Más de 150 organizaciones y plataformas feministas y de mujeres están convocando para el 7 de noviembre en Madrid la primera marcha estatal «contra las violencias machistas», que ponga de manifiesto la creciente indignación ante los continuos asesinatos de mujeres a manos de sus parejas (o exparejas) y para exigir a las fuerzas políticas y gobiernos un Pacto de Estado para erradicar la violencia contra las mujeres y que ayude, proteja y repare a las víctimas.
En lo que va de año, según organizaciones feministas, 70 mujeres, niñas y niños han sido asesinadas (unas 40 según las cifras oficiales). Una cifra escalofriante, exponente de la terrible realidad que sufren cientos de miles de mujeres en nuestro país, en todas las comunidades, y que alcanza indiscriminadamente a cualquier miembro del entorno familiar (hijos, hijas…). Una situación de auténtico “terrorismo machista” según las feministas: “El terrorismo machista es una cuestión de Estado, y para combatirlo hay que realizar un pacto de Estado”.
Conseguir que la violencia de género sea tratada como “Cuestión de Estado” es un objetivo central de la marcha, bajo la forma de un Pacto de Estado para que los partidos y los gobiernos adquieran compromisos serios para erradicar la violencia de género, como el desarrollo y aplicación del conocido como Convenio de Estambul o “Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica”, partidas en los Presupuestos que garanticen protección y ayuda o la eliminación de tasas universitarias para las hijas/os de las víctimas.«A diferencia de otras convocatorias, no es una marcha “feminista”, se está convocando con el apoyo de organizaciones de mujeres de todas las tendencias e ideologías»
Se espera una marcha multitudinaria, no sólo por el grado de indignación y sensibilidad alcanzado en amplios sectores de la población, especialmente femenina, y por la intensa campaña de movilización que se está realizando en toda España, con gran protagonismo en las redes sociales, sino porque, a diferencia de otras convocatorias, la “Marcha contra las violencias machistas” no es una marcha “feminista”, se está convocando con el apoyo de organizaciones de mujeres de todas las tendencias e ideologías, y pidiendo el apoyo de organizaciones ciudadanas, partidos y sindicatos. Porque como se insiste entre las organizaciones convocantes: “Nos afecta a todas y todos, y es problema de todas y todos”.
Entre las iniciativas que se están desarrollando en la convocatoria y preparación de la marcha destaca la moción que se está presentando en numerosos ayuntamientos para que éstos se comprometan con la “erradicación del sexismo, la segregación, el acoso y los estereotipos sexuales; y la atención a mujeres en especiales situaciones de vulnerabilidad ante la discriminación y la violencia”, y a mantener los recursos municipales para la igualdad y la prevención y atención a las víctimas de violencia.