Soberanistas e unionistas se han cruzado multitud de documentos públicos con adhesiones de personalidades de la vida política y cultural en las últimas semanas, a favor y en contra de la independencia de Catalunya
El proceso soberanista catalán se ha convertido en una guerra de manifiestos. No hay semana en que un número variable de personalidades de la vida política, económica o cultural -o todo a la vez- no firmen un documento posicionándose a favor o en contra de la independencia de Catalunya, o de tal o cual aspecto relacionado con el procés. Ayer tuvimos el penúltimo ejemplo, pero hay muchos más.
Unas 150 personalidades de la política y la vida pública catalana firmaron este lunes un manifiesto que insta a los partidos a incluir en sus programas para las elecciones del 21D tres puntos consensuados: la celebración de un referéndum pactado con el Estado después de los comicios, la retirada del artículo 155 de la Constitución y la liberación de los miembros del Govern y los líderes de la ANC y Òmnium Cultural, en prisión preventiva por un supuesto delito de rebelión.
El documento, que se presentó este lunes en el Colegio de Periodistas de Barcelona, lo ha promovido el historiador Borja de Riquer, y lo suscriben personalidades que abarcan un amplio espectro de la política catalana. Desde los ex consellers Andreu Mas-Colell (CiU), Joaquim Nadal y Antoni Castells (PSC) a los ex coordinadores de ICV Joan Herrera y Dolors Camats, pasando por el ex presidente de ERC Josep Lluís Carod-Rovira, el ex diputado de la CUP David Fernández o el ex presidente del Parlament Joan Rigol, así como los secretarios generales de CCOO UGT Cataluña, Javier Pacheco y Camil Ros, y artistas como el músico Jordi Savall, la actriz Emma Vilaresau o el escritor Jaume Cabré, entre muchos otros.
Puigdemont promueve desde TwitterEste posicionamiento se hizo público a la manera clásica, con una rueda de prensa de presentación. Pero no es lo que se lleva. Los manifiestos se difunden cada vez más por las redes sociales, como ‘Per una llista unitària’, que ayudó -muy poderosamente- a difundir el propio Carles Puigdemont desde su cuenta de Twitter, el pasado sábado, y que este martes superaba las 233.000 firmas.
El texto, como su propio nombre indica, pide que los partidos soberanistas formen una única candidatura de consenso, para «derrotar otra vez al unionismo», así como para conseguir «el fin de la ocupación, la libertad de todos los presos políticos y la República». No detalla quien debería encabezar esta lista, aunque el aval de Puigdemont ya es significativo. Así como que entre los primeros firmantes abundan personalidades vinculadas de una u otra forma al PDeCAT.
También desde el entorno del PDeCAT se usó esta vía en fecha reciente -aunque la sucesión de acontecimientos haya hecho que parezca que hayan transcurrido meses-, en el intervalo entre la declaración-suspensión de la independencia del 10 de octubre y la proclamación de la República catalana del 27 del mismo mes.
Un centenar largo de militantes y simpatizantes de la formación lejos de las primeras líneas de decisión, entre los cuales Àngel Colom, Eric Bertran o Víctor Terradellas, firmaron un texto reclamando a Puigdemont que levantara la suspensión y proclamara la república, ignorando el requerimiento del Gobierno central previo a la aplicación del 155. Como así sucedió, no sin diversos giros entremedio. Los firmantes especificaron que no estaban constituidos en ningún «movimiento interno ni plataforma», con la idea de evitar la apariencia de disensión interna.
Más clara es la disensión interna en el otro partido tradicionalmente hegemónico en la política catalana y en horas bajas, el PSC, en el que diversos alcaldes y concejales han manifestado su desacuerdo con el apoyo de los socialistas a la aplicación del 155. A la vez, el pasado viernes, diversos dirigentes de la corriente ‘Nou Cicle’, del entorno del histórico Raimon Obiols, firmaron un documento que exigia «la libertad de los presos», en referencia -sin citarlos- a los miembros del Govern en prisión preventiva y a los ‘Jordis’.
Contra el 155También contra la aplicación del 155 ha habido otros posicionamientos. Una veintena de medios catalanes publicaron la semana pasada un editorial conjuntoen el que pedían la liberación de los «miembros del legítimo gobierno de Catalunya», así como estos puedan «reprender sus funciones».
Igualmente en relación a los medios catalanes y el 155, las direcciones y los trabajadores de la televisión y la radio públicas catalanas se posicionaron justo antes de esta intervención, reclamando mantener su «pluralidad y veracidad». El PP renunció finalmente a intervenir directamente la gestión de TV3 y Catalunya Ràdio, que han seguido manteniendo la línea anterior a la aprobación del 155.
Aun hay más posicionamientos desde el soberanismo. A favor del modelo de escuela catalana, de los trabajadores de la Conselleria de Cultura, del Institut d’Estudis Catalans e incluso de alcaldes sardos en solidaridad con la causa independentista. Y también unos mil juristas catalanes han firmado para pedir la libertad de los ‘Jordis’. Pero el flanco unionista tampoco ha renunciado al arma de los manifiestos.
Los manifiestos unionistasAunque sin adhesiones, en la última gran manifestación convocada en Barcelona por Societat Civil Catalana -con el aval de C’s, el PSC y el PP-, se leyó el documento ‘Todos somos Cataluña’, que apunta al 21D como fecha para «recuperar la normalidad institucional» en Catalunya. Esta misma entidad ya había promovido, antes de que se celebrara el referèndum del 1-O, el texto ‘Aturem el Cop’, con adhesiones de políticos de los tres partidos e intelectuales como Félix de Azúa, Ignacio Martínez de Pisón o Isabel Coixet.
Algunos de estos mismos intelectuales repitieron más adelante. A mediados de septiembre, El País difundió un manifiesto de casi un millar de creadores «que se definen de izquierdas» en contra del referéndum del 1-O, que calificaban de «estafa antidemocrática» y de «trampa para la sociedad catalana». Entre los firmantes más destacados, Coixet -el primer nombre-, Juan Marsé, Rosa María Sardà, Victoria Camps o Javier Mariscal. El propio diario explicaba que entre las adhesiones destacadas había las de 37 creadores catalanes.
Muchos de los firmantes de este texto insistieron posteriormente. El 8 de octubre, personalidades de la izquierda catalana no independentista, incluyendo artistas, políticos y sindicalistas, presentaron el documento ‘La DUIes una imposición antidemocrática’, en el que exigían elecciones anticipadas en Catalunya -como las que acabó convocando unilateralmente Mariano Rajoy-. El texto, impulsado por Recortes Cero, lo firmaban, entre muchos otros, el exsecretario general del PCE Paco Frutos -muy aplaudido en la última manifestación de SCC-, Pisón, la exdiputada de En Comú Podem Dolors Terradas, Inka Martí o José Luis Guerín.Apenas dos semanas después, el 26 de octubre, ‘El Periódico’ publicó un nuevo manifiesto, ‘Retirar la declaración unilateral de independencia. Convocar Elecciones’, en el que exigían a Puigdemont y los partidos independentistas exactamente lo que rezaba el enunciado de su posicionamiento. Se adherían de nuevo Coixet y Pisón, Marsé, el académico Francisco Rico o el exfiscal Carlos Jiménez Villarejo.