El equipo de técnicos trabaja día y noche sin descanso en el rescate de Julen salvando todas las dificultades. En el rescate se han involucrado cientos de personas que con su dedicación incansable y su trabajo desinteresado están cada vez más cerca de Julen. El rescate de Julen esta siendo una obra de ingeniería sin precedentes. Se han movido 55.000 toneladas de material, una obra que en circunstancias normales tardaría meses. El Cerro de la Corona de Totalan ha desaparecido tal y como se le conocía
Totalan se vuelca con el rescate de Julen. La pequeña localidad de Málaga, con apenas 700 habitantes, ha acogido a los padres de Julen y al operativo de rescate. El equipo de ingenieros y los mineros de la Brigada de Salvamento preparados para intervenir reciben la fuerza de todos los vecinos y todos los españoles que siguen con esperanza el rescate. “Julen ya es hijo de todos” dijo García Vidal, responsable del Colegio de Ingenieros de Málaga en unas sentidas declaraciones.
Volcados sin descanso en la búsqueda de soluciones técnicas el equipo multidisplinar no se desalientan ante cada nuevo revés del terreno. Las dificultades y la dureza del terreno han demorado los trabajos. Desde Chile Rodrigo Reveco, el ingeniero civil que diseñó la cápsula Fénix que permitió rescatar con vida a los 33 mineros que permanecieron 17 días atrapados en San José, manda toda la fuerza.
Los operarios han trabajado toda la noche en limar las paredes interiores de la perforación para entubarlo. La brigada de especialista espera a que acaben los trabajos de entubado que se han vuelto a retrasar por las dificultades del terreno. Los mineros de la brigada de salvamento de Hunosa tendrán que descender por el túnel vertical paralelo al pozo en el que Julen cayó hace ya diez días y excavar unos cuatro metros en dirección hacia donde se cree que está el niño. Bajarán en una cápsula de rescate diseñada por el director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, Julián Moreno, y fabricada por herreros del municipio malagueño de Alhaurin de la Torre. Los mineros excavarán manualmente la galería horizontal de unos cuatro metros para conectar con el pozo donde esta Julen, en el que pueden emplear unas 24 horas.