El 100 % de Autopistas del Atlántico podrí­a quedar en manos de capital americano

Las autopistas gallegas han iniciado la cuenta atrás para cambiar nuevamente de manos y esta vez para acabar deshaciendo cualquier vínculo con Galicia. Y es que la constructora Sacyr, Novagalicia Banco y el resto de accionistas minoritarios de Itínere -concesionaria de la que dependen tanto la autopista del Atlántico como Autoestradas de Galicia- han iniciado un proceso para vender su participación en la gestora de infraestructuras, que desde el 2008 cuenta como accionista mayoritario (con el 54 % del total) con un fondo gestionado por el banco norteamericano Citi.Como primer paso para hacer más atractiva la adquisición de Itínere, se trata de sanear sus cuentas a través de una ampliación de capital, que se someterá a aprobación en la junta extraordinaria convocada para el próximo 25 de septiembre. Los socios reducirán la deuda de Itínere canjeando por capital los préstamos participativos concedidos en su día a la filial.La operación, por la que la firma se liberará de 1.000 millones de euros de deudas, se hará a un precio de 0,49 euros de valor nominal y con una prima de emisión de 3,47 euros, según se especifica en el orden del día de la junta extraordinaria.Sacyr posee el 15,45 % de las acciones, NCG el 23,8 %, y Liberbank el 5,8 %, mientras que el 54 % está en manos norteamericanas, a través de Arecibo, fondo gestionado por Citi y en el que también participa Kutxabank.Según explicaron fuentes de Sacyr, los minoritarios llevan tiempo, «ocho o diez meses», en posición vendedora, por lo que encargaron al banco de inversión JP Morgan el diseño de la operación. Aunque son conscientes de que no es el mejor momento para vender, dada la situación del mercado, los minoritarios consultados insistieron en que su intención es «firme» y que esperan que el canje de los préstamos por capital «ayude» a propiciar la venta.Desde Sacyr aseguraban ayer desconocer cuál era la posición de Citi al respecto, pero se mostraron convencidos de que «como mayoritarios, y dado que tienen la gestión, no pondrán ningún problema».Por su parte, las fuentes consultadas en NCG matizaron que aunque el objetivo es salir de Itínere, no lo harán a cualquier precio. «Se trata de hacerlo tanto en unas determinadas condiciones económicas como de proyecto de futuro, es decir, que nuestra salida no suponga un problema para la sociedad», explican, para añadir que «hasta ahora las participaciones que hemos vendido (Pescanova, Geriatros, Reganosa…) se han hecho siempre en esas condiciones, y esta no va a ser diferente».