La banca hace su agosto en plena crisis encareciendo el crédito

Peores que los usureros

(EFE)

«Lograr márgenes que compensen la caí­da del volumen». Esta es la jerga financiera que los bancos utilizan para camuflar el atraco. El precio oficial del dinero baja y baja, pero los intereses que nos exigen por los créditos suben y suben. En plena crisis, los bancos han acumulado todo el capital para sí­, estrangulando el acceso al crédito para familias y pymes. Y, para no ver afectados sus ingentes beneficios, han procedido a cobrarnos intereses que triplican o cuadruplican el fijado por el Banco Central Europeo. Así­ podemos entender cómo el Santander ha presentado sólo en el primer trimestre del año ganancias por valor de más de 2.000 millones de euros.

Además de la restricción y el encarecimiento del crédito, or delante aún queda la reestructuración del sector financiero con un nuevo plan de rescate público, junto al inevitable desahucio de familias y el cierre de empresas por impago. Temas calientes que pueden perjudicar al Gobierno.Con este panorama, bancos y cajas se han centrado en evitar que se desboque la morosidad, en reducir gastos y encarecer los créditos para lograr márgenes que compensen la caída del volumen.Hasta el 30 de marzo, las cinco grandes entidades -Santander, BBVA, La Caixa, Banco Popular y Caja Madrid- redujeron su beneficio un 18%, hasta los 4.482 millones. De esta cantidad, casi la mitad la consiguió sólo la entidad presidida por Emilio Botín. No en vano es el primer banco del mundo por beneficios.La morosidad media se ha triplicado desde el 1,09% de marzo de 2008 al 3% actual. Y tanto bancos como cajas se ven obligados realizar provisiones –una especie de “caja de seguridad” ante impagos- de cientos de millones que deben descontar de los beneficios.La receta contra la enfermedad la ha expresado con total desfachatez el gobernador del Banco de España: “En el corto plazo, la morosidad persistirá en su aumento, por lo que seguirán subiendo las provisiones para insolvencia. ¿La solución? Reducir gastos y sacar más márgenes de los créditos y los depósitos”.Bancos y cajas no han tardado en seguir el consejo, y se afanan en sacar provecho de la caída de tipos de interés. Aunque la liquidez es escasa, el Banco Central Europeo presta al 1,75% y se les coloca a los clientes mucho dinero entre el 6% y el 14%, dependiendo del tipo de crédito. También se benefician del enorme número de créditos a tipo variable que se revisan una vez al año.La diferencia entre prestar y tomar prestado se refleja en la cuenta de resultados, en la partida "margen de intereses". Es cierto que los créditos crecen poco, pero la prima de riesgo por la posible morosidad es mucho mayor y hay que pagarla. Los financieros reconocen que el precio del dinero se ha triplicado por la crisis y el riesgo de impago, aunque para las entidades se ha abaratado hasta niveles nunca vistos. Por ejemplo, el Santander tiene un margen con clientes de 4,65 puntos en todo el grupo, aunque en Brasil esta diferencia se dispara hasta los 17 puntos. En el caso del BBVA es de 3,23 puntos, y en el Popular, 3,43 puntos. Otras entidades no lo facilitan, pese a ser relevante, aunque se puede deducir por el incremento del margen de intereses antes citado.Según los datos del Banco de España, este margen creció un 14% en el ejercicio 2008 "y continuará con una favorable evolución en los próximos trimestres".Peores que los usureros.