Nos llegó la noticia de que los compañeros de Metales Extruidos organizaban una marcha desde la empresa, reuniéndose con decenas de personas en la plaza del Carmen del barrio de Delicias, junto al lado de nuestra sede. Allí estuvimos.
Cada vez más sectores tienen claro el sistema de contradicciones que recorre la liquidación de nuestro tejido productivo, o del poco que quedaba que está siendo arrasado desde que estalló la crisis.
La banca española, rescatada con el dinero de todos y preocupada de pagar sus deudas con el capital extranjero a base de exprimirnos, niega el crédito a las empresas. Mientras, a golpe de mandato de la Troika, miles de millones son entregados a bancos norteamericanos y alemanes a costa de dejar a miles de familias, como las de los compañeros y compañeras de Metales Extruidos, sin nada. O al menos eso es lo que pretenden… porque de momento Metales Extruidos no se cierra.
Metales Extruidos es la primera factoría de procesos integrados del aluminio de Europa en peligro de desaparecer tras ver la luz el nuevo Expediente de Regulación de Empleo entregado por la dirección de la empresa. Desde la incorporación de los nuevos gestores por orden del Consejo de Administración, las decisiones tomadas han llevado a la empresa a la situación actual.
Gestores con la única misión de cerrar la empresa siendo prácticamente imposible su reapertura, con el objetivo de recuperar la inversión y asegurar beneficios a los accionistas, a consta de destrozar a trescientas quince familias de Valladolid y alguna mas del resto del país.
Se han celebrado diversas manifestaciones y concentraciones por parte de los trabajadores y sus familias, claro ejemplo, la marcha de los trabajadores el día 29 de enero desde la fábrica en el pinar de Jalón hasta la plaza del Carmen en Delicias.
La marcha, camino del centro, paró en las oficinas del los principales bancos del país al grito de ¡ladrones!, acusando a los bancos de solo financiar a las grandes empresas y multinacionales.
El nuevo ERE se le entregó al Comité de Empresa en una reunión a última hora de la mañana del 7 de febrero:
– La vigencia del expediente será desde el 1 de marzo hasta el 31 de diciembre de 2013.
– Afectará a TODOS los trabajadores de la compañía, (jalón, delegaciones y jubilaciones parciales). Únicamente queda excluido… ¡el director general!.
– Los contratos de los trabajadores se verán suspendidos todo ese tiempo (10 meses).
– Seguirá en vigor el expediente actual y según se vallan cumpliendo los 180 días de suspensión del actual, comenzará a aplicarse el nuevo.
– Durante el tiempo que dure esta situación, para atender aquellas necesidades que surjan, quedaran en la fábrica: Personal de mantenimiento, enfermería, Recursos Humanos, portería y vigilancia. El número de personas de cada departamento será una o dos como máximo.
El 6 de febrero volvimos a encontrarnos en la concentración frente a las Cortes de Castilla y León. Los trabajadores se concentraron también al día siguiente frente a la fábrica, para apoyar al Comité que había sido llamado a una reunión por la empresa.
Atentos a las convocatorias. Acudamos todos a apoyar a la plantilla de Metales Extruidos. Su ejemplo es el de cientos en toda España…. con firmeza y el apoyo de la gente ¡Sí, se puede!