Merkel no sólo ha propuesto la rebaja salarial acabando con el modelo de negociación colectiva español (que vincula salarios a IPC), sino que ha dejado en el aire otra propuesta a la que el gobierno de Zapatero se ha aferrado con igual fervor, la aplicación del «modelo alemán» de reducción de jornada. Se trata de reducir la jornada laboral, y en la misma medida los salarios, para «evitar» los despidos y «garantizar» el empleo.
¿Pero es ese un modelo alicable en España, o mejor dicho, es un modelo que si se aplica va a favorecer el mantenimiento del empleo, sobre todo de un empleo de calidad?Nos quieren convencer de que es una forma de garantizar el empleo, pero realmente es un mecanismo más para despedir y mantener una parte del paro encubierto.Todos los expertos no directamente vinculados al gobierno ponen en cuestión que esta medida vaya a suponer una garantía para el empleo. Al contrario, piensan que en realidad la aplicación de este “modelo alemán de reducción de jornada y salarios” supondría un nuevo problema: una auténtica fábrica de empleo encubierto.Las diferencias con Alemania son evidentes. En Alemania se aplica desde 1957 de una forma temporal, para empleo cualificado y en empresas que atraviesan un momento de dificultades. Los trabajadores reducen su jornada y su salario y el Estado se hace cargo del 70% de su nómina. A los pocos meses, superado el momento de dificultades empresariales, los trabajadores se reincorporan plenamente a su actividad anterior.Pero su aplicación a España cambiaría completamente su sentido. Aquí no se trata de proteger un empleo de calidad durante un tiempo acotado para que el trabajador vuelva a la empresa. El ajuste del mercado laboral español es con empleos mayoritariamente de baja cualificación y temporales, precarios. Y sobre todo la destrucción de empleo es masivo en sectores, como la construcción, donde no es previsible una recuperación en décadas del empleo, lo que significa que cualquier medida de este tipo aplicada en estos sectores sólo serviría para mantener artificialmente-subvencionados unos empleos que dejarían de existir en cuanto acabaran las subvenciones públicas.La aplicación a estos empleos del “modelo alemán” es la puerta abierta al despido subvencionado. A los empresarios se les da la posibilidad de colocar en una fase de despido a trabajadores que, una vez agotada la subvención de sus salarios por el gobierno, pasarían directamente al paro.Como reconocen los mismos grupos de economistas que incitan al gobierno a hacer las reformas del mercado laboral la propuesta de aplicar el llamado “modelo alemán” de reducción de jornada y salario” no está ligado a la mejora de las condiciones de vida de quienes trabajan, sino a “la reducción del paro”. Lo que en los hechos significa, como acabamos de denunciar, colocar a miles de trabadores durante un tiempo en condiciones de empleo subvencionado.Trabajo subvencionado, paro encubiertoSi según los datos de la EPA el 97% de los contratos que se firman son ya temporales, con este modelo lo que se incentivaría ese tipo de contratación aún más; los empresarios que contratan empleo temporal tenderían a prolongarlo bajo una supuesta reducción de jornada mientras duren las subvenciones públicas. En los hechos estos trabajadores son parados a plazo fijo, parados no registrados mientras están subvencionados, o lo que es lo mismo, una especie de ERE de paro encubierto.Si en un mercado como el alemán esta medida temporal acaba con la reintegración del trabajador a plena jornada en su empresa, en España su destino es la cola del paro.Estamos acostumbrados a que el gobierno de turno se invente mecanismos para encubrir el paro y tome medidas paliativas con los parados. Por un lado los oculta todo lo que puede, así en las listas “oficiales” del paro no figuran los parados que están en cursillos, los jornaleros parados del PER o los trabajadores que buscan empleo especial y demandantes de empleo con disponibilidad limitada. Por otro aprueba algunas subvenciones para mantener controlado un sector potencialmente explosivo.¿Por qué tanto interés en aplicar el “modelo alemán” de reducción de jornada y sueldo? Porque reúne todos los ingredientes que interesan al capital monopolista y al gobierno: rebaja salarial, trabajo subvencionado con dinero público (el 70% lo pagaría el Estado) y parados fuera de las listas del paro.Crear riqueza y empleoEl fondo de todas estas propuestas es el mismo: ofrecer a los trabajadores las viejas recetas del “empleo como bien escaso”, cuando lo que quieren es que aceptemos el reparto de la miseria y el paro encubierto, mientras ellos, la oligarquía financiera y las multinacionales, se llenan los bolsillos con la superexplotación de los trabajadores.Una vez más nuestro programa “De Verdad frente a la crisis” presenta una alternativa radicalmente diferente. Una serie de propuestas para liberar recursos y ponerlos al servicio de la producción, de la distribución de la riqueza y, por lo tanto, de la reactivación de la economía y de la creación de riqueza y empleo.Redistribución salarial para que nadie gane más de 10.000 pero nadie menos de 1.000; reforma fiscal para que paguen proporcionalmente más los que más tienen. Nacionalización de los recursos de la banca para ponerlos al servicio de la economía nacional y que devuelva los fondos de rescate entregados del dinero público. Integración de las Cajas de Ahorros en el ICO y ponerlas al servicio del crédito a las pymes, la economía productiva y la I+D+i. Recorte drástico de los gastos del Estado y acabar con el aumento de la deuda que hipoteca el país, cortando con el despilfarro y la corrupción, en los tres niveles central, autonómico y local, para destinar este ahorro a la economía nacional, el desarrollo de nuevas energías que acaben con nuestra dependencia energética y las mejoras sociales en educación, sanidad y dependencia.