre el conjunto de la población que parecía que ya no podía ir a más. La factura de la luz se ha disparado un 46,5% en lo que va de junio, acercándose hasta unos electrocutantes 90 euros de factura media.
Casi un mes después de que entrara en vigor la nueva factura de la luz -la conocida popularmente como la de la «lavadora a las dos de la mañana»- los precios siguen disparados en el mercado mayorista, afectando de lleno al recibo.
El 15 de junio la luz registraba un nuevo récord al situarse en los 94,63 euros el megavatio-hora. Extrapolando al mes completo los precios aplicados del 1 al 21 de junio, el recibo del usuario medio sería el más caro de la historia, alcanzando los 88,76 euros (impuestos incluidos).
Con esta extrapolación, la factura del usuario medio sufriría una subida interanual de 28,18 euros, un 46,5% por encima de los 60,58 euros que representó el recibo en junio de 2020. La factura del usuario medio del pasado mayo fue de 82,13 euros.
La bajada del IVA de la luz
La respuesta del gobierno ha sido bajar dos impuestos. Por un lado, y sólo de forma «temporal», el IVA de la luz ha dejado de soportar el tipo máximo (21%) y ha pasado al 10%. Por otra parte se ha suspendido el impuesto de generación eléctrica a las grandes empresas, para que éstas repercutan la bajada en la factura.
La bajada del IVA de la luz era una medida largamente demandada por sindicatos y organizaciones de consumidores. Pocas cosas, además del agua corriente, son productos más básicos que la luz eléctrica. Y sin embargo, el gobierno de Rajoy subió el IVA de la electricidad al 21%, como si fuera un «artículo de lujo».
En Francia el IVA de la luz es del 5,5%, en Grecia o en Portugal del 6%, en Italia es del 10%. Y sin embargo el Gobierno solo contempla esta medida de forma limitada -hasta finales de 2023, y para consumidores cuya potencia no supera los 6 kilovatios, no para empresas ni autónomos- para «aplacar» una insoportable subida de la electricidad que está generando una enorme indignación social. «Es lamentable que el PSOE se niegue a bajar el IVA de la luz de forma permanente», ha dicho Rubén Sánchez, portavoz de FACUA.
Y las medidas tomadas, con ser necesarias y positivas, son apenas un parche. Según FACUA, la bajada del IVA dejaría la factura media en 80,69€/mes. En resumen, la luz subiría 8,07€ menos. La subida interanual: 20,11€. Un 33,2%. Y lo mismo con la suspensión del impuesto a la generación eléctrica, que significaría apenas un euro y algo -«lo que cuesta un café», dice FACUA- en la factura del usuario.