Desde el pasado 16 de septiembre el pueblo iraní se ha puesto en pie. El asesinato de Masha Amini, una joven de origen kurdo de 22 años, tras ser arrestada y torturada por la “policía de la moral” del régimen de los ayatolás por no llevar el velo correctamente puesto, ha despertado la indignación en todo el país. Las movilizaciones recorren Irán noche y día, en las ciudades y en el campo…, uniendo a hombres y mujeres, madres e hijas, estudiantes y trabajadores. Cuando entramos en la cuarta semana de protestas, el número de víctimas puede superar el centenar y se habla de miles de detenidos.
Fariba Ehsan es una de las representantes de la lucha de las mujeres y el pueblo iraní en nuestro país. Fariba es presidenta de la Asociación Iraní Pro Derechos Humanos desde 2009. Lleva en España ya 27 años, desde 1995.
Preocupada y esperanzada a la vez por la situación de su país, en esta entrevista nos transmite la unidad que se está fraguando en Irán entre los diferentes sectores populares con un lema común: “¡Mujer, Vida, Libertad!”
El asesinato de Masha ha sido como una “chispa”, pero desde aquí percibimos que había ya una gran indignación y ansias de rebelión en la sociedad iraní.
De verdad que sí, el asesinato de Masha Amini ha provocado la erupción de un volcán que ha permitido que surgieran las iras que tenía la gente acumuladas durante estos 43 años. Y esta ira acumulada ha salido y lo que se pide es: “Abajo el gobierno de la República Islámica de Irán, ¡que se vayan!”
¿Es un movimiento unitario, qué edades y sectores recorre?
Se está consiguiendo una gran unión de todos los iranís tanto kurdos, como baluches o turcos. Es un movimiento de todas las edades, mayores, adolescentes, jóvenes… se están uniendo a la lucha. Ayer mismo en la Universidad de Shiraz, en la Facultad de Medicina, hombres y mujeres, todos los trabajadores salieron al patio unidos. Los hombres gritaban “Mujer, Vida, Libertad” y las mujeres contestaban: “Hombre, País, Prosperidad”. Estos mensajes son muy esperanzadores y nos están diciendo que llegará pronto el momento que todos los iranís están esperando: La libertad.
El asesinato de Masha Amini ha provocado la erupción de un volcán del que surgen las iras de la gente acumuladas durante estos 43 años.
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¿La movilización es urbana o llega también al campo?
El movimiento es sobre todo urbano. Pero hay zonas como las del Kurdistán, norte de Irán y otras en las que ha llegado al campo. Incluso en una ciudad muy pequeña, en la frontera con Turquía, durante unos días el control de la ciudad ha estado totalmente en manos de la gente. Los agentes del gobierno tuvieron que pedir ayuda a otras ciudades para retomar el mando.
¿Cuáles son las reivindicaciones que piden los manifestantes?
No salimos esta vez sólo contra la hijab, porque la hijab no es sólo cubrirse la cabeza, sino que supone una humillación de las mujeres, una humillación de los seres humanos. Nos tratan como ciudadanos de segunda, nos apartan de los movimientos y de la vida social. En muchos sectores no dejan a las mujeres trabajar ni estudiar lo que quieren, nos hacen invisibles.
¡Mujer, Vida, Libertad! estos mensajes son muy esperanzadores
Sin embargo muchas mujeres iranís tenéis una gran formación universitaria y profesional…
Sí, según estadísticas del gobierno, un 60% de las mujeres iranís tienen estudios superiores. Pero la mayoría no trabajan de acuerdo a los estudios que tienen; aunque este es un problema que también afecta a los hombres.
¿Qué perspectivas tenéis, crees que el movimiento puede triunfar?
Debemos ganar, no tenemos otro remedio, no podemos aguantar más y tenemos que ganar. La oposición iraní se está uniendo en torno a un eje: “Este gobierno tiene que marcharse, todos están pidiendo un estado democrático y secular para el futuro de Irán”. La percepción es que esta vez va a haber un cambio. Hay una unión entre la gente, con las mujeres “delante” y los jóvenes valientes.
¿El movimiento es espontáneo o está organizado?
La gente no sale por salir, toda la gente que se moviliza en diferentes ámbitos lo hace con un mismo mensaje: “Mujer, vida y libertad”. Hay organización, aparte de las manifestaciones la gente se está uniendo por una Huelga General. Seguramente el movimiento tiene una organización en Irán, pero no se puede dar a conocer por seguridad.
Se está consiguiendo una gran unión de todos los iranís, tanto kurdos, como baluches o turcos…
¿Qué podemos hacer? ¿Cómo podemos ayudar desde España y el resto del mundo?
Muchas gracias por esta pregunta, podéis hacer mucho, podéis ser nuestro altavoz, extender nuestras voces. Esto nos da mucha esperanza porque en los movimientos anteriores yo buscaba a los medios para que se acercaran a nuestra concentración, pero no lo hacían.
Tenemos un documental hecho por un cineasta iraní que se llama “Confesiones forzadas”. Explica cómo el gobierno cuando detiene a una persona, la tortura y le obliga a confesar su culpabilidad en la televisión. El documental tiene ocho o nueve años pero es totalmente actual, sin embargo no hemos conseguido presentarlo en casi ningún sitio.
Esta vez sí, y queremos vuestra ayuda, no nos dejéis solas. Apoyadnos en las movilizaciones que vamos a hacer y también es importante extender el mensaje unitario de las movilizaciones: “¡Mujer, Vida, Libertad!”