¿Qué cambios y amenazas nos trae la era Trump? ¿Qué alternativa necesitamos para defender los intereses del pueblo?
Estas preguntas, que se plantean muchas personas progresistas, son las que ha abordado la Conferencia Política de Unificación Comunista de España.
Para conocer sus conclusiones hablamos con María José Salvador, Yol, responsable del Comité de Formación de UCE y de la presidencia que ha dirigido los debates de la Conferencia.
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P: Habéis celebrado, en pleno mes de agosto, una Conferencia Política con un amplio abanico de debates y actos. ¿Cuáles eran sus objetivos?
R: Está enmarcada dentro de la celebración del IV Congreso de UCE. Ahora hemos abordado una primera etapa. Definida en el lema de la Conferencia: “Una alternativa revolucionaria frente a la era Trump”.
Sus objetivos se concentran en dos palabras: línea y cuadros.
Necesitamos una línea y una política correctas para hacer frente a una situación convulsa tanto internacional como nacional. Es imprescindible analizar qué nos jugamos en esta “era Trump” para dar una respuesta que defienda los intereses populares y avance en nuevas conquistas.
Pero también sabemos que “una vez establecida la línea los cuadros lo deciden todo”. Somos un partido revolucionario, y la línea no sale de unas pocas cabezas pensantes. Ha sido un proceso colectivo. Más de veinte cuadros han participado en elaborar los documentos de situación internacional, nacional y programa. Después se han estudiado y sometido a crítica por los 255 asistentes presenciales más otros 125 telemáticos. Es en esta práctica de lucha y unidad en la que se forjan cuadros que toman en sus manos establecer la línea que debemos llevar. Es un proceso democrático y revolucionario. Esta es la clave.
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P.- Entrando en la materia que ha tratado la Conferencia, ¿cuáles han sido las principales dificultades para valorar la situación internacional? Porque estamos viviendo permanentes sacudidas tras el retorno de Trump a la Casa Blanca.
R.- La primera dificultad consiste en abandonar las “ideas corrientes”, esas fake news que impiden comprender nada. Como la de que estamos en manos de un ególatra, Trump, que utiliza el poder para enriquecerse e improvisa con estrafalarias ocurrencias. Todo el mundo da por buena esta idea porque refleja una parte de la verdad, pero es superficial y falsa. Trump no es un descontrolado que va de por libre, es la alternativa de la gran burguesía norteamericana. Tiene el respaldo de los principales bancos y monopolios yanquis, del complejo militar industrial… Y todas sus acciones responden a un plan. La superpotencia norteamericana, es muy consciente de que su hegemonía está en declive y ha optado por dar un golpe de fuerza en el tablero mundial. Implantando una Dictadura Hegemonista Mundial que amenaza la paz, dando alas al genocidio de Israel en Gaza, o entregando Ucrania a Putin. También ataca la democracia, impulsando una “internacional ultra” con sede en Washington. Y recorta el bienestar de la mayoría a golpe de aranceles y el aumento del gasto militar que supondrán una nueva oleada de recortes para que paguemos más tributos a la superpotencia.
Trump no es un descontrolado que va de por libre, es la alternativa de la gran burguesía norteamericana.
Por otra parte, también debemos librarnos de esa visión, tan extendida entre la izquierda, de que vivimos un avance de la reacción. Si la superpotencia yanqui da golpes en el tablero es porque ha perdido mucho poder a manos de la revolución de los pueblos y países del mundo. Nos hemos preguntado si la revolución está en avance o en retroceso y nuestra respuesta ha sido clara, avanza la revolución.
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P.- Y al analizar la situación nacional, ¿cuáles son esas “ideas corrientes”, como las has definido, que habéis tenido que desmontar para comprender lo que está sucediendo en España?
R.- La principal preocupación de amplios sectores de la izquierda es el avance de una oleada de derechización. Según esta visión los enemigos a los que nos enfrentamos son las “cloacas del Estado” y los ataques de una ultraderecha sin freno que arrastra al PP. Y esta es una parte de la verdad, pero es la parte más superficial que nos oculta dónde están las verdaderas amenazas.
La realidad es que somos un país intervenido por EEUU, y la era Trump multiplica esa intervención, quieren mucho más.
Vemos cómo se multiplican los beneficios de bancos, eléctricas y fondos de inversión. Y ¿dónde van a parar esas ganancias? El fondo norteamericano BlackRock es ya el principal accionista del Santander, el BBVA, el Sabadell, pero también de Repsol, Enagás o Amadeus. Dominan la banca, la energía y la vivienda.
EEUU nos ha obligado ya a duplicar el gasto militar hasta el 2% del PIB, quieren que lleguemos al 5% y dicen abiertamente que se debe hacer a expensas del “Estado del bienestar” es decir, a costa de la sanidad, educación, pensiones, …
También buscan una clase obrera sin derechos y a ello responde la ofensiva contra la inmigración.
Todo esto es lo que hay en juego detrás de estos climas de opinión reaccionarios que extienden como la pólvora a través de su dominio de las redes sociales. Pretenden imponer un modelo social más insolidario para poder dar un salto en el saqueo contra el 90% de la población. Y la oligarquía española participa de este plan, multiplicando a su vez sus ganancias.
Esta es la realidad de lo que significa la Dictadura Mundial de Trump aplicada a España.
Somos un país intervenido por EEUU, y la era Trump la multiplica, quieren mucho más.
Partimos de aquí para tratar sibre qué posición tomar ante el gobierno de coalición. Porque por un lado ha sido un gestor muy rentable para bancos y monopolios, pero por otro ha adoptado medidas sociales que, aunque insuficientes, benefician a sectores populares. También denuncia el genocidio en Gaza, aunque debería aplicar sanciones, y de momento se ha opuesto al 5% de gasto militar. La conclusión fue que debemos dar un apoyo condicional a las decisiones políticas que se enfrenten, aunque sea tibiamente, a la dictadura de Trump y redoblar la exigencia a tomar medidas para redistribuir la riqueza, ampliar la democracia y defender la Paz.
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P.- Pero no solo habéis analizado la situación internacional y nacional. En el lema de la Conferencia anunciabais la necesidad de una alternativa revolucionaria. ¿Cuál es la alternativa que ha salido de la Conferencia?
R.- Aquí también hemos tenido que despejar ideas que nos desvían. Se puede suponer que lo que necesitamos es un frente de izquierdas. De hecho ya hay propuestas electorales encima de la mesa como la de Rufián. Pero esta visión nos limita enormemente.
Debemos impulsar un Frente Amplio por la Redistribución de la Riqueza, la Ampliación de la Democracia y la Defensa de la Soberanía Nacional. Y para ello hemos de unir a todo lo unible.
Nosotros tenemos un lema “de lo social a lo político y de la derecha a la izquierda”, lo aplicamos y da muchos resultados.
Parar el genocidio en Gaza es una prioridad en la que podemos unir a gente muy diversa. Y ya lo hemos hecho, en las acciones convocadas por la plataforma pararlaguerra.es han participado desde la extrema izquierda hasta el presidente de la Conferencia Episcopal, sindicatos, partidos, … Sucede lo mismo en la defensa de las pensiones públicas, la MERP (Mesa por el Blindaje de las Pensiones) agrupa a más de 500 organizaciones de todo tipo y en algunos de sus actos han participado hasta miembros del PP. Hay que hacer lo mismo con la vivienda, la sanidad pública, etc…
Debemos unir todo lo unible contra las políticas de Trump.
Una línea de frente amplio de verdad, que aísle a los principales responsables que son la oligarquía española (bancos, eléctricas, …) y el imperialismo yanqui que a través de fondos como BlackRock se están convirtiendo en los principales saqueadores de las clases populares en nuestro país.
Además de esta línea general, en la Conferencia se han presentado programas y alternativas para los principales sectores en lucha.
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P.- ¿Puedes resumir brevemente las conclusiones de la discusión de esos programas sectoriales?
R.- Sobre todo se ha expresado la vitalidad del Partido. Los programas sectoriales los han elaborado comisiones amplias de cuadros y militantes que han trabajado durante meses.
Se ha presentado una alternativa frente al atraco de la vivienda. Partiendo de que los responsables no son “todos los caseros” sino los fondos norteamericanos que convierten un bien esencial en su negocio.
También un programa para la sanidad. Defendemos la sanidad pública. Y nuestro objetivo es una sanidad al servicio del pueblo, que no esté como sucede hoy bajo el control monopolista.
Y las JUCE, las Juventudes de Unificación Comunista de España, han plantado una alternativa para una juventud que sufre de forma muy intensa los recortes, los alquileres abusivos…
Pero el plato principal ha sido la celebración de dos nuevas secciones, que están llevando a la práctica sus propuestas.
La sección de Movimiento Obrero Sindicado, formada por cuadros y militantes que son sindicalistas. Frente a los ataques reaccionarios a los sindicatos, están impulsando la unidad de todas las organizaciones sindicales, así como alternativas concretas en cada empresa para defender a los trabajadores.
Y la Organización de Mujeres Feministas de UCE. Siempre hemos trabajado activamente en el movimiento feminista, pero ahora un grupo de mujeres comunistas se han organizado para trabajar de forma organizada.
La vitalidad del Partido apareció de forma explosiva en una crítica formulada por los camaradas más jóvenes a la muy deficiente presencia del Partido en las redes sociales.