Subida de impuestos: 1.500 euros por familia

«El principal responsable es el IVA. En julio, el tipo general del impuesto pasará del 16% al 18%. El cálculo sobre el consumo estándar de una familia con rentas de entre 30.000 y 50.00 euros arroja un pago de entre 400 y 700 euros por hogar, respectivamente».

También el IRPF aguarda sorresas. Pese a que el Ejecutivo insiste en que no lo subirá durante este ejercicio, la práctica supresión del cheque de 400 euros supone un incremento real. En concreto, se mantiene sólo para bases imponibles inferiores a 8.000 euros anuales y tendrá carácter progresivo para las comprendidas entre esa cantidad y 12.000 euros, lo que supone casi eliminarlo, pues los beneficiarios se concentraban entre salarios superiores a ese umbral. Los ayuntamientos, ahogados por la caída de la vivienda, han desatado su imaginación para lanzar su peculiar saqueo al ciudadano, sobre todo en forma de tasas mediante fuertes subidas de IBI o la tasa de basuras. En total, los expertos calculan que cada hogar deberá desembolsar una media de 300 euros este año (EXPANSIÓN) EL PAÍS.- Un vistazo a la historia sugiere que cuando Estados Unidos estornuda, el resto del mundo se resfría: en especial, el mundo en desarrollo. Eso ha valido en las cinco recesiones que van desde los años setenta hasta el cambio de siglo. Ya no. Al menos no con la misma intensidad. Los países emergentes -en especial los más relevantes: China, India y Brasil- no sólo no se han hundido, sino que han aguantado el chaparrón de la crisis mucho mejor que las economías avanzadas en general, y que Estados Unidos (origen y epicentro de las turbulencias) en particular. LA VANGUARDIA.- LA opinión pública española se inclina cada vez más abiertamente por que las tropas españolas abandonen Afganistán, donde se está librando una guerra de guerrillas sin cuartel y las tropas occidentales tienen claramente perdida la partida. La encuesta publicada ayer en La Vanguardia es suficientemente nítida sobre la posición de la ciudadanía: el 58% considera que el destacamento español debe retirarse frente al 30% que opina que las tropas deben seguir allí Reportaje. Expansión Cada hogar pagará hasta 1.500 euros más este año por la subida de impuestos C. Cuesta/ E. S. Mazo Empezar 2010 ahorrando no será tarea fácil. La caída de precios de la vivienda no evitará sustos para el bolsillo. Tampoco la deflación que ha azotado a España este año el IPC cerrarán 2009 en tasas negativas dará un balón de oxígeno al ahorro familiar. ¿El motivo? Las subidas fiscales pasarán una importante factura: cada hogar pagará hasta 1.500 euros más por culpa del alza de los impuestos. El principal responsable es el IVA. En julio, el tipo general del impuesto pasará del 16% al 18%. El cálculo sobre el consumo estándar de una familia con rentas de entre 30.000 y 50.00 euros arroja un pago de entre 400 y 700 euros por hogar, respectivamente. También el IRPF aguarda sorpresas. Pese a que el Ejecutivo insiste en que no lo subirá durante este ejercicio, la práctica supresión del cheque de 400 euros supone un incremento real. En concreto, se mantiene sólo para bases imponibles inferiores a 8.000 euros anuales y tendrá carácter progresivo para las comprendidas entre esa cantidad y 12.000 euros, lo que supone casi eliminarlo, pues los beneficiarios se concentraban entre salarios superiores a ese umbral. Esta medida supone un alza fiscal de entre 200 y 400 euros, cantidad que puede duplicarse si pierden los dos cónyuges el cheque. A quienes después de este golpe para el bolsillo aún les quede algo para ahorrar tampoco hay buenas noticias: depósitos, acciones o cuentas bancarias sufrirán una subida cercana a los 20 euros, cálculo que se ha realizado en base a unas ganancias cercanas a los 1.000 euros por cónyuge. Al IVA, el IRPF y el ahorro se suman los Impuestos Especiales, cuya subida se adelantó ya al verano pasado. Supondrán un gasto extra cercano a 100 euros por hogar sobre la base de un consumo medio de carburante de unos 20.000 kilómetros por año –el recibo es de cerca 2 euros por depósito– y el equivalente a un paquete de tabaco diario –50 céntimos por cajetilla–. Hay más novedades. Los ayuntamientos, ahogados por la caída de la vivienda, han desatado su imaginación para lanzar su peculiar saqueo al ciudadano, sobre todo en forma de tasas mediante fuertes subidas de IBI o la tasa de basuras. En total, los expertos calculan que cada hogar deberá desembolsar una media de 300 euros este año, importe en el que se incluyen los variopintos tipos de multas y sanciones, que abarcan desde escupir en el suelo o sacudir una alfombra, hasta «romper el silencio de la noche» con contaminación acústica. Otros gastos ‘extra’ Junto a los impuestos, otras decisiones ajenas al hogar pueden poner el presupuesto en aprietos. La hipoteca dejó respirar en 2009 a los españoles más de lo acostumbrado gracias a los bajos tipos de interés del BCE(en el 1%). Sin embargo, la entidad ya ha abierto la puerta a subirlos en 2010, a pesar de que haya países «rezagados», como España, que para la Comisión Europea será el país con una peor situación en 2010. En contra de esta situación, los planes del BCE están alimentados por la recuperación de las principales economías, como Francia y Alemania, que superaron ya la recesión. Esto supondrá un golpe para los préstamos hipotecarios, que en los últimos años se han encarecido una media mil euros, según calculaba la AHE. Quienes viven de alquiler tampoco lo tendrán fácil, a tenor de la evolución de los arrendamientos en la inflación. Escalan, en concreto, un 3,2% de media anual, la menor desde al menos el año 2001, pero muy lejos del -0,4% del índice general. Para los caseros, no mejora la situación: 250.000 sufrirán una subida de 150 euros anuales, ya que dejarán de disfrutar de la exención del 100% de las rentas del alquiler, al excluirse de dicho beneficio fiscal a quienes arrienden sus pisos a jóvenes de 30 a 35 años. EXPANSIÓN. 3-1-2010 Opinión. El País Los países emergentes crecerán el tripe que los avanzados hasta 2014 Claudi Pérez Decoupling es una palabra con una extraña musicalidad, capaz de hacer bailar a Gobiernos y economistas chinos, indios y brasileños. Un vistazo a la historia sugiere que cuando Estados Unidos estornuda, el resto del mundo se resfría: en especial, el mundo en desarrollo. Eso ha valido en las cinco recesiones que van desde los años setenta hasta el cambio de siglo. Ya no. Al menos no con la misma intensidad. Los países emergentes -en especial los más relevantes: China, India y Brasil- no sólo no se han hundido, sino que han aguantado el chaparrón de la crisis mucho mejor que las economías avanzadas en general, y que Estados Unidos (origen y epicentro de las turbulencias) en particular. Eso es precisamente el rumboso decoupling (en román paladino, desacople). Han salido reforzados de la primera gran prueba de fuego, la primera gran crisis de la globalización. Y dejan atrás la recesión como un tiro: su crecimiento multiplicará por cuatro el de los países avanzados en 2010: avanzarán un 5,1%, frente a un anémico 1,3% en el mundo mal llamado desarrollado. Y lo triplicará en el próximo lustro, según las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que coinciden -grosso modo- con las de la OCDE, de Bruselas o de Washington (véase gráfico). Las reservas con las que se han pertrechado estos países tras las crisis anteriores y la mejora de sus exportaciones explican esa mayor resistencia a las dificultades. Todas las tradicionales locomotoras económicas están en el taller de reparaciones. Estados Unidos sale de la recesión pero no está -ni mucho menos- en forma, con el déficit público disparado, el paro por encima de la barrera psicológica del 10% y sus desequilibrios -déficit comercial, baja tasa de ahorro- más moderados pero ni mucho menos domados. Japón vuelve a su endémica deflación -una caída de precios combinada con bajos crecimientos o ligeras caídas del PIB-, con la que pelea sin apenas resultado desde hace casi 20 años. Y la vieja Europa se enfrenta a un 2010 marcado por el estancamiento, y con varios incendios: el agujero fiscal en Grecia, el paro desbocado en España y el desplome de Europa del Este, que ha perdido pie con respecto a otras áreas emergentes. Y eso a la espera de que la mejora de la economía mundial se consolide y se apaguen los últimos fuegos en la industria financiera, porque no es descartable una recaída. Asia, el sureste asiático, con China a la cabeza, es la gran esperanza blanca: el dragón chino volverá a crecer a tasas cercanas al 10% en 2010 y tira del resto de economías de la zona. El mercado asiático está rebotando a toda velocidad en una recuperación "impresionante", según el FMI, tras los latigazos de la crisis financiera y el hundimiento del comercio mundial en los últimos meses de 2008 y los primeros de 2009. Asia y Latinoamérica son el nuevo mundo: las dos regiones, capitaneadas por China, India y Brasil, protagonizan un movimiento telúrico en la economía mundial, cuyo centro de gravedad se va desplazando progresivamente. "Cuando uno se pasea por una gran ciudad de China, por el sureste asiático, la sensación es que el futuro es suyo. La expansión en 2010 va a ser muy fuerte en China, en India, en Singapur, en Taiwan y en un puñado de economías muy exportadoras y con una demanda interna cada vez más fuerte. Y junto con Asia, América Latina ha cruzado una frontera en esta crisis, ha dejado atrás décadas perdidas y ha salido claramente reforzada. En ambas regiones hay excepciones, está claro, y enormes riesgos. Pero salen de la crisis como ganadores", resume Jesús Fernández-Villaverde, de la Universidad de Pensilvania. La paradoja es que las crisis anteriores -efectos tango, tequila o samba en los años ochenta y noventa, crisis asiática en los últimos años del pasado siglo- son claves para explicar el buen manejo de la recesión actual. "En las crisis anteriores no tenían ninguna capacidad de reacción y se veían obligados a recurrir al FMI y sus fórmulas, que se revelaron claramente nocivas. Para evitar eso han acumulado grandes superávit comerciales y montones de reservas, y las han usado con estímulos fiscales y monetarios muy potentes, con excelentes resultados", apunta el economista José Luis Alzola. El peligro ahora es que no retiren a tiempo esos estímulos y generen burbujas de activos y un aumento desbocado de la inflación. "Ése es el riesgo a medio plazo, pero en términos globales se compensa bien con las previsiones de estancamiento y muy baja inflación en los países desarrollados", apunta José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney. EL PAÍS. 4-1-2010 Opinión. La Vanguardia Perdidos José Antich LA opinión pública española se inclina cada vez más abiertamente por que las tropas españolas abandonen Afganistán, donde, se diga lo que se diga, se está librando una guerra de guerrillas sin cuartel y las tropas occidentales tienen claramente perdida la partida frente a los clanes tribales, los talibanes y los seguidores de Al Qaeda. La encuesta publicada ayer en La Vanguardia es suficientemente nítida sobre la posición de la ciudadanía: el 58% considera que el destacamento español debe retirarse frente al 30% que opina que las tropas deben seguir allí. No es una posición exclusiva en el concierto internacional, ya que desde Estados Unidos hasta el Reino Unido pasando por Francia y Alemania cada vez hay una sensación de mayor hartazgo por un conflicto en el que no se ve el final del túnel en el que Occidente se adentró en octubre del 2001. El frente afgano, convertido en un auténtico avispero con el corrupto Karzai al mando, tiene su segundo foco de conflicto en Pakistán, donde el riesgo de una desmembración del Estado o la pérdida del control de las armas nucleares es una amenaza si cabe más seria que la del propio conflicto armado en Afganistán. Con estos dos frentes conocidos, la reaparición de Yemen como un escenario capaz de ser un semillero de terroristas de Al Qaeda no sólo vuelve a situar en el tablero de la batalla política la lucha contra el terrorismo global como una prioridad de la Casa Blanca, sino que deja al presidente Obama un poco más en manos de los militares. El tercer frente que supone Yemen puede ser tan sólo una escaramuza aislada o el inicio de algo más serio: es demasiado pronto para ser taxativo. Pero, ojo, el cansancio de las respectivas opiniones públicas también juega cuando todo son negros nubarrones. LA VANGUARDIA. 4-1-2010