La cuenta atrás de la Huelga General ha empezado. Más de medio millón de personas en Madrid y millón y medio envsesenta capitales recorrieron las calles en una demostración de fuerza frente a la Reforma Laboral. Manifestaciones unitarias por toda España como preludio a una huelga general que ya ha sido convocada por la mayoría de sindicatos generalistas.
Hace dos años se denunciaba desde estas páginas la idea de que cuando se acabara la crisis España volveríamos a las condiciones anteriores al 2008. La apropiación del 30% o 40% de nuestros salarios y rentas es permanente, y la, todavía lejana, recuperación económica, significará, por este camino, la consolidación de condiciones de vida paupérrimas para la mayoría. «Ante el saqueo salarial que supone la reforma laboral: ¡Unidad!»
Los altavoces instalados en la Puerta de Alcalá que esta Reforma Laboral “va a provocar una profunda regresión social para toda la vida, de manera permanente”. Al mismo tiempo hemos podido leer y escuchar declaraciones públicas afirmando que “esta Reforma Laboral va a provocar un evidente traspaso de rentas de los trabajadores al capital”. Y lo hemos escuchado incluso en medios en los que hace tres meses no hubiera sido posible hacerlo.
Por una parte las agresiones que estamos sufriendo contra nuestras condiciones de vida han alcanzado un grado tan virulento que todos los sectores están respondiendo. Pero por otra parte solo una política de Frente Amplio de Unidad que haga esfuerzos por unir a todos los sectores unibles, aislando a los responsables del saqueo, puede convertir en un éxito esta batalla política, empezando por la Huelga General del próximo día 29 de Marzo. Cada vez más sectores de nuestra sociedad reaccionan y lo hacen denunciando lo que ya es una evidencia para la mayoría, Washington y Berlín nos saquean, con la sumisa colaboración de la banca nacional y el Gobierno. Esta reforma laboral solo beneficia a multinacionales y monopolios, y los irrisorios beneficios planteados para las pymes se convertirán en veneno a medida que el poder adquisitivo de los trabajadores continue disminuyendo, y con él, el consumo.
Todo esto, como un crisol, se reflejó en la jornada del 11 de Marzo. Desde las filas de CCOO y UGT, hasta el bloque de la CGT o la CNT. Desde los miles de ciudadanos que acudieron a la convocatoria, hasta el bloque crítico del 15-M. Desde las pancartas de Unificación Comunista de España, hasta las banderolas de Izquierda Anticapitalista. El pasado domingo la lucha contra los recortes en Sanidad y Educación, la lucha de los pensionistas y la de los estudiantes fueron una misma lucha en las calles de toda España.
¿Es suficiente?, ni mucho menos. De hecho está todo por hacer. Las dos semanas restantes hasta la celebración de la Huelga deben ser un camino recorrido de forma unitaria.
En el que el carácter de la huelga sea, no solo obrero, sino cada vez más social. Que aquellos que apoyan esta reforma laboral se queden solos y aislados el 29 de Marzo, como la minoría a la que representan.
Piquetes unitarios, asambleas informativas en las fábricas, barrios, universidades y puestos de trabajo… las diferencias son secundarias y salvables cuando lo que nos jugamos.
Ante el saqueo salarial que supone la reforma labora… ¡Unidad, unidad, unidad!