Tras conocerse el triunfo del Brexit el Ibex-35 se desplomó un 12,35%. Fue la mayor caída de la historia en un solo día, mayor que tras la quiebra de Lehman Brothers o los atentados del 11-S. ¿Por qué el Brexit amenaza con golpear a España en mayor medida que a otros países europeos?
La primera clave la proporciona el editorial de El País, al afirmar, el día antes de la celebración del referéndum, que “cualquier convulsión económico-financiera mundial (y el Brexit lo sería) perjudicará más a los más vulnerables. Con una deuda superior al tamaño del PIB, España es uno de ellos. Cuidado”.
Somos más dependientes, y por ello mismo más vulnerables a terremotos económicos y políticos como el Brexit.Es significativo que las bolsas europeas que registraron mayores caídas fueran la griega y la española, mientras el bono alemán se convertía en valor refugio y recuperaba intereses negativos. «Somos más dependientes, y por ello mismo más vulnerables a terremotos económicos y políticos como el Brexit»
Los países más fuertes descargan la factura de las crisis sobre los más débiles y dependientes.
En las dos reuniones al más alto nivel donde la UE ha tratado qué posición tomar ante el Brexit, España ha quedado excluida, mientras que sí han participado, junto a Alemania o Francia, países como Italia u Holanda.
Es expresión de la degradación política que Washington y Berlín nos imponen, necesaria para rebajar las resistencias nacionales a sufrir un mayor grado de saqueo.
Las consecuencias del Brexit las sentiremos en nuestros bolsillos. La prima de riesgo española subió el día después del referéndum de los 138 a los 169 puntos. Encareciendo el precio a pagar por una financiación exterior de la que se sigue dependiendo. España necesita pedir prestado anualmente 400.000 millones de euros al capital extranjero.
Liberarse de esa dependencia de la financiación exterior, a través de un cambio en el modelo de crecimiento que desarrolle la economía nacional, es el primer paso para poder sortear sacudidas como el Brexit.
La salida de Reino Unido de la UE va a golpear la cuenta de resultados de la oligarquía española. Londres es el segundo destino inversor para los bancos y monopolios españoles, con 62.000 millones acumulados. El Santander obtiene de Reino Unido el 14% de sus beneficios, Telefónica el 16% e Iberdrola más de un tercio.
Lo que previsiblemente alentará que la oligarquía española intente recuperar parte de las pérdidas que el Brexit le suponga incrementando el saqueo sobre la población con mayores recortes.
Pero las consecuencias no solo serán económicas. El Brexit ya está influyendo en la política española.
Con una mayor presión para que en un país tan importante como España, la cuarta economía de la zona euro, se forme en el plazo de tiempo más breve un gobierno que prosiga la ejecución de los recortes y garantice el pleno alineamiento de España con los mandatos de Washington y Berlín.
Y proporcionando un balón de oxigeno a las fuerzas que encabezan los proyectos contra la unidad.
El triunfo del Brexit está cuarteando a un Reino que está menos Unido.
La mayoría de escoceses -un 62%, y hasta un 74% en la capital Edimburgo- votaron por permanecer en la UE. Y ahora reclaman un segundo referéndum donde la independencia tiene más probabilidades de ganar.
También en Irlanda del Norte fueron mayoría los votos europeístas, con un 56%, reforzando las reivindicaciones en favor de un referéndum sobre la reunificación de Irlanda.
Una onda expansiva que ataca también la unidad en España.