«Si vas al polígono y está todo cerrado porque nadie ha ido a trabajar es porque se ha hecho un trabajo de concienciación en torno a la Reforma».
Habéis dicho que se conocía una jornada de huelga como la de ayer desde la del 14 de diciembre de 1988…
Una vez analizados los datos podemos decir que el paro ha sido del 95% en Euskadi. La industria paró al 100%, la química, la metalúrgica, la de alimentación… los piquetes fueron muy tranquilos porque en los polígonos no había gente acudiendo a los puestos de trabajo.
La Enseñanza paró al completo, y también la Sanidad. El comercio grande cerró, y también la gran hostelería. Lo único que abrió en cierta medida fue el pequeño comercio, y muy poco. Pero incluso en este sector el paro fue masivo.¿Ha sido clave la unidad?
Nosotros siempre hemos defendido el ámbito de la unidad. Más allá de los planteamientos estratégicos de cada organización, entendemos que ante agresiones de este calado, aunque no solo, es necesario buscar la unidad de acción.
De lo contrario se desvirtúa la propia movilización y una herramienta que hay que tomarse muy en serio. La gente se juega mucho, los trabajadores perdemos una jornada de salario, se utiliza como medida de presión en las empresas… hemos hecho los esfuerzos, tal y como dijimos, “con altura de miras”.
Hemos hecho más de cuatrocientas asambleas para explicarle a la gente cuáles eran los contenidos de la Reforma.
Si vas al polígono y está todo cerrado porque nadie ha ido a trabajar es porque se ha hecho un trabajo de concienciación en torno a la Reforma.Se supone que le toca mover ficha al Gobierno pero ya ha dicho que no piensa tocar la Reforma…
Lo que no puede ser es que la banca se haya saneado con dinero público y ahora no fluya el crédito. Y luego, hace falta una reforma fiscal. Si el Gobierno no aborda otras formas para salir de la crisis seguiremos con movilizaciones, le pese a quien le pese.