Independientemente de cómo se resuelva la moción de censura la alternativa de un gobierno de progreso para la regeneración democrática alternativo al gobierno de Rajoy es la que necesita nuestro país y sus ciudadanos.
Con la moción de censura se ha abierto una vez más la oportunidad de un gobierno de progreso apoyado por las fuerzas que suman 187 escaños (PSOE, UP y Cs, con Compromís y Coalición Canaria), más que suficientes para sacar adelante la moción de censura presentada por Sánchez.
De todos los escenarios posibles, esta es la opción que de verdad sirve a los intereses del país y que representa a la mayoría social, los 14 millones que votan a esas fuerzas, para acabar con la corrupción y regenerar la democracia, poner en primer plano medidas que redistribuyan la riqueza y defender la unidad frente a la DUI (Declaración Unilateral de Independencia).
La alternativa de gobierno de progreso es la que tiene condiciones objetivas para salir adelante a pesar de las dificultades. Es la “preferida de Sánchez” implícita al presentar la moción de censura. Además ninguna de estas fuerzas apoya la continuidad de un gobierno de Rajoy y no hay posibilidad de una salida a la “murciana o madrileña” con otro candidato del PP.
Rivera ha dicho que retira su apoyo a Rajoy y Pablo Iglesias que la moción tiene su apoyo “incondicional”. Pero solo podrá salir adelante si hay voluntad de remover todos los obstáculos que lo impiden.
Y eso exige que no se puede resolver en clave electoral, anteponiendo los intereses electorales de cada partido a los intereses generales del país y los ciudadanos.
Los resultados de una elecciones anticipadas pueden cambiar el orden de las cuatro fuerzas principales, como anticipan las encuestas colocando a Ciudadanos por delante y relegando al PP.; pero casi con total seguridad volverían a dejar la misma situación: que la suma de PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos sería la única alternativa al gobierno que quieren los grandes centros de poder nacionales y extranjeros que apuestan por unas elecciones “cuanto antes” para poder formar un gobierno que salga de una combinación de Ciudadanos con el PSOE o el PP.
Por otro lado, sería mala cualquier alternativa que salga adelante con los votos decisivos de independentistas y el PNV, solo puede ser un gobierno precario y rehén de quienes cuestionan la unidad. Y no porque sea lo que quiere Pedro Sánchez, que ha insistido en no negociar nada con los independentistas, sino porque un gobierno del PSOE con solo 84 diputados y sin el apoyo de Ciudadanos estaría sometido al chantaje permanente de sus exigencias al día siguiente de su constitución. Y daría alas a quienes como Puigdemont y Torra buscan la tensión y la fragmentación.
Esta posibilidad debería actuar sobre Ciudadanos para acercar posiciones con el PSOE.
Sin embargo, un gobierno de progreso tendría por delante unos meses y hasta dos años para abordar la regeneración democrática; una agenda social con medidas como las referidas a la subida salarial y de pensiones, la igualdad laboral, la lucha contra la violencia machista. Y fortalecer la unidad en la sociedad catalana y con el resto de España. Y un efecto positivo
Además tendría un efecto positivo en las próximas elecciones autonómicas y municipales de 2019 y crearía unas expectativas inmejorables para las generales de 2020 para aumentar la mayoría social de progreso
kenobi dice:
Halaaaaa,ánimo chicos,que es el acontecimiento más trascendental de los últimos años:» TENEMOS NUEVO PRESIDENTE DEL GOBIERNO: PEDRITO SÁNCHEZ»,jajajajajaja,lo que me estoy riendo de los peperos,halaaaaa,sacabó el régimen corrrupto de los monopolios del Rajoy,a ver si acabamos con los Recortes…….Viva Españaaaa!! https://www.youtube.com/watch?v=7Tb4F9D1W_k