El banco alemán Deutsche Bank y el Rabobank de Países Bajos están siendo investigados por condicionar el valor y los intereses de títulos de deuda emitidos por otros países. La Comisión Europea denuncia que entre hasta 2016 los dos bancos coordinaron sus estrategias de precios y de negociación para dominar el mercado.
Queda en descubierto uno de los mecanismos que permitieron endosarle a España y otras naciones de Europa las inmensas pérdidas financieras que a su vez EEUU había trapasado a Alemania durante la crisis de 2008.
Las naciones menos poderosas económicamente de Europa estuvieron sometidas durante una década a una inmensa crisis de Deuda. La ruina de la crisis económica se multiplicaba exponencialmente para las naciones que además de endeudarse para sufragar la crisis, debían pagar unos intereses desorbitados para conseguir vender sus títulos (bonos) de Deuda Pública.
La crisis de la deuda no fue un fenómeno económico aséptico y automático. Fue un saqueo deliberado y sistemático, desde las principales potencias imperialistas, hacia los países del sur de Europa, despectivamente llamados PIGS. Ahora sale a la luz uno de los mecanismos utilizados para subirnos los intereses a pagar.
La estafa afectó a los bonos estatales, a cédulas hipotecarias, a emisiones del Banco Europeo de Inversiones, y a deuda emitida por gobiernos regionales o ayuntamientos…
El coste acumulado para España en estos 15 años es inmenso. Sólo el pago de intereses de la deuda pública española en los presupuestos de este año se comió 30.175 millones €, lo que supone un 6,57% del gasto total del presupuesto nacional de 2022.
Para compararlo: El presupuesto del Ministerio de Universidades fue de 431 millones de euros, 70 veces menos que los intereses abonados. El total de inversiones en obra pública se quedó en 11.000 millones, tres veces menos… Y sólo son los intereses, otro tanto se come amortizar el capital que debemos.
En 2007, al comienzo de la crisis, la Deuda Pública de España era de 384.000 millones, un 35,5% del Producto Interior Bruto. En una decada pasó al 95% del PIB y ahora es del 117% (1.453.585 milones de euros). Se ha multiplicado casi por cuatro. Una parte correponde a la Pandemia, pero el grueso proviene de la crisis financiera.
En 2018 Bruselas ya abrió otra investigación por manipular el mercado a Bank of América Merrill Lynch, Crédit Agricole, Credit Suisse y Deutsche Bank , y les sancionó con 28,5 millones. El colmo es que se libró el banco alemán porque colaboró reconociendo los acuerdos ilegales entre los bancos.
Los dos bancos son acusados de elevar los intereses a pagar desde España por la Deuda Pública
Mitos
No era un problema de desenfreno de un sur de Europa que «vivía por encima de sus posibilidades». Era una conspiración bancaria que degradaba a las naciones, devaluaron el respaldo con el que nuestras haciendas públicas garantizaban los títulos emitidos de Deuda Pública para imponernos intereses más elevados.
La degradación alcanzó el nivel de bautizarnos a cuatro naciones como PIGS, cerdos en inglés, acrónimo formado con las iniciales de Portugal, Ireland, Greek y Spain.
Y llevándonos además al límite de la intervención extranjera, con un triunvirato de representantes del Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo, y la Comisión Europea, que desde Madrid decidían acerca de los gastos que el gobierno podía o no hacer.
En Italia llegaron a forzar un cambio de presidente para colocar a un gestor de fondos de inversión norteamericanos. A Grecia la empujaron al abismo de la pobreza, destapándose también que las agencias estadounidenses de calificación de Deuda habían alterado con pleno conocimiento de la realidad, hasta casi el último día antes de su quiebra, su valoración real…
El mito del despilfarro del sur era en realidad la manera de encubrir el atraco del norte y del otro lado del Atlántico.
Leyendas
Al tiempo se difundía la rectitud, sobriedad, y disciplina financiera Alemana, como ejemplo para toda Europa. Todo lo contrario.
Deutsche Bank, primer banco alemán, pasada la crisis de 2008, estuvo de nuevo al borde de la quiebra en 2016 de la que se salvó con una inyección de capital de 8.000 millones de dólares de la banca china.
Cualquier cosa menos disciplina financiera.
Y aún en 2019 este banco anunció otro plan de salvación con el despido de 18.000 empleados, y el reconocimiento de 78.000 millones de euros en títulos incobrables; pero al tiempo han fijado un sueldo anual para los miembros del Consejo de Administración de 2,30 millones de euros.
Cualquier cosa menos sobriedad.
Pero es que además el banco germano bate todas las plusmarcas en multas por prácticas ilegales: en 2003 fue condenado a pagar la mayor multa impuesta a una empresa en Alemania, por complicidad en numerosos casos de evasión fiscal; en 2013 Deutsche Bank aceptó pagar 725 millones de euros a la Comisión Europea por el escándalo de manipulación de la tasa de interés Libor; y dos años más tarde otros 2.500 millones de dólares a EEUU y Gran Bretaña por el mismo caso; en 2017 ambas naciones le impusieron nuevas multas por lavado de dinero procedente de Rusia. Hasta España multó hace unas semanas al banco germano con 200.000 euros por no delimitar a qué clientes ofrecía productos financieros complejos.
Culaquier cosa menos rectitud.
España debe reclamar por los daños sufridos. Y es un argumento más para calcular qué parte de la deuda contraída no es legítima.
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Una crisis de deuda que tuvo su epicentro en EEUU
Bonos basura y ninjas
En el periodo investigado se hizo popular el término «Bonos basura», para calificar la Deuda de algunos estados. Ese era el extremo, pero por el medio existe todo un sistema de calificación gradual. Cuanto más baja era la nota más intereses debían pagar los Estados por el dinero recibido a cambio.
Esta era la forma en que las burguesías monopolistas de EEUU y las más potentes de Europa endosaban a otras naciones las pérdidas por la inmensa basura (esta sí inservible) con la que EEUU había inundado el mercado financiero.
Porque el origen de la crisis estuvo en el hundimiento del mercado hipotecario norteamericano cuyo punto álgido fue el colapso del banco Lehman Brothers en agosto de 2007.
Las financieras norteamericanas concedieron millones de Hipotecas subprime, de alto riesgo de impago. En EEUU la hipoteca recae sobre la casa, no sobre las personas. Así que como se preveía, bastó que subieran un poco los intereses para que los propietarios no pudieran pagar, devolviendo las llaves.
Tan claro estaba que estas hipotecas iban a ser impagadas que sus titulares eran denominados en los bancos como NINJAS (No Income, No Job, No Assets) los que no tenían ingresos, ni trabajo, ni propiedades ni aval ninguno. Pero les firmaron una hipoteca.
EEUU endosó a Europa como “inversiones” millones de títulos de hipotecas subprime que eran una bomba de relojería
Los bancos de inversión estadounidenses conscientes del desastre que se venía trocearon esos títulos hipotecarios de riesgo, y los mezclaron con pequeñas partes de otros títulos de crédito más seguros para conseguir una buena calificación (que sus propias agencias certificaban) como producto de inversión. Usando su papel preponderante en el Mundo inundaron los bancos de Europa que a su vez vendían una parte a sus clientes. Toda la ganancia de la cadena dependía del pago mensual de las hipotecas por los «Ninjas» americanos… cuando todo se destapó el capital financiero norteamericano ya había traspasado buena parte del problema a los Deustche Bank, Rabobank…. inundándoles de títulos sin valor.
Los mecanismos de estafa desvelados ahora por la Comisión Europea no son sino la forma en que EEUU permitió traspasar a la Burguesía alemana parte de su ruina a las demás naciones europeas.