Ramón Fontseré toma el testigo a Albert Boadella como director del Joglars y debuta con El coloquio de los perros.
Ácratas y libres, su humor cáustico e irreverente ha escandalizado a derecha e izquierda. Ni el consejo de guerra del franquismo, ni Jordi Pujol, ni Maragall, han conseguido domesticar un teatro trasgresor, siempre a contracorriente, contrapunto del poder. Els Joglars vuelven a los escenarios con una versión libre de “El Coloquio de los perros” con la dirección de Ramón Fontseré.
“Los viejos perros Cipión y Berganza a lo largo de su periplo han observado desde su mudez toda la condición humana, toda la miseria, todo lo ridículo de los bípedos, y antes de que se les acabe la noche y les desaparezca el don del habla cuentan la realidad auténtica.
Esos dos canes sabios contemplan con asombro como los insensatos humanos de esta sociedad se emperran en ascenderlos de su cargo de simples y dignos perros, para así poderlos tratar y tutear como si fueran personas. Seguramente su buen olfato, no en vano nacen con la nariz abierta quince días antes de que se abran sus ojos, les ha permitido seguir en su condición de animales sin apartarse de la naturaleza. Por el contrario los bípedos llamados racionales en su delirio mistificador y prepotente sobre el mundo animal parece que cada vez se alejan más de ella. Que sirva este Coloquio de los perros actualizado del gran Cervantes para poner freno a tantos desmanes y refocilarnos con el buen entendimiento de Cipión y Berganza.“ Ramon Fontseré (Bípedo)
Volvéis a Cervantes con esta obra. ¿Qué hace de El coloquio de los perros una obra tan actual?
Cervantes es un autor que siempre es actual porque los temas que toca son inherentes a la condición humana. Las vivencias de Cervantes en el siglo XVI son idénticas a las actuales. El desarrollo tecnológico ha cambiado pero la condición humana es la misma. Es un autor que todo lo que toca resulta actual.
¿Cómo habéis adaptado la novela al teatro?
Hemos mantenido la estructura narrativa de la novela ejemplar. Por ejemplo las peripecias de los dos perros con sus distintos amos. Los dos personajes hablan también con un lenguaje cervantino. Pero hemos adaptado y seleccionado los temas más atractivos que aparecen en el dialogo entre Cipión y Berganza para que resultasen más actuales.«El humor y la ironía son fundamentales para contar la vida»
Els Joglars construís como Cervantes las obras con un sentido anti trágico.
El humor y la ironía son elementos fundamentales para contar la vida. Sin esos elementos, sin esa especie de grasa que lo aligera todo la vida sería una auténtica tragedia. Cuando la tragedia no tiene un punto de humor cae en el melodrama. Todos sabemos que la vida tiene un principio trágico pero hay que darle la vuelta a la situación.
¿Cómo se construye un personaje como Cipión? ¿Cómo preparó el personaje?
Martina y yo hemos observado los gestos y expresiones de los perros. Si hubiésemos sido actores más jóvenes o domináramos el cuerpo como Michael Jackson hubiéramos representado a Cipión y Berganza de una manera más física, más plástica. Sin embargo ha sido un ejercicio muy interesante partir de buscar esa síntesis del perro en su forma de hablar entre humana y animal. Ha sido un ejercicio muy interesante porque hemos tenido que inventar una forma de hablar perruna pero entendible para el público.
Los hombres en la obra llevan siempre máscaras. ¿Qué significado tiene?
Porque estos perros sabios o filósofos son más humanos que sus amos. La máscara es también la visión de los perros de los humanos. Una visión hiperbólica, exagerada, terrible, burlesca y miserable. Los perros son más racionales y humanos y los humanos son más bestiales, más animales. Por eso la utilización de la máscara.
Citando a Cervantes: “Los lobos serían los pastores”. ¿Resumiría esta cita la esencia de la obra?
Cervantes lo utiliza para desmitificar las poesías bucólicas de la época. Había la leyenda de que los pastores eran gente culta y sensible que tocaban el laúd y escribían poemas para sus amantes. Cervantes desmonta esto y los describe como brutos e incultos. Los pastores eran los verdaderos lobos que mataban una oveja del rebaño para comérsela. El dueño del rebaño pegaba a los perros por no estar atentos a los lobos cuando la realidad era otra.«Hoy crecen Ubús por todas partes»
Justo lo mismo que en la actualidad cuando las verdades oficiales son el mundo al revés.
Claro, hoy es mucho mas exagerado y la picaresca sigue de plena actualidad.
Habéis ensayado durante 60 días en la cúpula. ¿Qué es la cúpula? ¿Qué importancia tiene que sea redonda?
Es un espacio escénico fantástico para ensayar. A 150 km de Barcelona es un espacio especial porque tiene muy poco de teatral. Es como una pica en Flandes. Es un espacio luminoso en contacto con la naturaleza que te permite concentrarte en el ensayo. Es esencial, no hay paredes opresivas y está rodeado de un paisaje precioso. El contacto con la naturaleza es muy importante. Parece una perogrullada, pero no lo es. Pensamos que con la técnica podemos superarlo y controlarlo todo, incluso la Naturaleza. Pero no es posible, nos lo creemos por esa falsa superioridad. El mundo animal es mucho más sabio en muchas cosas.
Trabajáis con un texto escrito a tres manos pero también improvisáis. ¿Cómo trabajáis la obra?
Yo ya había trabajado con un texto escrito en La controversia del toro y el torero. La escribió magníficamente Albert mientras estrenábamos otra obra. Tuvimos que trabajar así porque nos apremiaba el tiempo. Intentamos en esta obra que el texto no estuviera muy acotado, muy hecho para durante los ensayos trabajar con el método emergente y encontrar nuevas variaciones que da riqueza y empaque a la obra.
¿Qué es el método emergente?
Es partir de una sinopsis muy sencilla, no con una obra, con todas las acotaciones, y a través del juego ir construyendo, escribiendo la obra. No es la recreación de un texto, que es lo que acostumbra a ser el teatro, sino la creación de algo nuevo.
Toma el testigo a Boadella en la dirección de El Joglars y debuta como director después de 30 años en la compañía. ¿Puede un actor o un director formarse al margen de una compañía?
Bueno, yo ya había dirigido otro espectáculo el verano pasado. No creo que sea imprescindible, es perfectamente posible si uno conoce el oficio y tiene la vitalidad, la energía el temple para dirigir una obra interesante.
¿Cómo afecta la crisis al teatro?
Bueno la crisis siempre ha estado muy cercana al actor. Estamos muy acostumbrados a esto, de hecho ser actor siempre ha sido una mala noticia. Creo que debe haber más raciocinio, una revista porno tiene un 4% de impuesto, una entrada de teatro un 21%.
¿A quién vestiría usted hoy de Ubú?
¿De Ubú?…. no sé, hoy crecen Ubus por todas partes y en Cataluña cada dos por tres. Se van multiplicando.