El momento que todos los tripulantes de la Global Sumud Flotilla, junto a millones de personas expectantes, temían llegó ayer martes 1 de octubre, cuando comandos y barcos israelíes comenzaron a interceptar y abordar los barcos de la misión humanitaria, cuyos tripulantes no opusieron resistencia alguna.
La respuesta de Israel no ha pillado a nadie por sorpresa. Por eso, y dado el tamaño y el volumen de la expedición humanitaria -que incluye a casi medio centenar de barcos, y a cerca de 500 tripulantes de 44 países- la reacción ha sido inmediata y planetaria, saltando como un resorte.
De manera inmediata, en cuanto las noticias sobre el abordaje de la flotilla llegaban a los móviles, las protestas han salido a las calles de las capitales de medio mundo. Con manifestaciones, concentraciones y protestas espontáneas en Italia, Grecia, Alemania, México, Colombia, Argentina, Indonesia entre otros muchos países.

Las protestas más fuertes se han vivido en Italia, donde el 22 de septiembre ya se vivió una intensa jornada de masivas protestas por Palestina, contra el genocidio en Gaza y en apoyo a la Flotilla. Este viernes 3 de octubre hay convocada una huelga general en todo el país por el mismo motivo, y se adivina masiva.
Todo comenzó a primeros de septiembre, cuando un estibador italiano, dirigente del sindicato de estibadores de Unione Sindicale di Base (USB) de Génova, lanzó una contundente advertencia, ante la amenaza de acciones hostiles por parte de Israel hacia la Flotilla. «Si solo por 20 minutos perdemos el contacto el contacto con nuestros barcos o con nuestros compañeros y compañeras [en la Flotilla], bloquearemos toda Europa», prometió. Y es lo que está sucediendo.

En la noche del miércoles, miles de personas se manifestaron en Roma, Génova, Milán, Nápoles y otros puntos del territorio italiano, bloqueando las vías del tren. Los estibadores del puerto de Livorno han cogido un remolcador y literalmente han sacado a un enorme carguero -el Zim Virginia- del puerto.
Pero las protestas han sido también intensas en Grecia, con miles de personas manifestándose de noche en Atenas, o en España: concentraciones frente al consulado israelí en Barcelona, o frente al Ministerio de Exteriores en Madrid.
También fuertes protestas en Francia, Bélgica, Suiza, Turquía, Indonesia, Argentina y Alemania, entre otros, igual que en Bogotá, la capital colombiana, donde los manifestantes bloquearon las vías para denunciar las acciones de Israel. También multitudinarias las protestas en México, donde los manifestantes han reclamado a su Gobierno que reclamen a Israel la liberación de los detenidos.

