“Pilar era la gran matriarca del cine español”

El 17 de julio nos dejó Pilar Bardem. Agustín Díaz Yanes dirigió una de las mejores películas de nuestro cine, con una interpretación memorable de Pilar Bardem

Su interpretación de la inolvidable Doña Julia, esa señora comunista «todo corazón», en ‘Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto’ de Agustín Díaz Yanes por la que ganó el Goya a la Mejor Actriz de reparto, conquistó los corazones de todos y catapultó su carrera.

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La muerte de Pilar Bardem ha tenido gran impacto en muchos sectores. Ella era “La Bardem”. El artículo “La” la coronaba como un referente para muchos. ¿Cómo la describiría usted?

Yo trabajé con ella cuando todavía no era tan conocida. En primer lugar era una persona encantadora, en segundo lugar era una gran actriz, y en tercer lugar era una estupenda amiga. Era una mujer que se merecía todo lo que le pasó. Aunque triunfó tarde tenía un talento como actriz excepcional. Todo lo que hizo en la vida poco a poco le fue saliendo bien.

Su interpretación enNadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto” le valió el Goya y catapultó su carrera. ¿Cómo fue dirigirla?

Facilísimo. Ella tenía el personaje muy pensado. Desde el principio yo me abstuve de decirle cosas para no fastidiar su preparación y acerté. Interpretó un personaje fantástico, mucho mejor que el que yo había escrito. Monté todo lo que ella había hecho.

¿Se diría que parte del personaje de “Doña Julia” estaba ya en la propia Pilar Bardem?

Sí. Por eso el trabajo fue tan sencillo. El personaje le iba como anillo al dedo. Ella había sido una persona muy luchadora, y siguió luchando después del éxito. Había tenido que combatir diversos frentes de la vida. Sus hijos por entonces empezaban a despuntar, pero no era una mujer de dinero en aquel momento. A ella le costó mucho salir adelante. Era una mujer de mucho carácter.

“Venía de familia comunista y lo llevaba en la sangre”

A partir de «Nadie hablará…” Bardem se convirtió en bandera del nuevo cine español de los 90´ en el que las mujeres eran protagonistas.

Sí. Aunque yo creo que el protagonismo de las mujeres en el cine español empezó antes. Ella era una mujer muy llana que se ganaba enseguida la simpatía del público, con lo cual enseguida se convirtió en un icono del cine español.

“De ella sí hablarán” es el título del artículo que has escrito sobre ella en la prensa. Es muy elocuente.

Aproveché el título de mi película para ponerla en valor. Yo creo que se seguirá hablando mucho de ella. Ha sido un personaje muy importante del cine español. Se le ha hecho justicia en vida pero se le hará aún más justicia tras su muerte. Porque no había muchas actrices como ella.

Ellas misma en sus memorias resume su trayectoria como “Sobre todo lucha”. ¿Su compromiso político, social y profesional se transfiere en la pantalla?

Ella viene de una familia de comunistas y lo tenía en la sangre. Pilar tenía un fuerte compromiso como actriz y ciudadana.  A excepción de alguna gente bastante boba, Pilar caía bien a todo el mundo porque se la veía sincera, que no la motivaba ni la fama ni el dinero.

El personaje de Doña Julia está inspirado en tu propia madre; Pilar Bardem es la matriarca del clan Bardem y muchos en la profesión la consideran “la mamá grande”. ¿Es Pilar madre de muchas cosas?

Es verdad. Era como la madre de todos nosotros. Desde luego yo la consideraba así. Era un amiga, pero sobre todo una amiga maternal. Es una gran matriarca del cine español. Una persona con autoridad, con gravitas.

“Pilar era como la madre de todos nosotros”

Su compromiso profesional era también militante. Al frente de AISGE logró muchas conquistas en los derechos de los artistas.

Tuvo un papel muy combativo. Ella fue presidenta de AISGE muchos años. Organizaron una sociedad muy fuerte y lograron muchas conquistas a través de la lucha sindical.

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Breves apuntes sobre una grande del cine español

La muerte de Pilar Bardem, socia y amiga de esta casa, desató una doble e inmensa ola de cariño y admiración: por la actriz y por la persona luchadora y solidaria que fue.

Madrileña nacida en Sevilla, por ser hija de cómicos en gira teatral. Venía de una saga teatral. Rafael Bardem, su padre, primer actor del Teatro Infanta Isabel y su madre la también actriz Matilde Muñoz. Llevaba en la sangre el talento y el espíritu revolucionario. Actriz por naturaleza y derecho. Hija, nieta y madre de actores.

Mas de 80 películas, 43 obras de teatro y 31 series televisivas hablan por ella. Trabajó con directores como Fernando Fernán Gómez en El mundo sigue. Actúo en series como Los gozos y las sombras y Lorca, muerte de un poeta. Ganadora de un Goya por su inolvidable papel de Doña Julia en Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto a las órdenes de Agustín Díaz Yanes. Nadie hablará… catapultó su carrera en los 90, encadenando papeles protagonistas como el de la magnífica María Zambrano de ‘María Querida’. Participó en Airbag de Juanma Bajo Ulloa, Las edades de Lulú de Bigas Luna, Carne Trémula de Pedro Almodóvar, entre otros títulos.

Su hermano Juan Antonio Bardem se convirtió en un director imprescindible del cine español. Y su apellido traspasó las fronteras con el éxito de su hijo Javier Bardem.

De niña quiso ser misionera y acabo siendo militante. Madrid, actriz y misionera . “La vida de la Bardem no se entiende sin su amor por los demás, por proteger, por ayudar”, había escrito de su “Mamá Grande” su hijo, Carlos Bardem.

Roja, muy roja ; mujer feminista y luchadora, y madre de tantas cosas. Ferviente republicana y activista. Defensora de los derechos de los actores y las actrices dentro y fuera de los escenarios, encabezando la lucha por las reivindicaciones laborales de su profesión o apoyando las Huelgas Generales. Su trabajo al frente de la presidencia de AISGE, asociación en defensa de los derechos de los “cómicos”, la convirtió en referente iberoamericano de las sociedades de gestión, ayudando a los sindicatos nacionales a la creación de sociedades de gestión. Luchó por los derechos sindicales de sus compañeros, consiguiendo que se dejaran de hacer dos funciones diarias. Encabezó el movimiento de No a la guerra,  durante el gobierno de José María Aznar. Amiga del pueblo saharaui, al que tanto apoyó siempre, en manifestaciones y en el Festival FiSahara. Su experiencia vital con un matrimonio tortuoso, su compromiso y conciencia política la convirtió en abanderada de los derechos de las mujeres.

El pasado noviembre escribió una carta de despedida para AISGE en la que se dirigía a sus compañeros del gremio: “Alguna vez he comentado que me siento actriz casi desde el mismo día en que vine al mundo, hace algún que otro año ya. O, si queremos quitarle un poco de énfasis al asunto, desde que tengo uso de razón. Adoro esta profesión con todas mis fuerzas, me enorgullezco de haber dejado mi impronta en ella siempre que las circunstancias lo han permitido”, comenzaba. “Solo puedo confesaros, para quien quiera leerlo, que mis hijos, mi oficio y el compromiso con la sociedad y las causas que considero justas han sido y son mi vida”.

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5 películas imprescindibles de Pilar Bardem

El mundo sigue (1963)

Esta película, dirigida por Fernando Fernán Gomez, marca el inicio de una exitosa trayectoria de la actriz. Bardem encarna el personaje de una joven modelo obligada a prostituirse.

Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto (1995)

Su interpretación de la inolvidable Doña Julia, esa señora comunista «todo corazón»,  en ‘Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto’ de Agustín Díaz Yanes, por la que ganó el Goya a la Mejor Actriz de reparto, conquistó los corazones de todos y catapultó su carrera.

Carne trémula (1997)

 «Ay, la incultura, qué mala es»  Inolvidable frase del personaje interpretado por Bardem, una proxeneta que ayudaba a una embarazadísima Penélope Cruz tras romper aguas en el film de Pedro Almodóvar.

Airbag (1997)

Pilar Bardem es ‘La Herme’, la dueña del puticlub en el que el protagonista, Juantxo (Karra Elejalde), pierde su anillo de compromiso mientras celebra su despedida de soltero. Dirigida por Juanma Bajo Ulloa.

María Querida (2004)

En uno de sus últimos papeles como protagonista, Bardem se puso en la piel de María Zambrano, escritora, poeta y filósofa de la Segunda República, cuando regresa a España a recoger su Premio Cervantes tras más de una década en el exilio. Fue por segunda vez a un Premio Goya, en esta ocasión en la categoría de mejor actriz protagonista.