En las últimas semanas, para movilizar a su electorado, Joe Biden advirtió en sus mítines: «¿Queréis saber cuál es el programa de Donald Trump? Pues googlead ‘Project 2025’ e investigad». Así que… ¿de qué va?
El Proyecto 2025 es un plan elaborado por uno de los más influyentes think tank conservadores de EEUU y que orientó buena parte de las políticas de los gobiernos de Reagan o Bush, la Heritage Foundation, que plantea toda una serie de políticas extremadamente reaccionarias, una especie de «manual» para que un futuro gobierno republicano revierta lo que ellos consideran «políticas de izquierda radical que han degradado a la sociedad estadounidense».
El documento plantea cuatro pilares fundamentales. El primero es «proteger a la familia» -limitando la consideración como tal a la idea bíblica del matrimonio y los hijos- y atacando duramente el feminismo (la «ideología de género») y los derechos LGTBI, por supuesto acabando con las uniones del mismo sexo o con el derecho al aborto.
Otro eje consiste en adelgazar al máximo la administración federal, dando mucho más poder a los Estados para hacer de su capa un sayo. Sin tocar lo relativo a la Defensa o a la política exterior, claves para la hegemonía de EEUU, proponen reducir a lo mínimo posible el FBI, el Departamento de Justicia o incluso eliminar por completo el Departamento de Educación. Con el pretexto de reducir la burocracia… darían mucho más poder a la Casa Blanca y a los gobernadores… para imponer su agenda ultraconservadora sin cortapisas.
El tercer eje -en total consonancia con lo que propone Trump- consiste en una feroz política antiinmigración. Además de la construcción del Muro, proponen restringir las condiciones para las visas, limitando las condiciones y subiendo las tasas.
Con respecto a China, suben aún más el listón de la agresividad. Nada de guerras comerciales o subir aranceles. Lo que exigen es directamente romper todo lazo comercial con Pekín.
Antes de la Convención republicana, Trump se distanció de la Heritage Foundation. “No sé nada del Proyecto 2025. No tengo ni idea de quién está detrás. No estoy de acuerdo con algunas de las cosas que dicen, que son absolutamente ridículas y pésimas”, dijo en sus redes. Sin embargo, está claro que más allá de la intensidad o de tacticismos -Trump ha decidido bajar los decibelios contra el aborto o las libertades LGTBI para no dar munición a los demócratas-, la identidad de las orientaciones entre el Project 2025 y el programa trumpista es casi total. Y algunos de los redactores del Proyecto 2025 -como Russell Vough- son parte del actual equipo de campaña de Trump.
Por tanto, más allá de lo que ahora diga, es muy posible que -de ganar en noviembre- muchas de las ideas del Project 2025 acaben incorporándose a la agenda política de Trump.