Opinión

Por lo que nos toca…

“No sólo de an vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social. Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros?” (Discurso de Federico García Lorca en la inauguración de la biblioteca de Fuente Vaqueros, en Septiembre de 1931) ¿Quién puede limitar o subvertir los frutos del espíritu humano?, ¿quién ha de poner esas vallas a tan amplio y extenso monte?… nadie, efectivamente, nadie. Desde que se construyeron los cimientos de la Transición se instalaron los pilares de una especia de régimen cultural, un “orden de cosas” basado en el pensamiento único, en una sola forma de ver la realidad e interpretar el mundo. Muchas son las leyes, recortes y subvenciones que han servido para consolidar la hegemonía de esta mono-escuela de pensamiento asentada en el monopolio cultural, el silencio informativo y la asfixia científica. Pero en las últimas semanas, con la irrupción del 15-M a emergido una realidad que permanecía oculta: “la sociedad española” está “llena de vida y repleta, en todas sus partes, de fuerza de resistencia”. Estas palabras extraídas de “La España revolucionaria” de Marx (1854), al referirse al error de Napoleón al pensar que la sociedad española era un reflejo de su estado decrépito y corrupto, reflejan con fidelidad lo que ha empezado a caminar estas semanas. Existe todo un mundo de alternativas, colectivas o individuales, buenas o malas, profesionales o amateurs, e incluso avanzadas o reaccionarias, que se han ido tejiendo como rebelión al orden vigente de pensamiento y cultura. En los últimos nueve años Foros21 se ha esforzado en servir de altavoz a este caudal sin cauce. Pero sin duda son los lectores, y especialmente los suscritos la fuente que nutre esta labor. Nuestro compromiso está en redoblar el trabajo y corregir lo que haya significado un déficit en el papel que hace ya casi una década decidimos asumir. A ustedes les proponemos que contribuyan con la información que ni la mejor agencia de noticias puede proporcionar, y suscribiéndose, pues ésa es la base de nuestra independencia. Contribuir en ampliar y multiplicar las voces contra el pensamiento único es una tarea a la que todo demócrata debemos contribuir activamente. Por lo que nos toca…