La oferta de la empresa de reducir 3 de los 26 despidos iniciales previstos en el ERE e indemnizar a los despedidos con 45 días por año trabajado ha sido rechazada por 28 votos en contra, 14 a favor y 10 en blanco. La empresa ya anunció en septiembre la puesta en marcha de un plan de viabilidad. ¿No debería ser este el que se sometiera a votación?
La lanta de Fuentes de Ebro pertenece a la guipuzcoana Grúas Jaso, que ya planteó en septiembre pasado la necesidad de recortar 161 puestos de trabajo, la mitad de su plantilla en las tres plantas de Olaberría, Idiazabal y Fuentes de Ebro (ésta última en Zaragoza) después del ERE sobre 150 trabajadores que acometió hasta octubre. En el plan preveía reforzar el desarrollo tecnológico y la exportación a Hispanoamérica y Países Árabes para resistir a la caída drástica de ventas (de 1.019 gruas en 2007 a 36 previstas para 2009) por la hecatombe de la construcción. Según nos han informado los compañeros del sindicato OSTA (Oganización Sindical de Trabajadores de Aragón), la alternativa del comité de empresa, consistente en un ERE de suspensión rotativo (con los complementos salariales correspondientes) no ha sido, incomprensiblemente, contemplado por la empresa a pesar de que no encarece su presupuesto. La firma de las actas de acuerdo o no acuerdo sobre este ERE se pospuso a hoy día 23 de diciembre, a la espera del resultado de las asambleas en los diferentes centros productivos de la compañía. La actividad del comité de empresa de la planta zaragozana por alcanzar otra solución que no sean los despidos les ha llevado estos días a buscar apoyo en Inspección de Trabajo, en Dirección General de Trabajo, y la Consejería de Industria del gobierno aragonés para que presenten en Madrid informes favorables a sus tesis. Aunque los precedentes de la implicación del gobierno aragonés en el caso de otras empresas, como Wrigley en Tarazona no son alentadoras.Los bancos ahora no financian los planes de salvamento de este tejido. Ni los fondos públicos. Y este es un escollo fundamental, el que los recursos del país caigan en el agujero negro de una oligarquía financiera pendiente sólo de su posición en los mercados internacionales impide la salvación y la reconversión de la pequeña y mediana empresa. Incluso grandes empresas como Air Comet, propiedad del presidente de la CEOE, hasta pequeñas como la calderera Martínez Solé en Villarrobledo, Albacete, ambas condenadas al cierre definitivo, ponen de manifiesto este escollo.Las luchas de trabajadores como los de Jaso ponen de manifiesto que, si hay planes de viabilidad sobre la mesa, claro que es posible dar una salida a la empresa salvaguardando los intereses de los trabajadores, igual que sería posible cambiar el modelo productivo del país y velar por las necesidades sociales si se liberaran los recursos hoy secuestrados por el rescate bancario, por el despilfarro de administraciones públicas, por los sueldos escandalosos de directivos y altos cargos que se aferran a sus privilegios, por los impuestos ridículos que se aplican a las grandes fortunas…Sin duda, habrá que luchar contra la cortedad de miras de muchos empresarios que sólo ven el enriquecimiento inmediato como línea de actuación porque les lleva al cierre. Al fin y al cabo, el verdadero enirquecimiento inmediato hoy es coto privado de los bancos a nuestra costa y a la suya.