«La cooperación energética, que es un vector importante de la asociación estratégica entre China y Rusia, inevitablemente formará el punto focal de la visita. Sin embargo, como muestra el raro «doble veto» sobre Siria en el Consejo de Seguridad de esta semana, la asociación entre China y Rusia está asumiendo un nuevo sabor. Los dos países nunca han tenido una preocupación compartida por el Medio Oriente ni han aparecido con una voluntad común de preservar sus intereses en la región.»
Putin viaja a China en un contexto mucho más amlio de las relaciones de Rusia con Occidente, especialmente Estados Unidos. No sólo el "reset" entre Estados Unidos y Rusia está en un punto muerto, las cosas ven en realidad hacia atrás, como si el reloj hubiera retrocedido a una era anterior, pre-Barack Obama. En general, la administración Obama está resucitando temas polémicos – principalmente, la defensa antimisiles, las rivalidades del Mar Caspio, la estrategia del "gran Asia Central", y así sucesivamente. También sucede que estos problemas impactan en los intereses fundamentales de China, y la gran pregunta es hasta qué punto Moscú y Beijing cuentan que sea útil o conveniente coordinar sus posturas. (ASIA TIMES) THE WALL STREET JOURNAL.- El rápido incremento de los salarios en China ha llegado al punto en que los fabricantes extranjeros necesitan olvidarse de la idea de China como una base de producción de bajo costo, dijo el jueves un alto ejecutivo de Hyundai Motor Co. Jae-Man Noh, jefe de las operaciones de empresa conjunta de Hyundai en China, dijo que los salarios promedio de los obreros fabriles en China —de alrededor de 27.000 yuanes (4.200 dólares) al año por trabajador en 2009— probablemente se dupliquen para 2015 desde los niveles actuales. Hong Kong. Asia Times Rusia entra en la guarida del dragón M K Bhadrakumar A los quince días de su anuncio de presentarse a las elecciones presidenciales rusas de principios de 2012, el Primer Ministro Vladimir Putin se dirige a Beijing. El Kremlin atribuye importancia al simbolismo político, y los líderes chinos nunca se han preocupado por ocultar sus sentimientos de cariño hacia Putin. Las conversaciones en Beijing el 11-12 de octubre atraerán una gran atención internacional. La cooperación energética, que es un vector importante de la asociación estratégica entre China y Rusia, inevitablemente formará el punto focal de la visita. Sin embargo, como muestra el raro "doble veto" sobre Siria en el Consejo de Seguridad de esta semana, la asociación entre China y Rusia está asumiendo un nuevo sabor. Los dos países nunca han tenido una preocupación compartida por el Medio Oriente ni han aparecido con una voluntad común de preservar sus intereses en la región. Putin viaja a China en un contexto mucho más amplio de las relaciones de Rusia con Occidente, especialmente Estados Unidos. No sólo el "reset" entre Estados Unidos y Rusia está en un punto muerto, las cosas ven en realidad hacia atrás, como si el reloj hubiera retrocedido a una era anterior, pre-Barack Obama. En general, la administración Obama está resucitando temas polémicos – principalmente, la defensa antimisiles, las rivalidades del Mar Caspio, la estrategia del "gran Asia Central", y así sucesivamente. También sucede que estos problemas impactan en los intereses fundamentales de China, y la gran pregunta es hasta qué punto Moscú y Beijing cuentan que sea útil o conveniente coordinar sus posturas. Grandes expectativas Sin embargo, la cooperación energética encabeza la agenda de Putin, y de hecho es el lubricante que podría acelerar la compleja asociación entre China y Rusia. Las diferencias sobre los precios han estancado un acuerdo de un billón de dólares por la venta de gas ruso a China. Las prometedoras tendencias de Putin en las prolongadas negociaciones para llegar a un acuerdo es un punto de gran interés para la economía mundial. Un acuerdo de gas daría un gran impulso a la asociación, pero Rusia tiene mayores expectativas, ya que como el experto académico en el diálogo energético con China de Moscú, el profesor Igor Tomberg, escribió recientemente: "La venta de materias primas no tiene nada que ver con la asociación estratégica". En un artículo en la revista internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores, Tomberg escribió: “Para Gazprom [el Leviatán de la energía de Rusia], una intensa participación implica no sólo proporcionar los recursos, sino también la participación tecnológica y financiera en la formación del mercado nacional. Eso significa no sólo el suministro de gas, sino también la participación en las redes de distribución de gas (la compra de activos y la construcción de nuevas instalaciones), tratando de obtener el control sobre la gestión operativa de por lo menos las redes de distribución interna de gas.” Señalaba cómo las empresas rusas de energía han sido hasta ahora capaces de entrar en el mercado nacional chino sólo "muy lenta y episódicamente". En una sugerencia radical, Tomberg insinuaba que Moscú podría ser flexible en la fijación de precios del suministro de gas siempre que se le diera acceso al mercado interno de China, "debido a que el centro de los beneficios del mercado se mueven hacia la frontera más profunda [entre China y Rusia]". Reconoció que "esta es una tarea colosal, no sólo políticamente, sino también a nivel técnico", y que exige una amplia "armonización de los intereses de los dos países en la seguridad energética". Significativamente, Tomberg estaba escribiendo un "preludio" a la visita de Putin a Beijing, añadiendo, "Moscú considera de gran interés trabajar con sus socios chinos y sus expertos en una interacción más amplia." En concreto, sugirió, "los expertos de Rusia y China pueden trabajar juntos en las siguientes direcciones: coordinación de las estrategias energéticas de los dos países, previsión de futuros escenarios, desarrollo de las infraestructuras de mercado, eficiencia energética y fuentes alternativas de energía" La puesta en marcha del gasoducto Nord Stream en Europa y el inicio inminente de las obras de construcción del gasoducto South Stream coloca a Rusia sobre una base sólida. Sin embargo, nuevas tensiones han aparecido en la política energética del Caspio. Azerbaiyán ha sacado el premio gordo con los nuevos hallazgos masivos de gas que de golpe han mejorado las perspectivas de los proyectos trans-Caspio en tramitación patrocinados por Estados Unidos que podrían permitir a Europa acceder directamente a las reservas regionales de energía y reducir el nivel actual de dependencia del suministro ruso. En pocas palabras, es probable que Europa gane influencia en las negociaciones de precios con Rusia, y contenga la agresiva entrada de las empresas rusas de energía en el mercado europeo de la energía para la adquisición de activos o conseguir participación en sus redes de distribución. Moscú ve la mano oculta de EEUU en el nuevo impulso de la Comisión Europea para hacer valer una política común para todos los países miembros en sus relaciones energéticas con Rusia. Pretexto Sin embargo, estas rivalidades no son ni mucho menos tan graves como el conflicto más serio de la defensa de misiles (misiles antibalísticos – ABM) implementado por EEUU. El miércoles, el gobierno de Obama anunció la instalación de una base de cruceros Aegis en la costa de España. Anuncio que sigue a las proyectos propuestos de los componentes del ABM en Rumania, Bulgaria y Turquía. Dos años atrás, durante el lanzamiento del "reset" con Rusia, Obama se comprometió a revisar el plan de gestión del despliegue –al menos, tal y como Moscú lo entiende–, pero ahora apuesta por continuar con el plan con miras a completar el escudo en 2020. Moscú no ha tardado en reaccionar. Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores denunció el acuerdo con España y amenazó con abandonar cualquier tipo de cooperación con los EEUU. Alegó que EEUU llegó al acuerdo con España "sin discusión colectiva" y que constituye una "significativa acumulación del potencial de misiles de EEUU en la zona europea". La declaración dice: “No sólo no vemos ninguna disposición por parte de la administración de EEUU para hacer frente a las preocupaciones de Rusia sobre la cuestión fundamental de garantizar que el futuro sistema no estará dirigido contra el arsenal nuclear estratégico de Rusia, también se nota la tendencia a ampliar cada vez más las zonas de despliegue de los sistemas antimisiles de EEUU. Si esto sigue así, entonces la oportunidad… de convertir la defensa antimisiles de un espacio de confrontación en un ámbito de cooperación se pueden perder”. El tema de la defensa antimisiles está destinado a ser mucho más que una disputa entre Rusia y Occidente. EEUU está empujando a Japón y Corea del Sur hacia el escudo ABM. Curiosamente, el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) transmitía oficialmente a Nueva Delhi a principios de septiembre una invitación para que India se convierta en "socio" de su programa de misiles balísticos, y el sistema de defensa indio está considerando activamente la invitación de la OTAN con un ojo puesto en dar un jaque mate a las capacidades de China. Se puede esperar que China parta cada vez más de la percepción rusa sobre la ABM como un pretexto de Estados Unidos para neutralizar sus defensas. A medida que el naciente acercamiento y las conversaciones exploratorias de Estados Unidos y Rusia sobre el ABM comienzan a enredarse, Moscú y Beijing se van a ver en la necesidad de calibrar su respuesta política a un desafío común. Por otro lado, las preocupaciones de seguridad de Rusia y China se entretejen casi en su totalidad a propósito de la reciente decisión de la administración Obama de revivir la estrategia del "gran Asia Central". Washington llama ahora al proyecto la "Ruta de la Seda" y ha ampliado su alcance para incluir a los aliados europeos de Estados Unidos por su vinculación con la estabilización de Afganistán, donde la OTAN tiene un papel clave. El proyecto de la "Ruta de la Seda" tiene mucho de la misma orientación que la estrategia del "gran Asia Central" de la presidencia de George W Bush – es decir, hacer retroceder la influencia rusa y china en Asia Central. A primera vista, Moscú y Beijing están en apuros para hacer frente a los proyectos de Obama desde que éste cuenta con el respaldo europeo y está aparentemente vinculado a la estabilización de Afganistán. Washington espera la construcción de un consenso internacional a favor del proyecto en la próxima conferencia sobre Afganistán que tendrá lugar en Estambul, Turquía, el 2 de noviembre. Mientras tanto, hay crecientes señales de que Uzbekistán está dispuesto a acoger a la OTAN y la agenda de la alianza para expandir su influencia en Asia Central. EEUU tiene todo listo para iniciar una cooperación militar considerablemente ampliada con Uzbekistán, incluido el suministro de armas. Basta con decir que estas tendencias recientes, al añadir la perspectiva de una presencia militar permanente de EEUU en Afganistán, están desafiando los intereses regionales de Rusia y China. En el aire Como un comentario de Moscú dijo en el 10 º aniversario de la guerra liderada por Estados Unidos en Afganistán, la "fecha límite de retiro de 2014 fijada por Obama parece estar en el aire". De hecho, el nuevo comandante de las fuerzas de la coalición liderada por Estados Unidos en Afganistán, el general John Allen, ha admitido abiertamente en una entrevista con la CBS, que el plazo de 2014 no se cumplirá. "El plan es ganar. El plan es tener éxito. Así, mientras que la gente cree saber que estaremos saliendo en 2014 … en realidad vamos a estar aquí durante mucho tiempo." Agregó que el número y la composición del resto de las fuerzas de EEUU en Afganistán después de 2014 aún no había sido diseñado. "La OTAN y sus aliados no creo que estén listos para salir de esta región tan volátil … Yo creo que las fuerzas de EEUU estarán allí por un tiempo muy largo." Moscú siente la necesidad de llegar a una contra-estrategia viable. La reciente propuesta de Putin de formar una "Unión Euroasiática" se puede ver desde esta perspectiva. Putin estima que en última instancia, lo que podría impedir la incursión de Occidente en el patio trasero ruso de Asia central es expandir el espacio económico común entre Rusia, Kazajstán y Bielorrusia. El proyecto es probable que sea un proyecto importante de su nueva presidencia, asumiendo –como es probable– que ese será su trabajo. Hasta ahora China ha dejado amablemente de lado la idea sugerida por Putin, mientras que el Diario del Pueblo en general elogió que el "intercambio" del "tándem" en el Kremlin "asegura que Rusia podrá seguir manteniendo la estabilidad y el desarrollo con el fin de recuperar su estatus de gran potencia ". Pero agregó, al mismo tiempo, que la experiencia de 20 años en Rusia demuestra que la transición política de un país es una "ecuación con varias incógnitas" y la "ecuación" tiene más de una respuesta, al ser un "proyecto sistémico complejo, sin un camino llano para desarrollarse o un modelo preexistente que aplicar". Mientras tanto, otro comentario publicado en el diario del Partido Comunista chino estima con cautela: “Una Rusia que siga con Putin está en los intereses de China por ahora. A la larga, puede traer problemas al este de Asia, pero esto es difícil de decir ahora. El resurgimiento ruso es imparable y sus relaciones con China serán más complejas. Al ser más adaptable la hoja de ruta liderada por Putin del desarrollo y el mantenimiento de la asociación estratégica y cooperativa entre China y Rusia, estos deberían ser los objetivos básicos de la política de China hacia Rusia”. ASIA TIMES. 8-10-2011 EEUU. The Wall Street Journal China deja de ser un centro de mano de obra barata para las multinacionales Norihiko Shirouzu El rápido incremento de los salarios en China ha llegado al punto en que los fabricantes extranjeros necesitan olvidarse de la idea de China como una base de producción de bajo costo, dijo el jueves un alto ejecutivo de Hyundai Motor Co. Jae-Man Noh, jefe de las operaciones de empresa conjunta de Hyundai en China, dijo que los salarios promedio de los obreros fabriles en China —de alrededor de 27.000 yuanes (US$4.200) al año por trabajador en 2009— probablemente se dupliquen para 2015 desde los niveles actuales. Se espera que las automotrices se vean tan afectadas por la tendencia como otras industrias, si no más, dijo Noh, quien añadió que los costos salariales para muchas automotrices extranjeras ya se han duplicado en menos de una década. Dijo que una automotriz extranjera rival, sobre la cual Hyundai ha hecho investigaciones, ha experimentado un aumento de los salarios de los trabajadores en China a 49.000 yuanes por año por trabajador en 2010, un alza de 24.500 yuanes al año en 2003. "Tenemos que olvidarnos de la impresión de que el mercado chino es una base de producción de bajo costo", dijo Noh a un grupo de reporteros en la oficina de Hyundai en Beijing. No brindó detalles específicos sobre los costos salariales en China. Noh lidera Beijing Hyundai Motors Co., una empresa conjunta entre la automotriz surcoreana y Beijing Automotive Industry Holding Co. En contraste con décadas anteriores, cuando el flujo de trabajadores chinos provenientes desde las zonas rurales hicieron bajar los costos laborales de manufactura, los obreros de China ahora exigen mayores salarios y mejores empleos. Las remuneraciones, de hecho, han comenzado a aumentar "drásticamente" desde el año pasado, según Noh, afectando en su mayor parte a las automotrices. El ejecutivo de Hyundai señaló una serie de huelgas de alto perfil que golpearon a las fábricas automotrices japonesas y otras en China el año pasado. El gobierno, que suele disolver rápidamente las huelgas organizadas por trabajadores, toleró éstas en buena medida el año pasado, y los salarios mínimos en algunas partes de China han estado subiendo de manera constante desde entonces. China aún ofrece otros atractivos, entre ellos el fuerte crecimiento económico, una población cada vez más próspera y una cultura automotriz en rápido crecimiento. Además, el costo laboral promedio de Hyundai en China es aún un quinto del de Corea del Sur, dijo Noh. Lo que más le inquieta es la pronunciada tasa de incremento, dijo. Esta tendencia es "inevitable" conforme la economía china crece y su sociedad mejora, dijo Noh. A pesar de los crecientes costos laborales, las exportaciones automotrices de China seguirán aumentando en parte de excedente de la producción automotriz en el país, dijo. El gobierno central de China también seguirá concentrándose en las exportaciones de autos, dijo. THE WALL STREET JOURNAL. 29-9-2011