La Cátedra de Emresa Familiar de la UMU ha presentado un informe del que podemos destacar varias cuestiones. La situación de las empresas familiares se ve con más optimismo y la mayoría invierten en mejorar sus negocios en este tiempo de crisis.La característica fundamental que diferencia las empresas familiares del resto, es que sus integrantes apuestan y se aprietan el cinturón para mejorar la situación, ya que los beneficios son redistribuidos entre todos ellos. De este tipo de empresas podemos sacar la enseñanza de empresas que están en situación crítica, cambien horas de trabajo de su plantilla por accionariado de la empresa. Que empresas viables que se plantean presentar expedientes de regulación de empleo, fueran nacionalizadas parcialmente de forma que se pueda invertir en crear puestos de trabajo productivo, y que esos beneficios reinviertan en mejora.La situación a contracorriente de las empresas familiares, es que en Murcia es donde peores condiciones de impuestos y bonificaciones fiscales con respecto al resto de comunidades. La pequeña y mediana empresa, por otra un nutriente esencial que da puestos de trabajo y que hay que potenciar y que el Gobierno toma poco en cuenta.En la presentación de este informe en el que colaboran la Asociación Murciana de Empresa Familiar (Amefmur ) apoyado por la Consejería de Universidades, Empresa e Investigación y Caja Murcia, y presidido por Juan Monreal hay una declaración a destacar. Juan Iranzo, Director del Instituto Económico y decano del Colegio de Economistas de Madrid, dice así de claro “No se sale de la crisis renovando aceras sino invirtiendo en investigación, desarrollo e innovación” “Deben orientarse a favorecer el desarrollo de la industria”.Zapatero dice que quién tenga una alternativa que la diga, y parece que su jefe Botín, le ha recomendado ponerse unos tapones en los oídos para no escuchar. Muchos son los sectores que van a contracorriente de la valoración y orientación del Gobierno con la crisis. I+D+I que se desarrollen para potenciar el avance de la industria y la producción, son la línea que multitud de sectores piden y que proporcionaría una salida de la crisis fortaleciendo el tejido industrial. Unir a todo lo unible en una alternativa que tenga una orientación de conjunto enfocada a I+D+I, que se enfoque para que la economía productiva se desarrolle, que desarrolle sectores estratégicos como las energías renovables, que ahorre de los presupuestos del Estado para asegurar los subsidios y necesidades mínimas, debe ser un objetivo a conquistar.