Pedro Sánchez anuncia sus primeras medidas

En su primera comparecencia ante el Parlamento para explicar las medidas del nuevo gobierno, Sánchez ha explicado las políticas que lanzará su ejecutivo, basadas en consolidar el crecimiento económico, recuperar poder adquisitivo para las clases populares, avanzar en igualdad de hombres y mujeres, regenerar la democracia, buscar el diálogo con la Generalitat y en mirar hacia una Europa común.

Medidas económicas

Sánchez ha basado buena parte de su discurso en explicar su política económica. El nuevo gobierno ha pedido mayor flexibilidad a Europa en lo que se refiere a disciplina fiscal, y a cambio se ha comprometido a la estabilidad presupuestaria.

Para poder financiar sus medidas sociales, el ejecutivo de Sánchez ha anunciado dos importantes subidas de impuestos a las grandes empresas. Una es un alza impositiva a las empresas tecnológicas (un sector que apenas paga impuestos en España), con el objetivo declarado de cuadrar la sostenibilidad del sistema público de pensiones.

Otra es el Impuesto de Sociedades (IS), buscando que el tipo efectivo para las grandes empresas (lo que realmente acaban pagando) se sitúe en el 15%. La realidad es que aunque el tipo nominal del IS se sitúa entre el 25 y el 30% (que las pequeñas y medianas empresas pagan de forma prácticamente íntegra), los grandes bancos y monopolios del Ibex cotizan como media por debajo del 10%, y en muchos casos la mitad de eso. Por no hablar de muchas multinacionales para las que España es casi un paraíso fiscal, y que acaban cotizando apenas un 1-2% de sus ganancias. El sistema fiscal para las grandes empresas es una especie de queso gruyere plagado de deducciones, créditos y exenciones, que ha hecho que los ingresos procedentes del Impuesto de Sociedades para las grandes empresas monopolistas han caído a plomo. Sánchez quiere limitar eso.

Respecto a la financiación autonómica, el nuevo gobierno relaja su disciplina de gasto. Las CCAA pasarán de un objetivo de déficit del 0,1 al 0,3% del PIB, lo cual les dotará de un margen fiscal de 2.500 millones de euros.

En cuanto a las amnistías fiscales, el gobierno de Sánchez se ha comprometido a hacerlas ilegales de ahora en adelante, pero -ante la protesta de los grupos de la izquierda- se ha plegado ante la imposibilidad de publicar los nombres de los defraudadores acogidos a la amnistía fiscal realizada por el Gobierno de Mariano Rajoy. «No podemos modificar un pasado ya sentenciado. Ya me gustaría, créanme; pero sí podemos evitar nuevas amnistías».

Política laboral

Después de impulsar un acuerdo entre sindicatos y patronal por el que ambas partes han acordado que los sueldos de los convenios subirán hasta un mínimo de 1.000 euros al mes, Sánchez ha hecho varios anuncios sobre el mercado laboral. Uno de sus ejes es un plan contra el desempleo juvenil (que en España alcanza un 45%, frente al 20% de la media de la UE). En ese sentido ha adelantado medidas contra la precariedad del empleo joven, afirmando que revisará los llamados «contratos de relevo», que desarrollará una nueva regulación de las prácticas no laborales, y que aprobará un Estatuto del Becario.

El socialista ha declarado que su objetivo es un «reparto equitativo de la riqueza» en la que los salarios recuperen el peso en la renta nacional que tenían antes de la crisis, con una subida del salario mínimo, la lucha contra la economía sumergida, las horas extraordinarias ilegales, los falsos autónomos y la discriminación por raza o género. «Vamos a aprobar un plan director contra la explotación laboral, que supondrá un cambio de rumbo en las políticas laborales, para erradicar la desregulación de las condiciones de trabajo», ha declarado Sánchez.

También ha afirmado que derogará los delitos relacionados con la actividad sindical: «Vamos a derogar el párrafo 3 del artículo 315 del Código Penal sobre los delitos relacionados con la libertad sindical».

Pensiones

Además del ya mencionado impuesto a las tecnológicas para ayudar a financiar el sistema público de pensiones, ha anunciado su intención de constituir “un nuevo Pacto de Toledo” con el que recuperar el Índice de Precios de Consumo (IPC) como referencia para actualizar las pensiones.

Vivienda

Para combatir el gravoso encarecimiento del precio de la vivienda (en especial los alquileres), el nuevo gobierno socialista ha apostado por crear un parque de 20.000 viviendas públicas en alquiler. Además creará leyes para elevar la prórroga forzosa de los contratos de arrendamiento de tres a cinco años; limitar las fianzas, y acotar las viviendas turísticas para desinflar la burbuja de precios que se detecta en algunas grandes ciudades.

Vuelta a la sanidad universal y fin de los copagos

Una de las medidas que ha anunciado el gobierno socialista estos días es el decreto por el que se reinstaura la sanidad universal, derogando todas las medidas que el PP aprobó contra los trabajadores extranjeros son papeles. A partir de ahora los inmigrantes serán atendidos sin necesidad de tarjeta sanitaria, empadronamiento, ni permiso de residencia. Los migrantes tendrán acceso a la atención primaria y dejarán de tener que acudir a Urgencias. Esto último además de atascar el funcionamiento de los hospitales tiene a la postre un coste mayor para el sistema sanitario. Al mismo tiempo se han anunciado medidas para controlar el «turismo sanitario».

Para el resto de los trabajadores también se reinstaura la universalización de la sanidad en toda su magnitud. La situación laboral tampoco afectará a la tarjeta sanitaria. Se podrá tener acceso a ella sin necesidad de haber cotizado a la Seguridad Social.

Otras novedades estarán en la subvención de medicamentos. Los pacientes aportarán sólo un 40% del precio estipulado en los fármacos.

Violencia de género

Ante los recientes hechos y sentencias relacionadas con el caso de «La Manada» y la enorme indignación social levantada, el nuevo ejecutivo busca garantizar que las condenas por agresión sexual no dependan más de la interpretación de los jueces. Sánchez ha reiterado que el Ejecutivo aboga por reforzar la «perspectiva de género» en la Justicia. Ha prometido que su «Gobierno feminista» se centrará en propiciar socialmente “una sensibilización temprana ante la violencia ejercida contra la mujer como algo infame”, y ha afirmado que reformará las leyes para clarificar los delitos relacionados con las agresiones sexuales, tal y como adelantó la vicepresidenta Carmen Calvo. «Si dice no es que no y si no dice que sí también es que no»

Política de transición energética

En su comparecencia, Sánchez ha abogado por impulsar políticas que «democratizadoras de la energía» que impulsen el autoconsumo energético, que además de la derogación del Impuesto al Sol constarán de una Ley de Cambio Climático y de Transición Energética, un Plan Nacional de Integración de Clima y nuevas medidas para la innovación tecnológica y su desarrollo.

Cataluña

Sánchez ha enmarcado su orientación hacia las tensiones en Cataluña con dos vectores. La búsqueda del diálogo con la Generalitat y el campo soberanista -“dialogar no es ceder, sino hacer política”, ha insistido- mostrando su su disposición a «alcanzar una solución política» a través de «un diálogo franco y directo». Pero siempre poniendo el límite del «Estatuto y de la Constitución», y admitiendo que estamos ante un problema que no tendrá una salida «ni fácil ni rápida».

RTVE

Un día después de que el Congreso no aprobara la renovación de la cúpula de RTVE, Sánchez lo ha lamentado y ha pedido el respaldo de los grupos para el nombramiento del administrador único que se propondrá para gestionar la corporación hasta que culmine el proceso de elección de los nuevos consejeros.

Política exterior

Sánchez ha abogado porque nuestro país tenga una presencia mucho más activa en los foros internacionales, especialmente en Europa, y por «asumir el reto migratorio y la lucha contra el terrorismo». En esta política exterior anunció que “Marruecos, país amigo, va a ocupar un lugar destacado”.