Salud

La batalla contra el colesterol

Solanum lycopersicum

Según el diario «Daily Express», que da hoy la noticia, las pí­ldoras podrí­an ponerse a la venta este mismo mes sin receta médica y el tratamiento costarí­a poco más de 1,14 euros al dí­a.

La nueva íldora roja, cuyo nombre es "Ateronon", fabricada por Cambridge Theranostics Lt, tiene, según sus promotores, todos los beneficiosd e la dieta mediterránea.El argumento se basa en pruebas realizadas con 150 personas que sufrían de enfermedades cardíacas probaron que los niveles de grasas perjudiciales en la sangres se redujeron prácticamente a cero en ocho semanas.¿Dónde está el secreto? El secreto reside en el licopeno, uno de los antioxidantes naturales más poderosos presente en la piel del tomate. La multinacional Nestlé elaboró un compuesto de dicha sustancia que es la base del nuevo fármaco.Según sus creadores, "el potencial es enorme. Creemos que va a posibilitar una reducción del número de personas que sufren ataques cardiacos o apopléjicos así como otros problemas derivados del daño arterial".El poco más de 1,14 euros al día es el precio a pagar a cambio de no tener que variar el estilo de vida o de alimentación. "Cambiar de dieta o de estilo de vida es difícil, pero es fácil en cambio tomar una píldora diariamente", afirma Ivan Peyaev, cardiólogo y director médico del laboratorio fabricante.La noticia es extraordinaria. A pesar de que la batalla contra el colesterol es sólo una pequeña parte de la batalla real contra las enfermedades cardiovasculares, cuyo corazón está en la inflamación crónica y silenciosa de las arterias. A pesar de que las farmacéuticas hacen lo que los médicos no han hecho durante muchos años. Si la alimentación se ha abstraído de la práctica clínica durante décadas como elemento terapéutico, las multinacionales tienen ahí un hueco que aprovechan en beneficio propio, puesto que, en definitiva si hay una mayor conciencia y compromiso del enfermo con su propia salud a través de la alimentación no importa. Lo cual nos somete a tener que depender de por vida de sus píldoras. A pesar de ello, la noticia es extraordinaria.