La situación sanitaria, muy grave

Segunda Oleada: Alarma Roja

La situación sanitaria de España, como la de toda Europa, sigue siendo extraordinariamente preocupante. Se ha superado el millón y medio de casos de coronavirus en España. Se observa una mejoría en la curva de contagios, y las medidas de contención ‘duras’ están desacelerando el avance del virus. Pero el panorama es de alarma roja: los datos de saturación de los hospitales y de las camas UCIs están, en muchas comunidades, peor que en marzo-abril.

Las cifras de positivos y de ingresos hospitalarios han cambiado de tendencia, y en casi todas las CCAA van a la baja. El pico se alcanzó hace dos semanas y desde entonces la curva se ha doblado hacia abajo. Pero aunque este progreso sea buena noticia, no cabe relajarse. Las cifras absolutas siguen siendo una barbaridad. 

Todas las provincias excepto Canarias están con el semáforo de riesgo en rojo, con el virus extendido en transmisión comunitaria. Hay 12 comunidades por encima de 500 casos por 100.000 habitantes en 14 días. En Castilla y León, Murcia, Aragón y País Vasco se superan los 800 casos. La buena noticia es que hay descensos claros en seis comunidades: en Navarra los casos semanales han bajado un 60% en dos semanas, en Aragón y en Cataluña un 40%, en Extremadura, Castilla-La Mancha y Madrid, alrededor del 20%.

También el ritmo de ingresos hospitalarios parece estar mejorando. Pero el índice de ocupación de camas UCI es muy, muy preocupante. Hay que tener en cuenta que este índice -que activa el semáforo rojo cuando los pacientes covid ocupan el 15% de todas las camas de hospital o el 25% de las UCI- es probablemente demasiado permisivo. Los hospitales públicos en España operan normalmente a un promedio del 80% de ocupación.

Hay seis comunidades que tienen casi la mitad de sus plazas ocupadas con enfermos de covid (La Rioja, Aragón, Asturias, Castilla y León, Cataluña y Navarra). Esto significa que -entre enfermos Covid y No-Covid- las UCIS están saturadas, desbordadas, o a punto de estarlo. Y son plazas que, por la naturaleza delicada de los pacientes, se desocupan muy despacio. Por eso, el riesgo es extremo y no hay lugar para relajar la alarma.

Medidas estrictas, sí. Pero no sin ayudas.

Dada esta situación de alarma roja para la salud pública, no se debe descartar ningún escenario, incluyendo medidas más duras. Casi la mitad de la población española, un 43%,  aprobaría confinar de nuevo a toda la población, según los resultados de la segunda ronda del estudio ‘COSMO-SPAIN’, que coordina el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) desde el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) y que está impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Medidas más estrictas que deben compatibilizarse con ayudas directas a los sectores afectados: pymes, autónomos, especialmente del comercio y la hostelería. El sector de la hostelería ha pedido un rescate financiero de 8.500 millones de euros en ayudas directas no reembolsables. Si asumimos un rescate de igual cuantía para las pymes y autónomos del comercio, suma 17.000 millones de euros. Lo que supone apenas el 12% de los 140.000 millones de euros del fondo de rescate de la UE. 

Un porcentaje más que razonable, tratándose de dos sectores económicos que representan, respectivamente, el 13% y el 17% del empleo de nuestro país. Rescatar con el 12% de las ayudas al 30% de los puestos de trabajo.