Sí, un espectacular desarrollo técnologico al que han llegado cuatro jóvenes del municipio catalán de Mollet. Han traducido su investigación en patente, y con una inversión inicial de 60.000 euros conseguidos por cofinanciación de particulares, arrancaron la producción industrial.
Una maceta, con un planta y una pila bacteriológica que, mediante reacción química, transforma los residuos emitidos por el vegetal en electridad suficiente para recargar tres teléfonos móviles al día.
Y no se detienen ahí: una jardinera de apenas un metro cuadrado, produce 40 wattios por hora. Una revolución en la generación de energía.
Pueden verlo en este enlace: https://www.youtube.com/ watch?v=UIBQ49extFE
Si el camino de eliminar el despilfarro hace aflorar el capital, su inversión en investigación, patentes y producción industrial es la base de la creación de riqueza al servicio de la humanidad, el país y quien lo produce, generando empleo rentable, no subvencionado, suficiente para acabar con el paro. Según cálculos de Recortes Cero, con el ahorro de gastos innecesarios del Estado daría para crear un millón de estos puestos de trabajo.