Los inspectores de Hacienda ya han fijado la cuantía del botín: se dejarán de recaudar 7.000 millones de euros gracias a la amnistía fiscal.
Con la amnistía fiscal para los grandes defraudadores, el gobierno quiere blanquear 25.000 millones de euros, a cambio de que tributen un ridículo 10%, sólo 2.500 millones para las arcas del Estado. Pero si el Estado pusiera los medios necesarios para perseguir a los grandes defraudadores, ingresaría 7.000 millones más por cada 25.000 millones aflorados. Una pequeña cantidad si tenemos en cuenta que varios informes hablan de 250.000 millones de euros en dinero negro, el 72% de grandes fortunas, corporaciones empresariales y grandes empresas. El Supremo dice que con más recursos podría recaudar 4.000 millones adicionales resolviendo demandas de fraude fiscal. Si sumamos son 11.000 millones, más de lo que pretenden “ahorrarse” recortando en sanidad y educación. «El Supremo dice que con más recursos podría recaudar 4.000 millones adicionales resolviendo demandas de fraude fiscal»
Estos días se va a volver a presentar la demanda para que la familia Botín devuelva el dinero defraudado en las cuentas suizas, proceso paralizado durante el gobierno de Zapatero y Rubalcaba, que ahora pone el grito en el cielo. El presidente del Santander, su hermano y otros diez miembros de su familia están acusados de evadir impuestos por los más de 2.000 millones de euros en cuentas del HSBC en Suiza.
¿Amnistía para los defraudadores o poner todos los recursos necesarios y cambiar las leyes para perseguir el fraude de las grandes fortunas, grandes corporaciones y grandes empresas? Hacienda no ingresaría dos mil, ni siete mil, sino 37.000 millones de euros sólo con aflorar la mitad del dinero negro.