SELECCIÓN DE PRENSA NACIONAL

Mare Nostrum también se echa en manos de los fondos buitres

BMN (Banco Mare Nostrum) se ha sumado a las entidades que se echan en brazos de los fondos oportunistas o ‘buitres’ para sanear su balance. Ha vendido una cartera de créditos fallidos sin garantía valorada en 1.400 millones al fondo Marathon por 41, es decir, aproximadamente un 3% de dicho valor. Aunque se trata de precios de derribo, la entidad que preside Carlos Egea obtiene dos importantes ventajas: reduce su balance (y, en consecuencia, sus necesidades de capital) al librarse de un lastre y obtiene una pequeña plusvalía al tener completamente provisionada esta cartera.

Como BMN ya ha tenido que provisionar el 100% de la pérdida de esta cartera, puede venderla muy barata porque todo lo que consiga por ella es beneficio. Pero, aunque la vendiera por cero euros, la fusión de Caja Murcia, Granada y Sa Nostra obtendría un gran beneficio de esta transacción. Este se deriva de que reducirá su activo (situado en algo más de 52.000 millones) en esa cuantía. Es decir, el banco adelgaza quitando ‘grasa’ del balance.

Y como las necesidades de capital se calculan sobre los activos ponderados por riesgo, esta venta reduce el capital necesario, o dicho de otra forma, eleva la solvencia del banco (principal objetivo del sector en estos momentos de mayores exigencias regulatorias) y permite destinar ese exceso de capital a actividades más productivas que los créditos incobrables.

BMN ha traspasado a Sareb 5.819 millones de exposición inmobiliaria y tiene que reducir también su balance al ser una entidad nacionalizada parcialmente: el FROB controla el 65% de su capital. Respecto a esta participación, el fondo de rescate no ha señalado ningún objetivo de desinversión, puesto que la prioridad está puesta en las subastas de NCG Banco y Catalunya Banc.

Locos por comprar créditos fallidos

Las carteras de créditos morosos o fallidos (que la entidad considera incobrables y debe provisionar al 100%) son uno de los activos más demandados por los inversores internacionales junto a la bolsa, el inmobiliario y la deuda pública, según José Sevilla, director general de Bankia. En este caso, la demanda viene de fondos especializados en el mercado de crédito y la operación consiste en comprar estas carteras prácticamente gratis para tratar de recobrar parte de los créditos que las componen a los clientes morosos. Todo lo que recuperen es beneficio.

Otra operación relevante de este tipo fue la venta de una cartera de fallidos de 600 millones de Liberbank a Cerberus en febrero, también por un 3% de su valor nominal. El Financial Times se hizo eco de esta tendencia la semana pasada; citaba las 30 ofertas que tiene Sareb por la cartera Abacus de 300 millones en hipotecas residenciales morosas (en este caso, el atractivo es mayor puesto que hay una garantía inmobiliaria que se queda el comprador si no recobra el préstamo) y de la puesta en el mercado por parte del Sabadell de otra de 650 millones de crédito al consumo. Según cifras de PwC, en lo que va de año se han vendido 9.000 millones de préstamos en nuestro país.

Los fondos oportunistas norteamericanos cuentan con unos 90.000 millones de euros para invertir en crédito distressed, según el rotativo británico, y llevan años esperando a que los bancos españoles se decidan por fin a deshacerse de estos activos. El retraso se explica por la resistencia a asumir pérdidas de la banca desde el inicio de la crisis. Pero una vez que las autoridades han obligado a las entidades a sanear sus balances provisionando estas minusvalías, las entidades están dispuestas por fin a vender a precios de derribo, que es la oportunidad que estaban buscando para hacer negocio en nuestro país.

Marathon es un fondo radicado en Nueva York especializado en el mercado de crédito con 10.000 millones de activos gestionados. Se trata de uno de los vehículos que han acudido a la oportunidad de comprar a precios de derribo en nuestro país, aunque de momento no ha abierto oficina. Sí lo han hecho otros fondos oportunistas como Lone Star, que ha comprado activos a Santander y a Royal Bank of Scotland e intentó hacerse con una cartera de fallidos de BBVA por 1.500 millones, aunque las negociaciones no llegaron a buen puerto. Otros fondos están en proceso de abrir sucursal en nuestro país para participar en esta fiesta.