«Marx, un burgués victoriano de armas tomar, sentía un profundo respeto por la clase social a la que pertenecía y que asociaba plenamente con el capitalismo. A su juicio, la burguesía decimonónica había logrado crear, en apenas cien años, un tejido productivo que superaba al de todas las generaciones anteriores»
La cuestión ahora está en saber si los herederos de esa burguesía que amamantó al caitalismo primigenio y le ha hecho crecer están en lance de ser devorados por su propio hijo. Los tertulianos ilustrados dicen que el riesgo existe; que la profecía marxista puede cumplirse si la crisis aniquila la base social del actual sistema: las clases medias. Existen indicios de su progresiva proletarización, de su imposibilidad de acceder al endeudamiento, de la penalización fiscal que padecen sus ahorros, presentados como síntoma de riqueza. (LA VANGUARDIA) PÚBLICO.- Los críticos con el impuesto de Patrimonio argumentan que es un tributo injusto porque “castiga a la clase media”. Curiosa forma de verlo. En el año 2007, el último ejercicio antes de su abolición, pagaron este impuesto algo menos de un millón de ciudadanos: el 2,1% de la población (o el 5,5% de los que declararon el IRPF). El 94,5% de los contribuyentes españoles quedó exento ¿Tan pequeña es la clase media española? EL CONFIDENCIAL.- El miedo a que el incendio de los países periféricos acabe afectando a España está haciendo mella en los clientes de banca privada (patrimonios medios-altos y altos). Las entidades extranjeras están aprovechando ese temor para ofrecer cuentas en Luxemburgo con fiscalidad española para que depositen allí al menos una parte de su dinero y de sus activos financieros "por lo que pueda pasar". Y este mensaje está encontrando eco, porque empieza a notarse cierto movimiento de dinero con esa dirección, según confirman varias fuentes del sector. EXPANSIÓN.- Es notorio, tras las reflexiones de Obama, el temor de EEUU a que el incendio griego acabe prendiendo en otras economías, en particular la española o la italiana, haciendo el problema inmanejable. El rescate griego es asumible por los países centrales de la eurozona; el mayor problema reside en la torpeza y la falta de voluntad de los dirigentes políticos para afrontarlo, lo que atiza la desconfianza y fomenta los miedos a una suspensión desordenada que provoque un auténtico tsunami de gravísimas consecuencias en la banca europea. Opinión. La Vanguardia Que Marx nos pille confesados Alfredo Abián INTELECTUALES y economistas de diversa adscripción ideológica llevan meses, incluso años, recurriendo a Marx para analizar esta crisis económica de acero inoxidable. Imagínense la magnitud del aprieto, que se cita a un teutón del XIX que hasta era dado por muerto por las legiones de ex comunistas que nos rodean. La teoría marxista que se invoca alude a una voracidad intrínseca del capitalismo que conduciría a su propia autodestrucción. Puede sonar a mitin de Cayo Lara en Argamasilla de Alba, pero no crean que es tan simple. Marx, un burgués victoriano de armas tomar, sentía un profundo respeto por la clase social a la que pertenecía y que asociaba plenamente con el capitalismo. A su juicio, la burguesía decimonónica había logrado crear, en apenas cien años, un tejido productivo que superaba al de todas las generaciones anteriores. Es más, don Carlos atribuía a esa misma burguesía la destrucción de las relaciones feudales, patriarcales y el fervor religioso. La cuestión ahora está en saber si los herederos de esa burguesía que amamantó al capitalismo primigenio y le ha hecho crecer están en lance de ser devorados por su propio hijo. Los tertulianos ilustrados dicen que el riesgo existe; que la profecía marxista puede cumplirse si la crisis aniquila la base social del actual sistema: las clases medias. Existen indicios de su progresiva proletarización, de su imposibilidad de acceder al endeudamiento, de la penalización fiscal que padecen sus ahorros, presentados como síntoma de riqueza. No hace falta haber sido revolucionario en la lejana lactancia para concluir que si la pobreza se universaliza, asistiremos a la reencarnación de un feudalismo moderno que derroque al capitalismo. Que Marx nos pille confesados. LA VANGUARDIA. 14-9-2011 Opinión. Público ¿A qué llaman clase media? Ignacio Escolar Los críticos con el impuesto de Patrimonio argumentan que es un tributo injusto porque “castiga a la clase media”. Curiosa forma de verlo. En el año 2007, el último ejercicio antes de su abolición, pagaron este impuesto algo menos de un millón de ciudadanos: el 2,1% de la población (o el 5,5% de los que declararon el IRPF). El 94,5% de los contribuyentes españoles quedó exento ¿Tan pequeña es la clase media española? Más datos sobre este impuesto. Tal y como estaba formulado hasta que Zapatero lo eliminó, pagaban aquellas personas cuya resta entre su patrimonio y sus deudas superaba los 108.182 euros (ahora se habla de elevar este umbral hasta los 600.000 o incluso el millón de euros). No entraba en esta cuenta la vivienda habitual, que estaba exenta hasta los 150.253 euros por contribuyente. En su último año en vigor, este impuesto supuso 2.121 millones de euros para el Estado. La mitad de los que pagaron declaró un patrimonio inferior a los 300.000 euros y apenas aportó el 4% del total recaudado: de media, el impuesto les salió por 171 euros al año. Por contra, aquella minoría de contribuyentes con patrimonios superiores al millón y medio de euros –en total, 47.614 personas– permitió recaudar 1.240 millones. Es decir, el 0,1% más rico de la población española pagó el 58% de la recaudación de este impuesto: 26.037 euros de media. Ante estos números, sólo quedan dos posibles conclusiones: o nos toman el pelo quienes dicen que este tributo grava a las clases medias, o es que viven rodeados de ese 5% de la sociedad española donde lo normal, lo medio, es tener un patrimonio de varias casas, un par de coches y ninguna hipoteca. PÚBLICO. 14-9-2011 Crisis. El Confidencial Ofensiva comercial de la banca extranjera para que los ricos saquen el dinero de España Eduardo Segovia El miedo a que el incendio de los países periféricos acabe afectando a España está haciendo mella en los clientes de banca privada (patrimonios medios-altos y altos). Las entidades extranjeras están aprovechando ese temor para ofrecer cuentas en Luxemburgo con fiscalidad española para que depositen allí al menos una parte de su dinero y de sus activos financieros "por lo que pueda pasar". Y este mensaje está encontrando eco, porque empieza a notarse cierto movimiento de dinero con esa dirección, según confirman varias fuentes del sector. Este temor se basa en dos posibilidades muy remotas e improbables, que son que España salga del euro y vuelva a la peseta, o que la banca española sufra una quiebra generalizada en la que sólo estarían garantizados 100.000 euros por cuenta. "Es improbable pero no imposible, nadie creía posible hace unos meses un default de Grecia y ahora se da por hecho", explica un analista. "Se trata de una acción comercial ‘anticorralito’", explica un profesional del sector. "Explotan el miedo a que su patrimonio pierda su valor si se vuelve a la peseta, porque se devaluaría a plomo, y a que haya un corralito que no les permita sacar el dinero si lo necesitan", añade. En todo caso, no se trata de evadir impuestos, ya que se pagan los mismos que si el dinero estuviera en España. Algunos bancos privados extranjeros que piden anonimato aseguran que ellos no explotan ningún miedo, sino que existe esa demanda en el mercado y se limitan a ofrecer productos para satisfacerla. Las entidades españolas, en cambio, niegan que les esté afectando esta campaña: "Lo que estamos padeciendo es la situación de la bolsa y la incertidumbre económica, no que la gente se lleve el dinero a Luxemburgo", aseguran en un importante banco privado nacional. "¿Y si llega a pasar?" No es la primera vez que la banca privada extranjera, en especial la suiza, realiza campañas que juegan con los temores de los inversores españoles. Esta primavera planteó otra dirigida a los clientes de las cajas de ahorros que aprovechaba las dudas sobre su solvencia para atraer los patrimonios depositados en estas entidades. Una de las fuentes consultadas relata el caso de una persona ya anciana que se ha llevado todo su patrimonio, cercano a 100 millones, a Luxemburgo para tener tranquilidad total. "Aunque lo normal no es eso, sino que la gente se lleve sólo una parte de su patrimonio, de la que poder tirar si al final tuviéramos un corralito en España". "En todo caso, es un movimiento con lógica. Si tienes 100 millones y resulta que al final nos metemos en un corralito, jamás te perdonarías -y tu familia menos- no haber protegido parte de tu dinero. Es una posibilidad remota, pero el dinero es miedoso y toda cautela es poca", añade otro experto. Los mismos impuestos que en España Estas cuentas permiten depositar en Luxemburgo efectivo, acciones, fondos de inversión, derivados, bonos, etc. pero sin evadir impuestos, sino que se pagan en España porque el contribuyentes es residente en nuestro país y Luxemburgo no impone ningún recargo. Lo cual permite, además, beneficiarse de las ventajas del régimen español de traspaso de fondos sin tributar. La única diferencia es que no se practica retención sobre los rendimientos, y es el cliente el que tiene que declarar todas sus ganancias posteriormente. Existe un coste de movilización del dinero a Luxemburgo, pero es muy reducido gracias a la figura de la ‘redomiciliación’ de las sicav entre países comunitarios EL CONFIDENCIAL. 14-9-2011 Editorial. Expansión Horas decisivas para el rescate de Grecia Los mercados vivieron ayer una jornada de paranoia, de extrema volatilidad, sin saber a qué carta quedarse, hasta que finalmente optaron por tomarse un respiro –el Ibex acabó repuntando un 2,5%–, al socaire de un eventual compromiso de Alemania y Francia para emplearse a fondo en el desbloqueo del rescate a Grecia. Afrontamos unas jornadas determinantes para tomar decisiones que contribuyan a resolver la enquistada crisis de la deuda soberana en Europa. Tras la reunión de ayer con el primer ministro de Finlandia –país reticente al segundo estímulo de Grecia sin garantías adicionales–, Merkel se mostró muy optimista sobre un acuerdo mutuamente aceptable entre los socios de la eurozona. Hoy, la canciller se reunirá con Sarkozy y el griego Papandreu para tratar de escenificar una vía de solución para Grecia que tranquilice a los mercados. Y el viernes, el secretario del Tesoro de EEUU, Geithner, participará en la reunión del eurogrupo, al que pedirá una respuesta más contundente de las instituciones europeas y, muy probablemente, defenderá un aumento de la dotación del nuevo fondo de rescate. Es notorio, tras las reflexiones de Obama, el temor de EEUU a que el incendio griego acabe prendiendo en otras economías, en particular la española o la italiana, haciendo el problema inmanejable. El rescate griego es asumible por los países centrales de la eurozona; el mayor problema reside en la torpeza y la falta de voluntad de los dirigentes políticos para afrontarlo, lo que atiza la desconfianza y fomenta los miedos a una suspensión desordenada que provoque un auténtico tsunami de gravísimas consecuencias en la banca europea. EXPANSIÓN. 13-9-2011