El sector del metal está que saltan chisas ante la situación de recortes de plantilla, ERE´s y periodos de paro que les proponen. En Asturias, Acerlor-Mital plantea un plan que no convence ni a los trabajadores ni a los sindicatos. La orientación que dirija el rumbo de este sector es crucial en el futuro de este sector productivo tradicional en Asturias. No se trata tan solo de los despidos y ajustes que la multinacional realice dentro de su propia plantilla. Diferentes empresas dependientes en el volumen de trabajo se verán afectadas con la decisión que se tome. Ayer se reunían las empresas auxiliares, a las que la multinacional les planteó un reajuste con 500 despidos y la promesa de su recolocación antes de 2011, junto con la aplicación de un plan de prejubilaciones mediante contrato relevo para evitar el despido traumático de 200 trabajadores, la única garantía de que los vuelvan a llamar son las prejubilaciones por las cuales ajustarán el número de trabajadores que consideran necesarios. Mediante este mismo mecanismo la multinacional contrataría otros 300 trabajadores cubriendo puestos que hasta el momento eran cubiertos mediante subcontratas. La contestación de las cúpulas de UGT, CCOO y USO fue una negativa con la que manifiestan no estar de acuerdo con estas medidas, ya que no se asegura ni la recolocación de los trabajadores ni las condiciones de los mismos ni el futuro del sector. De esta forma hoy aseguran que están trabajando en redactar una alternativa favorable para los trabajadores, la industria auxiliar y el sector en general.La unidad de las empresas dependientes para dar una alternativa viable que solucione la situación del conjunto de trabajadores y empresas afectados es fundamental, ya que la dependencia multinacional marca el paso de la producción y la creación de riqueza, empleo y condiciones de vida y de trabajo de las empresas auxiliares. Asegurar el futuro de éstas debe ser un papel fundamental de estas negociaciones. Un compromiso firme y una alternativa que blinde los contratos a largo plazo de la industria auxiliar, dando rentabilidad, trabajo y riqueza son clave para que el tejido industrial dependiente y cautivo pueda cobrar fuerza. Marcar a las multinacionales condiciones que aseguren el progreso y la creación de riqueza y empleo, no se debe aceptar la relación actual por la cual las multinacionales llegan, sacan el pringue y se van con los bolsillos llenos a nuestra costa, a costa de sacar el pringue gratuitamente, sin dar nada a cambio, tan solo unos puestos de trabajo y una empresa auxiliar efímera que dejan detrás y se borran dejando tras de sí paro y destrucción de tejido industrial propio.