Se trata de un auténtico triunfo protagonizado por los ciudadanos y las asociaciones de consumidores, no de los políticos ni los sindicatos. Varias organizaciones de consumidores vienen denunciando las irregularidades en las estimaciones de consumo de las eléctricas desde la entrada en vigor de la facturación mensual
Es un latrocinio a las familias esañolas de sobrefacturación eléctrica que sumado cliente a cliente son millones de euros al mes. La CNE ha aprobado un expediente informativo con recomendaciones a las comunidades autónomas con el fin de que, “si lo consideran oportuno”, pidan a las eléctricas que rehagan todas las facturas. Pero no debemos pararnos aquí. Las eléctricas deben devolver cada euro que han sobrefacturado y con intereses, porque se han quedado por adelantado con el dinero de millones de clientes. No se trata de que se le den “recomendaciones” a las eléctricas. Debemos conseguir que se siente un precedente jurídico y popular. Por otra parte, podemos dar la batalla contra la crisis desde la movilización ciudadana, popular de organizaciones cívicas, vecinales y otras. Esta es la principal conclusión que debemos extraer para trasladarla a todos los terrenos en los que se recrudecen las agresiones monopolistas.