El juez archiva la causa contra Oltra que llevó a su dimisión

Mónica Oltra: todo era humo… tóxico

Nada. Cero. Humo tóxico con olor a 'lawfare'. Dos años después de la dimisión de Mónica Oltra, el caso que se montó contra ella a través de oscuros personajes de ultraderecha cae en el sobreseimiento por falta de pruebas

Cuando se van a cumplir dos años desde que la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, de Compromís, dimitiera después de ser imputada por un turbio caso, en el que se le acusó de encubrir a su marido en un caso de abuso a una menor tutelada… el Juzgado de Instrucción número 15 de València acuerda el sobreseimiento provisional de las diligencias.

No se han hallado pruebas de encubrimiento alguno en los correos intercambiados por la exvicepresidenta y exconsellera de Igualdad con su equipo, según la investigación de la Policía Judicial

El magistrado considera que no existen los suficientes indicios para seguir la causa contra Oltra y los otros quince acusados, por el presunto encubrimiento de los abusos de un educador a una menor tutelada por la Generalitat. El educador era el exmarido de Mónica Oltra cuando sucedieron los hechos, aunque seguían conviviendo en la misma vivienda.

Tras examinar la Policía Judicial más de 48.000 correos, «no se ha acreditado, ni siquiera al nivel propio de los indicios, que Mónica Oltra, ni cualquier otra persona de la Consellería [de Igualdad], dirigiera orden, instrucción, consigna o indicación alguna a los investigados hasta ahora mencionados acerca de cuál debía ser su modo de proceder en relación con M. [la menor que sufrió los abusos] o en relación con Luis Eduardo Ramírez [el monitor y exmarido de Oltra], respecto de los hechos ya mencionados y que luego fueron enjuiciados por la Audiencia Provincial», dice el auto del Juzgado de Instrucción 15.

La agitadora ultraderechista Cristina Seguí, junto al líder de España 2000 Jose Luis Roberto, son los abogados de la acusación de un caso Oltra que siempre olió a ‘lawfare’

Además, la credibilidad del llamado ‘caso Oltra’ ya había quedado seriamente dañada con la sospecha de «lawfare», cuando unos meses después de la dimisión de la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana salió a la luz una pelea pública entre la menor abusada y sus abogados ultraderechistas – la agitadora Cristina Seguí, a través de la asociación Gobiérnate, y el dirigente del partido España 2000, José Luis Roberto- a quienes acusó de haberla «dejado tirada» tras haberle prometido casa y trabajo a cambio de implicar a Mónica Oltra.