Las masivas movilizaciones populares

Una España movilizada

Mucho se habla de la crispación y de lo movilizada que está la extrema derecha. Y aunque esto no deje de ser preocupante, lo cierto es que la que está permanentemente movilizada -con cientos de miles de personas en las calles- es la mayoría social progresista, que marcha por la vivienda, la sanidad, la educación, la paz, por sus condiciones de vida y trabajo y por sus libertades y derechos

Nuestro país es un hervidero de movilizaciones sociales: miles, decenas de miles o cientos de miles de ciudadanos se manifiestan todos los meses en convocatorias de lucha por la vivienda, la sanidad, la educación, por los convenios y los salarios… Por la Paz, contra las dos guerras en Palestina y Ucrania… Y ahora también con el surgimiento del movimiento de voluntariado social, encabezado por los jóvenes, de ayuda solidaria a los afectados para hacer frente a la crisis humanitaria provocada por la DANA y la inacción de las autoridades en la gestión de la riada,

Cuando se pretende encasillar al país y a la población en el enfrentamiento y la crispación política, en la corrupción y el ruido “trumpista” de la derecha y la ultraderecha… Cuando se intenta ocultar al pueblo y sus demandas, emerge desde múltiples sectores una mayoría social plural, progresista y solidaria que se moviliza dirigida por la izquierda.

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Más de 700.000 personas se han manifestado por la vivienda en los últimos 8 meses

Manifestación histórica por la vivienda en Barcelona

Una nueva oleada de manifestaciones continúa extendiendo el movimiento popular por la vivienda.

Los 200.000 manifestantes de abril en Canarias abrieron camino, en junio fueron los 30.000 de Málaga, los 50.000 de Mallorca en julio, y en octubre 140.000 en Madrid y 50.000 en Valencia siete días después.

En noviembre nuevas manifestaciones se convocaron el día 9 en Málaga, Sevilla y Cádiz (Albacete y Murcia se suspendieron por la DANA). La del 23N en Barcelona ha sido una manifestación “histórica”, 170.000 manifestantes según fuentes de la organización, que consideran irrisoria la cifra de 22.000 personas dada por la Guardia Urbana.

La manifestación, convocada por el Sindicat de Llogaters-Sindicato de Inquilinas, ha contado con el apoyo de los grandes sindicatos y entidades vecinales de toda Cataluña. Bajo el lema ‘¡Se acabó! Bajemos los alquileres’ han protestado por el precio de los alquileres y reclamado el derecho a una casa para vivir.

Organizados en 30 columnas han ido llegando a la manifestación representando a numerosos barrios de Barcelona, pero también a los vecinos de los pueblos del Pirineo, municipios de la Costa Daurada o de la Costa Brava, donde los trabajadores del sector turístico no tienen dónde vivir. Y de ciudades como Tarragona, Girona o Reus.

La protesta ha mostrado cómo la crisis habitacional rebasa las grandes ciudades y se extiende por toda Cataluña. Es la única comunidad autónoma donde se aplican los precios del alquiler previstos en la Ley de Vivienda estatal. Pero aún así la vivienda es cada vez más inaccesible. El precio medio de los alquileres supera el Salario Mínimo. Los alquileres han subido tres veces más que los ingresos de las familias en los últimos 20 años.

Los alquileres han subido tres veces más que los ingresos de las familias en los últimos 20 años, el precio medio supera el Salario Mínimo.

Una situación claramente reflejada en las pancartas, en las consignas como “No se entiende, gente sin casas y casas sin gente” y en las principales reivindicaciones: la exigencia de una rebaja del 50% en los precios del alquiler; contratos indefinidos; o recuperar pisos vacíos, turísticos y alquileres de temporada para los vecinos.

El 23N también se han llevado a cabo manifestaciones en Jerez (Cádiz), convocada por la plataforma ciudadana ‘Jerez por la Vivienda’. En Burgos, donde se ha anunciado la creación del ‘Sindicato de la Vivienda de Burgos’. Y dos en Asturias, en Gijón y en Oviedo.

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Manifestaciones en las 8 capitales andaluzas

Muévete por tu salud”

Miles de personas salen a la calle en Andalucía convocadas por la Marea Blanca de cada provincia bajo el lema “Muévete por tu salud”. Las manifestaciones recorrieron las capitales andaluzas en protesta por el creciente deterioro de la sanidad pública, especialmente la Atención Primaria.

Manifestación de la Marea Blanca en Sevilla.

Las Mareas Blancas, apoyadas por los principales sindicatos, CCOO, UGT, SATSE…, movilizaron a más de 50.000 personas, según fuentes sindicales y de las mareas. Sevilla fue la manifestación más numerosa.

Según el portavoz de Marea Blanca de Sevilla, Sebastián Martín: “Existe una estrategia del gobierno andaluz que ha iniciado una reconversión sanitaria buscando un cambio del modelo”, que implica la destrucción del sistema público de salud como el que hemos tenido hasta ahora. Las mareas lo concentran en cinco denuncias.

Las listas de espera. En junio de este año, más de 1 millón de andaluces estaban en las lista de espera de una consulta médica o una operación quirúrgica, un 24,5% más desde la llegada del PP.

Hay en marcha una reconversión del sistema sanitario que deteriora el sistema público de salud

La falta de recursos. Andalucía es ya la autonomía que menos invierte en la Sanidad Pública: 1.548 euros por habitante al año frente a los 2.822 euros de la media española.

El avance de la privatización financiada con dinero público. En los presupuestos para 2025 aumenta un 21,5% el dinero para “asistencia sanitaria con medios ajenos”.

El abandono de la Salud mental. Y la falta de mejoras en las condiciones laborales de los sanitarios y contratación de especialistas.

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En Valencia: la enseñanza contra la gestión de la DANA

Escoles sense fang”

Los manifestantes, convocados por la Plataforma en Defensa de l’Ensenyament Públic, muchos de ellos provenientes de los colegios ubicados en la “zona cero”, han coreado lemas como ‘Volem tornar a classe’, ‘Escoles sense fang’, ‘Escola enfangada, Conselleria amagada’ o ‘Rovira y Mazón, dimisión’.

En declaraciones a los medios antes de arrancar la marcha, José Manuel Casermeiro, representante de Fampa Valencia, ha criticado el “desastre” y la “prisa” de la Conselleria de Educación por “dar la orden” de apertura de los centros educativos afectados por la DANA, mientras que “no ha puesto los medios de limpieza” ni tampoco de “desinfección” para dejar en condiciones las instalaciones tras el paso del temporal.

De hecho, ha asegurado que han tenido que ser las propias familias y los profesores, además de los voluntarios, los que se han encargado de la limpieza de los centros y ha advertido: “No se puede volver a un centro de estudio si no se ha desinfectado y si no se ha hecho un informe en el que las condiciones en las que se abra sean saludables e higiénicas”.

Los manifestantes, entre quienes se encontraban el síndic de Compromís en las Corts, Joan Baldoví, o el portavoz de Educación del PSPV en el parlamento autonómico, José Luis Lorenz, reclaman una vuelta al cole “segura” después de la tragedia y han querido mostrar el “descomunal” malestar de la comunidad educativa. Consideran que el titular de la Conselleria está “incapacitado” para afrontar la crisis sobrevenida, al tiempo que denuncian la “falta de criterio” por parte de Educación.